El CEO de Citigroup, Michael Corbat, dijo que la presunta estafa por 400 millones de dólares que cometió en su contra Oceanografía, empresa proveedora clave de la estatal Pemex, era un "crimen despreciable" y advirtió que sería implacable buscando recuperar el dinero del banco.
Era febrero de 2014 cuando las autoridades mexicanas comenzaron a buscar a Amado Yáñez Osuna, el dueño de Oceanografía, mientras que elementos de la PGR, SAE, SAT y otras corporaciones sitiaron sus instalaciones en Ciudad del Carmen. Se hablaba de corrupción, delincuencia organizada, lavado de dinero y un sin fin de acusaciones en contra de quien, hasta hace unos meses, era el dueño de la más grande empresa naviera mexicana.
Todo parecía cuadrar: Una gran estafa, un presunto delincuente, una empresa mexicana burlando los controles de uno de los bancos más poderosos de Estados Unidos, una autoridad local apoyada por uno grupo de medios de comunicación con la firme convicción de acusar y sepultar a Oceanografía ante la opinión pública.
Ocho meses después de estallar el escándalo, Amado Yáñez Osuna salió de comer de un restaurante de Santa Fe, en la Ciudad de México, cuando fue detenido sobre Constituyentes por elementos de la PGR para ampliar su declaración, sin sospechar que su destino era el Reclusorio Sur, donde sigue encerrado hasta el momento de escribir estas líneas.
Así parece que terminaba la historia de uno de los empresarios más prominentes de los gobiernos panistas y más incómodos para la administración que encabeza en Pemex, Emilio Lozoya.
Sin embargo, uno de los testigos clave de este caso, Jorge Alejandro Hernández Ortega, presentó una denuncia de hechos en la PGR el pasado 16 de junio, en contra de quien o quienes resulten responsables de las irregularidades que encontró en su declaración del 27 de febrero de 2014.
Regresemos un poco en el tiempo. Eran las 3 de la tarde del 27 de febrero de 2014, cuando de acuerdo con el acta UEIORPIFAM/AP/065/2014, Jorge Alejandro Hernández Ortega se presentó en la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada. En el documento explica que es ingeniero electromecánico y desde hace 34 años se dedica a la adjudicación, control, construcción y manejo de materiales, personal, administración de bienes y servicios a bordo de embarcaciones.
Dice que el dos de abril de 2012 comenzó a trabajar en Oceanografía, como representante de la embarcación DP-III-HALANI-1. Más adelante, declara que descubrió pagos ilícitos hechos de Oceanografía a personal que laboraba en Pemex para que firmaran obras que no estaban terminadas, autorizaran aumentos en los costos, además de que se comprometían a modificar generadores de cobro para beneficiar a la empresa de Amado Yáñez.
"A bordo descubro varios pagos ilícitos, toda vez que el ingeniero Luis Antonio Toledo Soberanes, quien aparece con categoría de ingeniero de campo, el cual se desempeña como supervisor a bordo por parte de la paraestatal Pemex, cobra 50 mil pesos a Oceanografía, por este pago, el ingeniero Luis Antonio Toledo, es así que yo pregunto, que como personal de Oceanografía, por qué tengo que pagar a personal de Pemex", dice el acta de la PGR. "Es así que me doy cuenta que esta persona cobra a mi nombre, es así que por el soborno que esta persona recibía, él daba firmas para cobro de obra que aún no se terminaban, firmaba obras que no se realizaban, permitía aumento en los costos en las obras que se realizaban, permitía la alteración de generadores de cobro, entre otras cuestiones".
Jorge Alejandro Hernández Ortega era Superintendente de Construcción de Oceanografía, y según el acta de la PGR, dentro de sus actividades estaba realizar las estimaciones de gastos internos para que Banamex fondera la operación de Oceanografía, específicamente en el Halani-1.
Dijo además, que cuando solicitó el pago de la nómina del 8 al 22 de septiembre de 2013, estimada en 410,000 pesos, Jorge Terán Vanoye, ingeniero de Halani-1, le respondió que no había dinero, que tenían que ir con "El maquillador" para resolver el problema.
"En ese momento no sabía que se trataba del señor Israel Varela, jefe del patio de comisariato de la misma empresa, es así que me dirijo al muelle siete del puerto pesquero Laguna Azul de la API (Administración Portuaria Integral), dirigiéndonos a la planta baja, y llegamos a la oficina de Israel Varela, en ese momento le comentamos que nos había mandado Jorge Terán, y que nos había indicado que tenía que arreglar esos documentos, que en lugar de 410,000 pesos, debían de ser un 1,400,000 pesos. En ese momento nos dice que sí, que se iba a tardar un momento, pero que podía arreglarlo", agrega el acta.
De acuerdo con la declaración, "El maquillador" alteró la sumatoria de metrajes firmados de toneladas de fierro, además de que cambió las fechas 60 días hacia atrás para que Banamex realizara el proceso para adquirir el factoraje y obtener el dinero que requerían para pagar la nómina y casi un millón de pesos más.
"Posterior en el procedimiento vimos cómo cortan las cantidades y alteran estas por medio del programa (software), cambiando fechas, cantidades, y las firmas que se colocan en la documentación son apócrifas, las cuales las realiza una gente de confianza de Jorge Terán, el cual no recuerdo su nombre", dice el acta de febrero de 2014. "Es así que ya se genera el documento y se lleva al área de ingeniería, el cual se encarga de realizar el proceso de cobro en conjunto con el departamento de control de obra, ellos son los que hacen el servicio de manejo a bancos, tales como Banamex, con documentación totalmente apócrifa".
Los datos de esta acta contribuyeron a encarcelar a Amado Yáñez. Jorge Alejandro Hernández Ortega reconocía que se trataba de documentación falsa que se entregaba a Banamex para obtener recursos que refrescarían las arcas de Oceanografía.
Sin embargo, tuvimos acceso a una denuncia de hechos presentada en la PGR el pasado 16 de junio por Jorge Alejandro Hernández Ortega, en contra de quien o quienes resulten responsables de las irregularidades que halló en su supuesta declaración firmada bajo "presión" e impresa con fecha del 27 de febrero de 2014.
Asimismo, habla de amenazas a su integridad física y familia. En la siguiente entrega de esta columna, les presentaremos los detalles de esta denuncia.