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El milagro del diálogo entre Israel y Palestina

“Que nadie instrumentalice el nombre de Dios para la violencia”: Francisco. "Traigo en una mano la rama verde del olivo y en la otra un fusil, no permitáis que deje caer el olivo...": Arafat.

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Escrito en OPINIÓN el

Recientemente el Papa Francisco visitó Tierra Santa y las notas que dieron la vuelta al mundo fueron varios gestos, varias pequeñas cosas que pueden cambiar el mundo, como su mano en el muro de Belén, la señal de la cruz, el beso a los supervivientes, en el memorial Yad Vashem, así como el beso en el Santo Sepulcro, y su encuentro con el patriarca ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I.

Pero la foto más impactante fue quizá el abrazo con sus amigos el rabino judío, Abraham Skorka, y el jeque musulmán Ombar Abboud frente al Muro de los Lamentos en Jerusalén, en una escena que ya ha sido denominada ya como el “abrazo de las tres religiones”.

Las tres personas mantienen una relación añeja y quizá esa escena la soñaron alguna vez en Buenos Aires.

No hay que olvidar que la finalidad principal de ese viaje fue conmemorar el 50 aniversario del histórico encuentro entre el Papa Pablo VI y el patriarca ecuménico de Constantinopla Athenágoras I (1886- 1972). Aquel año de 1964 se rompió un largo silencio de siglos entre el oriente y el occidente cristiano, y constituyó el primer encuentro entre los primados de ambas Iglesias desde 1439, y decidieron entonces revocar los decretos de excomunión mutua lanzados en el Gran Cisma de 1054.

Entonces ningún Papa había visitado Tierra Santa, fue Pablo VI quien inauguró los viajes de los Papas fuera de Italia, en la época contemporánea.

Pero en el inter, Francisco aprovechó muy bien la peregrinación para tender varios puentes. Él sabe que la paz no se consigue mágicamente, sino que es un proceso que toma su tiempo y que necesita de gestos, de pequeños actitudes: “Tantas personas construyen la paz con gestos pequeños”, ha dicho.

Y en su discurso de aquel domingo 25 de mayo aprovechó la oportunidad para dirigirse públicamente a los líderes  de Israel y Palestina llamándolos a no poner trabas a un acuerdo de paz y rechazar toda incitación a la violencia.

La exhortación culminó con el gesto decidido de invitar a  los líderes de Israel y Palestina a ir al Vaticano para rezar juntos por la paz.

“En este lugar, en donde nació el príncipe de la paz, deseo dirigir una invitación a usted, señor presidente Mahmoud Abbas, y al señor presidente Shimon Peres, para elevar juntos una intensa oración, invocando de Dios el don de la paz.

“Ofrezco mi casa en el Vaticano para acoger este encuentro de oración”, dijo el jesuita antes de terminar la Misa en la Plaza del Pesebre de Belén, donde –tal vez recordando los testimonios de los refugiados-, añadió que si bien construir la paz es difícil, “vivir sin paz es un tormento”.

Esta invitación fue aceptada de inmediato por Peres y Abbas, y obviamente ha generado una serie de expectativas sobre la paz en la región.

¡De entrada el milagro ya ocurrió!

Ningún intermediario diplomático había conseguido lo que hizo Francisco, y la reunión entre ambos quizá pueda destrabar muchas cosas, que por cierto se concretará un día después de la visita oficial del presidente Enrique Peña Nieto.

Las reacciones fueron inmediatas.

Por ejemplo en la página web del Time, Christohper J. Hale escribió que “la apertura que ha logrado Francisco ha sido particularmente notable, si se consideran los esfuerzos fallidos de los Estados Unidos, a principios de primavera, para acercar a las dos partes a la mesa y comenzar las negociaciones de paz. De cualquier manera, este podría ser el impulso que necesitaba el secretario de Estado, John Kerry, para volver a poner en marcha este proceso de paz, que no ha avanzado en cuatro años”.

¡Pero no lancemos las campanas al vuelo!

La invitación de Francisco es sólo  un gesto, un símbolo, pero que en el tiempo podría destrabar mucho odio y conflictos en la región.

No sé de donde Francisco aprendió a tender puentes, pero él sabe que la paz no se consigue por arte de magia, sino que es un proceso que toma su tiempo y que necesita de gestos, de muchos: “Tantas personas construyen la paz con gestos pequeños”, afirmó en Belén.

En esta misma línea, el Papa argentino, en su discurso al Gran Mufti Muhammad Ahmad Husayn, suprema autoridad jurídico-religiosa de Jerusalén y del pueblo árabe musulmán en Palestina, lo exhortó a que “nadie instrumentalice el nombre de Dios para la violencia”. No es la primera vez que un Papa expresa esto, pero en esta oportunidad el mensaje ha tenido lugar en Jerusalén, la segunda ciudad más importante para el Islam, y recordemos las veces que líderes religiosos islámicos –en diferentes partes del mundo- han usado el nombre de Dios para lanzar fatwas (edictos) contra cristianos y judíos.

Sin embargo, la reunión será exclusivamente de carácter religiosa, así lo dijo el Papa durante el vuelo de regreso desde Tel Aviv con los periodistas.

Y bueno todo se encamina hacia ese gran encuentro

La reunión esta programada para el domingo 8 de junio  día simbólico ya que es el fin de la Pascua cristiana, el día Pentecostés. Un día antes estará en ese lugar en visita oficial el presidente Enrique Peña Nieto.

El encuentro no será una oración sincretista, sino que cada quien rezará en su fe. Los líderes políticos serán acompañados por una propia delegación oficial (de entre 12 a15 personas entre ellos habrá rabinos e imanes). A la reunión también acudirá –de último- el patriarca ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I.

Y aunque aún no se conocen detalles de cómo será el encuentro, el Papa Francisco adelantó en la rueda de prensa de vuelo papal de regreso Roma después del viaje a Tierra Santa: “En primer lugar voy a hacer una aclaración sobre este encuentro en el Vaticano: Será un encuentro de oración, no será para una mediación o buscar soluciones: no. Nos reuniremos a orar, solamente. Y después cada uno se va a casa. Pero yo creo que la oración es importante y orar juntos sin hacer otras discusiones, esto ayuda, ¿no? Tal vez no he explicado bien esto antes, como sería, ¿no? Será un encuentro de oración: habrá un rabino, habrá un musulmán y yo voy a estar allí. Pregunté, sí, creo que puedo decir, le pregunté al Custodio de Tierra Santa para organizar un poco las cosas prácticas... esto...”.

Sin embargo, la reunión del sábado tiene varios precedentes.

No es la primera vez que Shimon Peres, Mahmoud Abbas Y Bartolomé I asistirán a Roma en el papado de Francisco; Peres estuvo ahí el 30 de abril de 2013 mientras que Abbas lo hizo el 17 de octubre. En aquella ocasión, Abbas recibió del Papa un regalo -una pluma para escribir- y pronunció la frase que no pudo pasar desapercibida "espero firmar con este bolígrafo los acuerdos de paz con Israel".

Y recordemos que el patriarca de Constantinopla asistió en marzo de 2013 a la misa inaugural del papado de Francisco; un hecho no ocurría desde hace mil años, desde el Gran Cisma de Oriente en 1054.

 

Algunas muestras espontaneas de alegría por el encuentro

La Conferencia Episcopal Argentina publicó un folleto en varios idiomas donde se lee: “Un minuto por la paz” y el subtítulo, “junto al Papa Francisco”.

Reza el texto: “Donde te encuentres a las 13 horas inclina tu cabeza y reza por la paz, cada uno según su propia tradición”. Y concluye: “Construir la paz es difícil, pero vivir sin la paz es un tormento”.

“Estamos invitando a todos los creyentes y personas de bien a detener nuestra marcha cotidiana el próximo día viernes 6 de junio a las 13 horas en cada país, en el lugar donde cada uno esté, en la calle, en familia, en la escuela, en el trabajo, en la fábrica, en el campo, en el barrio, en la universidad, y dedicar un minuto a rezar por la paz. Lo hemos llamado 'un minuto por la paz’, como una propuesta simple, masiva, testimonial para ofrecer la oración y asumirnos como promotores de la paz”.

Deseamos así contribuir -indica el comunicado- a este acontecimiento histórico del que esperamos pueda nacer un nuevo camino de encuentro entre los pueblos de Palestina e Israel, en todo el Medio Oriente y donde hay conflictos abiertos que amenazan la paz.

Se adhieren a la iniciativa varias organizaciones laicales.

 

Los invitados:

  • Mahmud Abbas es el presidente –el rais- de la Autoridad Nacional Palestina desde el 9 de enero de 2005. Estuvo entre los fundadores de Fatah; su nombre en la clandestinidad era Abu Mazen.

 

  • Shimon Peres. Actual presidente del Estado de Israel. Es junto con Isaac Rabin y Yasser Arafat, premio Nobel de la Paz en 1994. A los 84 años, Peres fue elegido presidente de Israel, anteriormente fue miembro de la knesset por 48 años, y ocupó numerosos cargos gubernamentales, incluyendo el cargo de Primer Ministro de Israel en dos ocasiones.

 

  • Bartolomé I es considerado el sucesor de "Andrés el apóstol". Es el primus inter pares en las Iglesias ortodoxas, separadas de la comunión con Roma desde  julio de 1054, fecha en que se intercambiaron ex comuniones el Papa León IX y el patriarca de Constantinopla Miguel Cerulario. Años después en 1965, las excomuniones fueron levantadas por Paulo VI y el Patriarca Atenágoras I, empero ortodoxos y católicos no han encontrado todavía la unidad plena.

 

Bartolomé I ejerce su cargo desde el año 1991. Hoy tiene una gran influencia como líder honorífico en las iglesias ortodoxas de tradición griega y eslava. Pese a su liderazgo, su cargo es únicamente honorífico, aunque preside los concilios en los que toma parte y tiene la autoridad exclusiva de reconocer nuevos patriarcados.

Lidera una iglesia de más de 300 millones de cristianos ortodoxos en todo el mundo y es el jefe de la denominada iglesia ortodoxa autocéfala de Constantinopla, con cerca de cuatro millones de fieles en varios países. En la actualidad, el cristianismo ortodoxo es la religión predominante en Bielorrusia, Bulgaria, Chipre, Georgia, Grecia, Moldavia, Montenegro, Macedonia, Rusia, Rumania, Serbia y Ucrania. Hay fuertes comunidades en Alemania, Argentina, Australia, Canadá, España, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña e Italia.

Estuvo de visita en México en 2006, donde hay un pequeño grupo de seguidores.

 

  • Francisco: No requiere presentación.

 

 

@fredalvarez