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El Metrobús que nos trajo calles completas

La evaluación del Metrobús.

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Escrito en OPINIÓN el

 

Una ciudad con las dimensiones geográficas de población como el Distrito Federal requiere de un constante trabajo en favor de la movilidad, el urbanismo y la sustentabilidad. Esta necesidad ya ha detonado acciones concretas y exitosas para mejorar los desplazamientos y calidad de vida de los ciudadanos, como fue la creación, hace poco más de 10 años, del Metrobús.

 

La semana pasada, la asociación civil El Poder del Consumidor publicó el Ranking Nacional de los Sistemas BRT (Bus Rapid Transit), donde el Metrobús de la Ciudad de México alcanzó el primer puesto y la Línea 5 de este servicio se posicionó como el mejor de todos los servicios de este tipo bajo el concepto de “calle completa”.

 

En particular destaca un excelente monitoreo y profesionalización del servicio, información y seguridad al usuario, así como la mejor tecnología sustentable en autobuses a nivel nacional. Esto se ha logrado gracias a la existencia de un órgano que regula la operación del sistema, lo que permite supervisar, controlar y evaluar horarios y rutas, con base en la demanda, haciendo los ajustes necesarios con prontitud.

 

Esto es una gran noticia para la Ciudad, pues indica que estamos caminando por la ruta correcta, pero el análisis también demuestra que existen muchos retos que aún podemos superar pues ninguno de los sistemas cumple con su nivel óptimo. Las principales áreas de oportunidad son lograr una mejor integración tarifaria y mejor infraestructura para la integración modal, así como aumentar la velocidad promedio de operación. La apuesta hoy es a la expansión del sistema Metrobús de una forma más rápida y orientada al Sistema Integrado de Transporte (SIT) que mandata la nueva Ley de Movilidad.

 

De acuerdo con los datos reportados por El Poder del Consumidor, el 74% de los recursos estatales y federales se han destinado a la infraestructura vial, 11% al espacio público, 10% a transporte público, 4% a infraestructura peatonal y 1% a infraestructura ciclista, mientras que el 70% de la población se mueve en transporte público. La construcción del SIT únicamente se logrará modificando la lógica de gasto en las calles, por lo que se priorizará la inversión a transporte público, infraestructura peatonal y ciclista que facilite el intercambio modal y ofrezca seguridad a los ciudadanos.

 

La creación de un Plan Maestro de Metrobús con visión de largo plazo será esencial para el SIT, pues permitirá ordenar los principales corredores de la Ciudad de una forma eficiente con calidad en el servicio para los usuarios y en coordinación con la red y planes de expansión del Metro. Hace 10 años llegó la Línea 1 a Av. Insurgentes, el transporte público concesionado (autobuses, micros y combis) fue removido de la avenida y los concesionarios fueron reorganizados en el marco de un nuevo servicio. El esfuerzo dio resultados, y hoy tenemos desplazamientos más rápidos, ordenados y fluidos, se mejoró la imagen urbana y se redujeron emisiones contaminantes en la zona.

 

En 2013, el Distrito Federal contaba con una red de vialidades de 10,403 km de longitud, lo cual representa entre el 25% y 30% de todo el territorio de la ciudad. En contraste, la infraestructura vial para el transporte público en la superficie con carriles confinados  era de sólo 161 km lineales, y se contaba con únicamente 121 km de ciclovías y 3.27 km de calles peatonales con accesibilidad universal.

 

Habiendo demostrado su eficiencia, hoy invertiremos para acelerar el crecimiento de Metrobús en corredores prioritarios que actualmente son atendidos por el transporte público concesionado. De esta forma los concesionarios podrán ser reordenados y, si así lo desean, asimilados dentro de las concesiones de corredores de Metrobús, con lo que tendrán incentivos a mantener y hacer eficientes las rutas alimentadoras del servicio bajo la modalidad de transporte público concesionado.

 

Calles completas en la CDMX

 

Una persona usuaria de transporte público camina un promedio de 2.5km diarios en una Ciudad donde el 21.33% de las vías no cuenta con banquetas y el 89% no dispone de rampas para el acceso de personas con discapacidad. El mejoramiento del transporte público es nuestro primer paso hacia una cultura de la movilidad, pero lo complementamos con una estrategia de diseño y construcción de calles completas, donde todos los usuarios de la vialidad tengan un lugar.

 

En una calle completa, cada usuario de la vía cuenta con un espacio para moverse de forma cómoda, eficiente, accesible y segura. En las banquetas se tienen rampas en todas las esquinas, con pavimento uniforme y espacio suficiente para moverse con carriolas y silla de ruedas, los ciclistas cuentan con espacios seguros designados para su paso, el transporte público cuenta con carriles de circulación rápida y paradas definidas, y la superficie de rodamiento de coches es cómoda y sin baches. Adicionalmente, se tiene alumbrado y presencia de árboles y plantas, para mejorar la seguridad y la imagen urbana.

 

El primer objetivo de una calle completa es garantizar la intermodalidad. A través de la inversión en infraestructura funcional para todos los usuarios de la calle, el uso de modos sustentables de movilidad se vuelve más atractivo, pues el espacio ha sido repartido, y peatones, ciclistas, transporte público y coches pueden convivir en una misma vía.

 

El segundo objetivo es garantizar la seguridad de las calles,  lo cual logramos a través de un correcto diseño vial donde se tiene accesibilidad universal, regulación de los límites de velocidad, señalética y correcta semaforización que genera cruces seguros.

 

Las líneas 5 y 6 de Metrobús han sido las primeras en incorporar conceptos de “calle completa”, y hoy la Línea 5 está evaluada como el mejor sistema BRT a nivel nacional. Esta es la apuesta que hoy hace la ciudad para sus calles. Apostamos por la movilidad sustentable, pero principalmente apostamos a modelos que funcionan y ofrecen beneficios reales para los ciudadanos. Estas políticas son una verdadera oportunidad para desincentivar el uso del coche, promover los sistemas sustentables y cambiar la cara de la Ciudad de México.

 

@LBallesterosM