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El escándalo que se viene

El secretario de Marina ya ordenó una investigación de diversos operativos de años pasados, en el que varios almirantes están relacionados. | César Gutiérrez

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Escrito en OPINIÓN el

Están trascendiendo ciertos comentarios respecto a la actuación de las Fuerzas Armadas, motivo por el cual considero importante analizar los siguientes aspectos.

Las órdenes deben estar fundamentadas y motivadas para que el personal militar que es responsable de cumplir con la misión, sepa el marco jurídico en donde se está desenvolviendo ya que debe de existir una limitación entre la materia de seguridad nacional y el control del orden interno. 

El código de justicia militar y sus reglamentos establecen de manera clara cómo se materializa la coadyuvancia en tareas de seguridad pública, para coordinar acciones con los tres niveles de gobierno. Cabe mencionar que es muy importante que el personal de oficiales y tropa conozca e identifique el código nacional de procedimientos penales para evitar cometer errores de cualquier tipo durante la puesta a disposición y la emisión de la noticia criminal. Debe quedar clara la flagrancia del delito para que pueda ser firme la acusación –factores determinados por la circunstancia, modo, tiempo y lugar– ya que, si desde un inicio no se establece de manera clara la pertinencia, licitud, legalidad y los elementos materiales probatorios, de nada sirvió habrán servido los desvelos, las malcomidas y el desgaste del tiempo de las operaciones.

Debe quedar claro que el Ejército por naturaleza es letal, por lo tanto, el uso de las Fuerzas Armadas conlleva una gran responsabilidad en todos sus niveles de mando. Durante el desempeño de las operaciones, cambia la situación de manera drástica de un momento a otro de acuerdo con la problemática, el terreno, clima, medios, el modo de operar de los delincuentes y los brazos armados.

Deben bien quedar claros cuáles son los alcances de la actuación de las tropas, para que sepan por qué deben de hacerlo y ejecutarlo de manera correcta, utilizando los protocolos o procedimientos sistemáticos de operar. Las órdenes ambiguas son las que han generado la incertidumbre y muchos de los errores, ya que existe confusión del uso de un pensamiento crítico con la toma de decisiones ágiles y acertadas. Por ejemplo, los comandantes de base cuentan con una orden general de operaciones, su oficio de comisión y órdenes fragmentarias; ¿cómo pueden tomar decisiones sin caer en el supuesto en la comisión de un delito intencional o no intencional o imprudencial?, porque en la práctica durante los procesos frente a los jueces es otra la realidad.

Es necesario que se realicen diferentes acciones paralelas, por ejemplo, en la planeación de un despliegue se deben contener las medidas en casos de situaciones emergentes, y su tratamiento a seguir en cada nivel de mando, junto con el canal de comunicación que ayude a obtener la información de último momento. 

Por otro lado, en la parte operativa, los responsables de las bases pueden ejecutar de manera correcta este procedimiento de emergencia, sin caer en una desobediencia o infracción de deberes. 

De nada sirve un exorbitante plan estratégico si no tenemos tropas bien adiestradas en diferentes escenarios. ¿Cómo se debe actuar?, ¿Cuándo es necesario abrir fuego? ¿Cómo debo actuar en caso de heridos, muertos o retenidos? De no dar respuesta a estas preguntas, se irán incrementando este tipo de problemáticas generadas por parte de la delincuencia y opositores. 

Por otro lado, observamos la iniciativa que presentó la comisión de defensa nacional, mediante un proyecto de decreto, la cual se ajusta con los tiempos actuales, ya que desde que se realizó el cambio de edad para causar alta en un plantel militar no se lograban ajustar los tiempos. Anteriormente se graduaban los jóvenes a los 18 años y hoy es a los 21 años de edad aproximadamente. Sin embargo, hay mucho trabajo por hacer para mejorar las condiciones de vida, tanto para el personal militar en activo como para el personal militar retirado. Muchos comienzan a darse cuenta de esta realidad cuando se acaba el poder y las prestaciones, sean del grado que sea, y tienen que sufrir las pésimas condiciones que viven los militares retirados, con pensiones insuficientes para poder vivir una vida medianamente digna después de haber entregado su juventud y lealtad al Ejército Mexicano.

Por último, se avecinan tiempos complicados en la Secretaría de Marina Armada de México, ya que desde las últimas semanas se maneja información no oficial de que el Almirante Secretario José Rafael Ojeda Durán, quien resultó positivo de covid-19 por segunda ocasión se encuentra supuestamente grave, por lo que algunos almirantes han caído en la tentación de hacer comentarios al exterior de la Secretaría de Marina con la intención de filtrar dicha información. Conociendo al Almirante Secretario saben que no permitiría una traición como ésta, de no ser porque quienes lo intentan están cercanos a la presidencia de la República, quienes han intentado en todo momento hacer ver mal al Almirante Ojeda.

Para quienes no conocen al Almirante Secretario les comento que están jugando con fuego, ya que no se andará por las ramas para dejar en claro quién manda en la Secretaría de Marina, por lo que de entrada ya ordenó una investigación exhaustiva a diversos operativos que se realizaron en años pasados, en el que varios de estos almirantes están relacionados.

Hay cerca de 40 elementos navales detenidos en la prisión militar del campo militar número uno, la mayoría de ellos por desaparición forzada y homicidio, ya que se encontraron irregularidades en una base de operaciones de la Marina. Mis fuentes me señalan que incluso encontraron una fosa con restos humanos. 

Se espera que para contener la mala imagen que dejará en la Armada de México, se han adelantado ya a que se haga del conocimiento público la noticia, y se espera que haya más de 200 elementos navales detenidos por estos hechos. Entre los almirantes que se mencionan, se encuentran aquellos que filtraron la noticia de la supuesta gravedad del Almirante Secretario, y que han estado muy ocupados pasando información a diversos políticos allegados a la Presidencia de la República, para que llegue a los oídos del Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas.