Repentinamente, la candidatura de Jaime Rodríguez El Bronco, se ha convertido en un fenómeno mediático.
Algunos incautos –de la opinocracia mexicana- dicen que tiene todo para ganar la gubernatura de Nuevo León. Otros “interesados” suponen que El Bronco representa los nuevos tiempos de los llamados candidatos independientes, que supuestamente serían el futuro electoral mexicano.
Sin embargo, nadie le dice a los electores que, en el fondo, Jaime Rodríguez El Bronco” no es más que un invento mediático; un espejismo electoral producto de las disputas entre las familias priístas de Nuevo León y títere de algunos de los medios de comunicación más poderosos de esa entidad.
Más aún, la disputa entre la candidata del PRI Ivonne Álvarez y El Bronco es una pelea entre hermanos priístas.
¿Por qué El Bronco es un espejismo electoral?
1- Porque Jaime Rodríguez El Bronco está lejos de ser un candidato independiente, de representar los intereses ajenos a la partidocracia y de significar una propuesta ciudadana.
2- Si tienen dudas, basta revisar la trayectoria política de El Bronco para entender que se trata de un consumado priísta, renegado de ese partido cuando se acabaron las oportunidades de medrar del dinero público
3- Jaime Rodríguez en el fondo, no es más que un priísta resentido, emparentado con el populismo al estilo lopezobradorista y que pretende engañar a los ciudadanos con el sambenito de una candidatura independiente
4- Pero además, los interesados en inflar a El Bronco tampoco se atreven a decirle a los ciudadanos que las encuestas no son sinónimo de votos. Es decir, que El Bronco puede tener todas las preferencias electorales que quiera, todas las simpatías para estar en una posición de privilegio en las encuestas, pero resulta que las encuestas no votan.
5- Y es que tampoco le han dicho a los ciudadanos que la candidatura a un puesto de elección popular no se gana con buenas intenciones, con plazas llenas o con encuestas abultadas. Las elecciones se ganan con votos y para llevar los votos a las urnas se requiere una estructura de partido capaz de movilizar a los electores y sus conciencias a favor de tal o cual propuesta partidista.
6- Y por pura casualidad resulta que en Nuevo León la estructura de partido la tienen en ese orden, el PRI, el PAN, el PRD y el PT.
7- Jaime Rodríguez Calderón El Bronco no cuenta con la estructura partidista ni de la colonia donde vive; bueno ni de la cuadra donde está su casa. Por eso, es un engaño a los ciudadanos y a los potenciales electores el sambenito de que un “candidato independiente” que tiene buenos números en las encuestas, es capaz de ganar una elección.
Al tiempo.