El grupo parlamentario de Morena en la Asamblea Legislativa ha decidido apoyar a los capitalinos en contra del nuevo Reglamento de Tránsito. El cual es, por muchas razones, un reglamento recaudatorio. Es un reglamento que pega, directamente, en los bolsillos de quienes habitamos en la ciudad de México. Las autoridades capitalinas afirman que este reglamento está diseñado para lograr una reducción en los accidentes.
Nosotros estamos convencidos que con la aplicación de este reglamento se debaten dos visiones: Por un lado, una visión de derecha, conservadora y punitiva, que coloca el cobro de altas multas en el centro para lograr cambios en la conducta social de las personas. Por el otro lado, la visión que Morena defiende, una visión de izquierda y de avanzada. La cual busca crear una conciencia vial y darle elementos a los habitantes del Distrito Federal para que comprendan que a todos nos conviene que exista mayor civilidad y una mejor convivencia en las calles de la ciudad, ya que todos somos responsables y a todos nos afecta.
¿Por qué no hemos visto una sola campaña de concientización por parte del gobierno de Mancera? El jefe de Gobierno tiene un presupuesto de 75 millones trimestrales para servicios de comunicación social y publicidad. ¿Por qué no usa parte de ese recurso para llevar a cabo una campaña de educación vial? Y no sólo eso: La Asamblea perredista no asignó un solo peso para acrecentar la red de RTP y el transporte eléctrico. Nos parece demasiada hipocresía de parte del gobierno central. En donde está su compromiso con una ciudad más amigable con los peatones, como según afirma se hace con este reglamento.
Además hay algunos hechos muy serios que hemos venido señalando: Por una parte, el alza indiscriminada de las multas, algunas de las cuales han aumentado hasta en un 700 por ciento. Por otro, hemos señalado la gravedad de dar la concesión de las fotomultas a una empresa privada. Y lo peor, que dicha empresa se quede con uno de cada dos pesos que se recauden por este concepto en la ciudad de México.
A nosotros lo que nos parece es que el gobierno capitalino quiere hacer negocio con algunos amigos. Autottrafic se va a quedar con el 46% de la recaudación por concepto de fotomultas. El resto va a las arcas del gobierno de la Ciudad. ¿Qué va a pasar con ese dinero? ¿Para qué se va a usar? Como siempre, un misterio…
¿Qué estamos haciendo en Morena para contrarrestar esto? Primero, hicimos una encuesta. Los primeros resultados han arrojado datos muy significativos. En el primer corte, de siete mil encuestados, el resultado fue que más del 90% está en desacuerdo con este reglamento y el costo de las multas. El 97% está en desacuerdo con que a una empresa privada se le dé la concesión de las fotomultas. Y cuando preguntamos: Del 0 al 10 califique el nuevo Reglamento, el 65% lo califica con cero y el 35% lo califica entre 0 y 5. Lo cual es una muestra evidente del rechazo general al reglamento.
También estamos juntando firmas. Vamos a juntar por lo menos 30 mil, para pedirle al jefe de gobierno que se realice un plebiscito, y que ese plebiscito sea vinculatorio, para que los ciudadanos decidan si se deroga el reglamento. Debido a la inconstitucionalidad de la norma, porque también recolectamos firmas y ya se presentó un amparo colectivo, para todos los capitalinos que quisieron ampararse contra el reglamento. Con este amparo, en caso de que proceda, quedarán protegidas 22,272 personas. Y lo más importante, lanzamos una campaña de concientización, llamada: “Sí a la conciencia vial”. Porque para nosotros eso es lo más importante: Que la gente se eduque y aprenda.
Desde que iniciamos nuestros trabajos como diputados, Morena dijo que íbamos a estar siempre del lado de la ciudadanía, y que íbamos a ayudar y apoyar a la gente frente a las injusticias y las arbitrariedades del gobierno de la Ciudad. Este es un ejemplo muy claro de la posición de Morena y es un ejemplo muy claro de que si los capitalinos luchamos conjuntamente, vamos a revertir decisiones que son injustificadas y arbitrarias.