Main logo

#Coronavirus: ¿Estamos preparados?

La información veraz y oportuna es el mejor antídoto contra el pánico y la especulación. | José Antonio Sosa Plata

Por
Escrito en OPINIÓN el

El riesgo es grande. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), definió al coronavirus como “una amenaza muy grave” y el “enemigo público número uno” para el mundo.

El golpe que podría darnos, agregó, podría ser “mayor que cualquier ataque terrorista”.

De acuerdo con la OMS los brotes epidémicos “son inevitables y a menudo impredecibles”. Y algunos de éstos se caracterizan por crear “incertidumbre, confusión y la sensación de urgencia” en la población afectada o en riesgo de contagio.

Te puede interesar: Normas de comunicación de brotes epidémicos de la OMS, Organización Mundial de la Salud, 2005.

Aunque hasta el momento solo hay en México tres casos sospechosos de coronavirus, los expertos afirman que el virus llegará a nuestro territorio, de la misma manera que ya lo ha hecho en 28 países.

El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que su gobierno está actuando con responsabilidad y que no se van a repetir los errores del pasado para hacer frente al virus de la gripe H1N1.

Aún más. El sector salud asegura estar preparado para enfrentar la situación.

En un comunicado oficial de la Secretaría de Salud se confirmó que el Asesor Internacional de Emergencias en Salud de la OPS/OMS, Jean Marc Gabastou, dijo que “México fue el primer país en reaccionar con medidas concretas de alerta, rehabilitación, reactivación de los procedimientos y lineamientos asociados con el Reglamento Sanitario Internacional, así como en la implementación de un diagnóstico preciso, fiable, sensible y específico ante un nuevo virus, además de ser el único en implementar en la región el algoritmo ideal para la detección y la confirmación de los casos”.

También se anunciaron algunas decisiones de comunicación.

Una tiene que ver con la difusión de material de promoción y prevención. Otra con la ratificación de que la vocería única para la información y comunicación de riesgos para este nuevo virus será la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud.

Lee más: México está preparado para enfrentar coronavirus, Secretaría de Salud, Gobiermo de México, 30 Enero 2020.

Sin embargo, ¿son suficientes las medidas anunciadas?

En las semanas recientes se han hecho varias críticas por la falta de recursos presupuestales que padece el sector salud. La carencia de medicinas podría ser otro problema. Y por si fuera poco, existen dudas de que en algunos medios de comunicación y, sobre todo en las redes sociales, se actuará con la responsabilidad, seriedad y profesionalismo que exige una crisis en materia de salud.

Las preocupaciones están bien fundadas.

Por un lado, porque el sector salud atraviesa un momento muy difícil, que viene de muchos años atrás. Por el otro, porque aún no se ha cobrado conciencia sobre la importancia que tiene la comunicación en las acciones de prevención y gestión de crisis que se requieren para el despliegue de una respuesta eficaz.

Consulta: Eduardo Alfredo Duro (et.al.). El impacto social de la comunicación en las epidemias: perspectivas bioéticas y de salud pública. Revista Iberoamericana de Bioe´tica, número 07, 16 Enero 2018.

La misión es clara: limitar la propagación de la enfermedad y, sobre todo, salvar vidas.

La confianza es, por lo tanto, el concepto clave para cumplir con los objetivos de la estrategia de comunicación. Para lograrlo, es preciso evitar el pánico, la confusión, la difusión abusiva y mal intencionada de noticias falsas, la especulación y la discriminación, además del respeto a la dignidad de los enfermos.

La comunicación social debe contribuir, por lo tanto, a que se conozcan y reporten de inmediato la detección temprana de síntomas. Asimismo, que se den a conocer con absoluta claridad y precisión las acciones que cada persona debe llevar a cabo para prevenir el contagio. Frente a una crisis de esta naturaleza, los enemigos a vencer son el sensacionalismo, el lucro político de la información, los rumores, la especulación y las noticias falsas.

Lee también: ¿En qué consiste el plan de lucha de la OMS para combatir el coronavirus?

Para lograr lo anterior, es preciso promover la sensibilización y participación de la población. Las redes sociales son capaces de facilitar, potenciar y hacer mejor la tarea si se desarrollan estrategias específicas que puedan revertir la manipulación y las noticias falsas.

Si no queremos repetir los errores del pasado, existen experiencias internacionales con casos de éxito. Pero hay que empezar por lo básico y fundamental. Los objetivos que definió la OMS en materia de comunicación para los gobiernos en 2008 siguen vigentes:

1)    Velar por que las poblaciones en riesgo dispongan de la informacio´n necesaria para tomar decisiones con conocimiento de causa, y adopten las medidas pertinentes para proteger su salud y seguridad durante un brote epide´mico.

2)   Apoyar la coordinacio´n y el uso eficaz de los recursos de comunicacio´n entre los socios de salud pu´blica locales, nacionales e internacionales;

3)   Proporcionar informacio´n de salud pu´blica pertinente a los sectores participantes distintos del sector de la salud;

4)  Reducir al mi´nimo los trastornos sociales y econo´micos; y

5)   Como objetivo general, generar y mantener la confianza del pu´blico en las autoridades sanitarias antes, durante y despue´s de un brote epide´mico.

En cualquier caso, el apego a la verdad es indispensable.

Para neutralizar al miedo, la falsedad y la especulación, nada mejor que la descripción objetiva y precisa de los hechos. Para que la información sea clara, directa, rápida y oportuna se requiere de la elaboración de protocolos de actuación y comunicación. La experiencia ha demostrado que las autoridades los tienen en el terreno operativo. ¿Estarán listos ya los de comunicación?

Recomendación editorial: Guía de la Organización Mundial de la Salud para planificar la comunicación en caso de brotes epidémicos, Edición 2008.