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Consecuencias políticas de las reformas

De la reforma energética a los bombardeos en la ciudad de Hiroshima y Nagasaki en Japón.

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Escrito en OPINIÓN el

Luego de más de 70 horas de trabajo en el Pleno, el Congreso aprobó la expedición de 9 leyes y la reforma en 12 más, para conformar la totalidad del trabajo de las leyes secundarias de la reforma energética.

 

Esta nueva legislación suprime el modelo promulgado en 1938 por el presidente Cárdenas, para dar paso a un nuevo esquema de participación estatal, en el que también se encuentra contemplada la colaboración de la iniciativa privada, en un esfuerzo por conservar los mejores ingresos para el país.

 

Uno de los debates más álgidos fue la elevación a deuda pública de los pasivos de Pemex y CFE, en el que tiempo atrás, Cuauhtémoc Cárdenas lo había propuesto con anterioridad, dejando a la izquierda sin argumentos más que debatir.

 

Ahora que ha pasado la más importante de estas reformas para la actual administración, los partidos se encuentran preparando estrategias en pos de las siguientes elecciones a celebrarse en 2015.

 

Uno de los institutos políticos que más vulnerabilidad política presenta, es el Partido de la Revolución Democrática, cuya dirigencia nacional se encuentra dirimiendo en una próxima elección interna, y de la cual, la llamadas tribus se encuentran cabildeando su futuro político.

 

Es vulnerable porque el nacimiento político del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) de Andrés Manuel López Obrador, supone una considerable reducción de militantes en el partido del sol azteca, que migrarían al nuevo partido de López Obrador.

 

Este escenario supondría la posibilidad de que el PRD pierda algunos espacios políticos que desde 1997 viene gobernando, sobre todo en el Distrito Federal, en cuya coyuntura ganaría el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Acción Nacional (PAN) y por supuesto, Morena.

 

No obstante lo anterior, Morena y López Obrador no logran quitarse la etiqueta de rijosos, cuando se trae a la memoria el plantón que realizó como protesta, luego del proceso electoral en el 2006, en el que por unas décimas de punto porcentual, Felipe Calderón Hinojosa le ganó la Presidencia de la República, generando caos y la protesta de comerciantes y afectados.

 

Por otra parte, el inicio del tercer y último año legislativo de la LXII Legislatura del Congreso, abre un frente de crisis al interior del grupo parlamentario del PRD, toda vez que los diputados integrantes de las tribus se encuentran en disputa por el ejercicio de la Presidencia de la Mesa Directiva, y que en el mejor de los casos, la propuesta que salga de Nueva Izquierda es la que más le conviene al PRI y al gobierno del presidente Peña Nieto.

 

Este escenario confronta a los grupos perredistas, en una lucha por obtener la titularidad de la Mesa Directiva citada, pero que no contribuye a la armonía política en el contexto de la renovación de su dirigencia nacional.

 

En este escenario de disputa quien verdaderamente sale ganando, es el PRI al encontrar un PRD dividido en la capital del país, -hoy por hoy su principal bastión-, con el fantasma de la reducción de su militancia y con Rosario Robles Berlanga, secretaria de Estado en la administración del presidente Peña Nieto, repuesta de la forma en que el sol azteca se deshizo de ella y bajo las descalificaciones del padre político de Morena, quien probablemente se encuentre dispuesta políticamente a ayudar al PRI en desplazar al partido del cual ella fue su dirigente.

 

Las posibilidades de que el PRD acrecente su capital político, se centran en Baja California Sur, Guerrero y Michoacán; los dos primeros, como bastiones perredistas y el último, por la crisis de seguridad y política del gobierno del ex gobernador Fausto Vallejo Figueroa, que alcanzó a su familia.

 

Una consecuencia política en la historia. Entre el 6 y el 9 de agosto de 1945, los Estados Unidos de Norteamérica bombardearon la ciudad de Hiroshima y Nagasaki en Japón, en el que según cálculos costó la vida de 140 mil y 80 mil personas, respectivamente, y como consecuencia Japón anunció su rendición incondicional frente a los Aliados, en los que México se encontraba adscrito.

 

El antecedente. La noche del 13 y 20 de mayo de 1942 eran hundidos los barcos "Potrero del Llano" y “Faja de Oro”, respectivamente. México pedía explicaciones oficiales a Italia y Japón, quienes no respondieron a la protesta, mientras la Cancillería alemana se rehusaba a recibirla.

 

La sesión del Congreso del jueves 28 de mayo de 1942, estaba por iniciar. El secretario de Gobernación, Miguel Alemán Valdéz, platicaba con algunos diputados en el recinto de la calle de Donceles. Todos sabían la gravedad de la naturaleza de la convocatoria.

 

"Me presento a cumplir, ante ustedes, el más grave de los deberes que incumben a un jefe de Estado: el de someter a la Representación Nacional la necesidad de acudir al último de los recursos de que dispone un pueblo libre para defender sus destinos”: Se trata del argumento del presidente Manuel Ávila Camacho solicitando al Congreso de la Unión, la declaración de guerra en contra de las potencias del Eje Berlín – Roma - Tokio.

 

Twitter: @racevesj