Main logo

Anaya se va, se va…

Cada vez es más evidente que Anaya no tiene un proyecto y menos una propuesta capaz de competir con López Obrador | Ricardo Alemán

Por
Escrito en OPINIÓN el

No, no nos referimos a las encuestas que cada vez con mayor frecuencia colocan a Ricardo Anaya en la tercera posición. Tampoco se trata de una ocurrencia, una infundada malquerencia o de un capricho.

En realidad nos referimos a estudios sobre el posicionamiento de los candidatos presidenciales, realizados por empresas privadas que, cada vez con mayor atención, le dan seguimiento al proceso electoral mexicano.

En efecto algunas de las grandes empresas mexicanas, y no pocas de las empresas globales que operan en México, han contratado despachos especializados para que les reporten la evolución de la contienda presidencial. Sorpresivamente, en la mayoría de esos reportes el candidato Ricardo Anaya muestra una marcada tendencia a la baja.

¿Por qué?

1.     Porque cada vez es más evidente que el candidato Anaya no tiene un proyecto y menos una propuesta capaz de competir con el eterno candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador y con el candidato de la continuidad, José Antonio Meade.

La cuarta transformación de México

2.     Porque cada vez son más notorias las contradicciones discursivas de Anaya. Por ejemplo, una de las empresas que evalúa el discurso de los candidatos, está detrás de un informe que recuerda que Ricardo Anaya aprobó las reformas estructurales del gobierno de Peña Nieto; reformas que el propio candidato del PAN, PRD y MC hoy cuestiona.

De frente al futuro

3.     Pero si la incongruencia del candidato Anaya le hace perder credibilidad y confianza, su gusto por la mitomanía ya se refleja en las preferencias. Por ejemplo, el candidato Anaya difundió un tuit en el que anuncia que dará conferencias mañaneras todos los días. La respuesta en redes fue una paliza. No lo bajaron de “copión” y de “mentiroso”.

Ricardo Anaya se pone muy AMLO y promete conferencias mañaneras

4.     Un factor clave en toda candidatura presidencial son los “generales” que acompañan al candidato. En el caso de Anaya todo el trabajo logístico, estratégico, táctico, recae en dos viejos adversarios: Santiago Creel y Jorge Castañeda.

Como saben, Creel y Castañeda han sido secretarios de Estado y como estrategas de Anaya pretenden ser tratados como secretarios de Estado. Esa condición prácticamente mantiene aislado a Anaya.

5.     Por último, las distintas empresas que analizan la campaña de Ricardo Anaya coinciden que el candidato del frente PAN, PRD y MC no tiene un discurso claro, no tiene un objetivo para atraer el voto y tampoco tiene un proyecto convincente.

Por eso, la conclusión es que Anaya se va, se va…

Al tiempo.

La trampa y los tramposos

@RicardoAlemanMx | @OpinionLSR | @lasillarota