Uno de los instrumentos más importantes para la realización de las elecciones tanto federales como locales en nuestro país es contar con un padrón y un listado nominal de personas electoras confiable.
El padrón electoral son todas aquellas personas de 18 años y más que han solicitado les sea expedida su credencial para votar, en tanto que la lista nominal contiene la información de todas aquellas personas a las que les fue entregada su credencial para votar, instrumento fundamental para el ejercicio del derecho al sufragio.
En este sentido, estos instrumentos registrales no solo habilitan a las personas para que participen en los procesos electorales e incluso en ejercicios de participación ciudadana, también constituyen una herramienta fundamental para conocer algunos registros estadísticos importantes tales los datos por rangos de edad, entidad de origen, bajas aplicadas al padrón electoral nacional y del extranjero, entre otros.
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Asimismo, ambos componentes del andamiaje electoral representan uno de los indicadores más importantes para establecer diversos escenarios para los procesos electorales venideros. Me explico.
A partir de la evolución que va teniendo el padrón electoral y el listado nominal se puede ir generando una planeación múltiple que permita a las instituciones electorales y partidos políticos -principales actores de la contienda electoral-, construir una serie de escenarios que les permita irse preparando para las siguientes elecciones.
A nivel federal, las elecciones inmediatas conocidas como “intermedias” serán las del año 2027 en donde se renovará la Cámara de diputaciones, en tanto que en 2030 tendremos la renovación de la presidencia de la República, así como las Cámaras de senadurías y diputaciones.
Partiendo de la elección de 1991 a la fecha y sólo tomando en cuenta a las personas electoras con credencial para votar tenemos que en ese año había 36.7 millones de registro y para 2024, 98.3 millones de personas, es decir, el listado nominal ha crecido con 61.6 millones de personas electoras más.
En el mismo sentido, la media de crecimiento de las 12 elecciones que se han dado en ese periodo oscila en alrededor el 8.9% lo que, siguiendo esta dinámica para 2027 tendríamos alrededor de 107 millones de personas con posibilidad de votar y para 2030 poco más de 116 millones de registros aproximadamente.
¿Esto de qué les puede servir, por ejemplo, a los partidos políticos? De entrada, para ir integrando una proyección estimada del número de casillas electorales que serán instaladas y, consecuentemente, del número de representantes partidistas y generales que necesitarán para supervisar el buen desarrollo de la jornada electoral; esto sin contar con las representaciones que necesiten en cada uno de los consejos distritales federales (300 por cada uno de los distritos electorales), los 32 consejos locales federales, así como las representaciones para las comisiones de vigilancia del registro federal de electores a nivel distrital, por entidad y a nivel nacional.
Un ejemplo, si en 2024 se instalaron poco más de 170 mil casillas, para 2027 serían instaladas poco más de 185 mil aproximadamente, lo que implicaría que los partidos políticos deberán contar con al menos 370 mil representantes propietarios y suplente, más los representantes generales que, de acuerdo con la legislación electoral, deben acreditarse uno por cada diez casillas urbanas y uno por cada cinco casillas rurales.
Como este ejemplo, pueden de igual forma, hacer proyecciones sobre el financiamiento público federal que recibirían de forma anual los partidos políticos; los topes máximos aproximados de gastos de precampaña y campaña; los tiempos aproximados que tomarán los cómputos distritales correspondientes para la obtención de resultados, entre otros.
Consecuentemente, el uso de las estadísticas de crecimiento del padrón y el listado nominal de personas electoras no solo acredita a la ciudadanía para ejercer su voto, también coadyuva a la construcción de escenarios para que, quien los realice, pueda llegar mejor preparado a la próxima contienda electoral.