INTELIGENCIA ARTIFICIAL

Recetas médicas y de cocina: el lado bueno de la inteligencia artificial

La inteligencia artificial se ha usado también para crear sistemas de mejora en el ámbito médico y nutricional. | Leonardo Martínez

Escrito en OPINIÓN el

El mal uso de los sistemas de inteligencia artificial es un fenómeno real que hemos observado ya en muy distintas situaciones, como las relacionadas por ejemplo con el uso de los discursos de odio y la difusión de información falsa para atizar la polarización y debilitar a la democracia. De ahí la importancia que empieza a tomar internacionalmente el tema de la regulación del diseño ético de dichos sistemas y por ello habrá que estar atentos a lo que vaya sucediendo en ese lado del escenario.

El lado bueno de la inteligencia artificial es más conocido por la gente porque sus beneficios son más transparentes y se difunden abiertamente, cosa que aprovecho el día de hoy para hablar de dos sistemas interesantes en ámbitos completamente distintos: la salud y la gastronomía.

Entre todas las novedades que se han ido anunciando en el ámbito de la salud me llamó la atención la presentada por el equipo de Google Deep Mind, sobre un sistema que denominan AMIE (Articulate Medical Intelligence Explorer) que utiliza inteligencia artificial para mejorar los diagnósticos y las explicaciones médicas a los pacientes. El sistema fue entrenado con 100,000 diálogos reales entre médicos y pacientes, con notas y observaciones hechas por personal médico en unidades de cuidados intensivos, con varios miles de preguntas tomadas del examen para obtener la licencia médica en los Estados Unidos y con unos sistemas de autocorrección que incorporan las precisiones hechas por especialistas a las respuestas iniciales generadas por el AMIE.

El sistema se probó realizando consultas ciegas a través de mensajes de texto entre pacientes voluntarios de Canadá, India y el Reino Unido, y personal médico. La calidad de las consultas se calificó con criterios de empatía, apertura, honestidad, precisión del diagnóstico y el tratamiento del padecimiento. En esa primera prueba, los pacientes y los especialistas coincidieron en que AMIE dio mejores diagnósticos y tratamientos que los médicos participantes. Dado que esta primera fase se hizo utilizando sólo mensajes de texto, el equipo piensa incorporar consultas por video, lo cual va más en línea con las consultas que ya se hacen por telemedicina.

El equipo que desarrolló el sistema estima que un médico puede atender a 10,000 pacientes en su carrera y que AMIE puede atender el mismo número en un par de ciclos de entrenamiento, lo cual revela un potencial impresionante pues se asume que con cada ciclo la calidad de los diagnósticos y tratamientos debe mejorar.

En un ámbito muy distinto, hay un proyecto que se ha ido desarrollando desde hace varios años en IBM y que lleva por nombre Chef Watson. Se trata de un sistema de inteligencia artificial que utiliza tecnologías cognitivas y de procesamiento del lenguaje natural para crear recetas culinarias innovadoras.

El sistema pregunta al usuario qué ingredientes tiene disponibles y si presenta algunas restricciones dietéticas o preferencias culinarias. Chef Watson utiliza una base de datos extensa que incluye información sobre la química y las propiedades de los alimentos, así como una vasta colección de recetas tradicionales y contemporáneas de todo el mundo. El chef utiliza técnicas de procesamiento del lenguaje natural para comprender y analizar las descripciones de los ingredientes proporcionados, lo cual implica comprender las relaciones semánticas y las características de los alimentos.

Basándose en el análisis de la base de datos y la información proporcionada, Chef Watson genera ideas para combinaciones de ingredientes y proporciones que podrían funcionar bien juntos. El sistema utiliza algoritmos de aprendizaje automático para entender patrones y preferencias emergentes, así como para explorar combinaciones inusuales y creativas. Chef Watson puede validar las combinaciones sugeridas teniendo en cuenta aspectos como la coherencia de sabores, texturas y técnicas culinarias, y puede proporcionar información sobre la inspiración cultural de la receta y los fundamentos científicos detrás de ciertas combinaciones de ingredientes. Aún más, el chef no se limita a replicar recetas existentes, sino que busca innovar y sorprender con nuevas combinaciones y enfoques culinarios.

Este tipo de aplicaciones se anuncian prácticamente todos los días, por lo que seguiremos sorprendiéndonos cotidianamente.

 

Leonardo Martínez

@lmf_Aequum