TRATADO ANTE PANDEMIAS

México y el Tratado ante pandemias

En el seno de la Organización Mundial de la Salud, dos iniciativas cruciales están en marcha para abordar la gobernanza global ante pandemias. | Talia Rebeca Haro*

Escrito en OPINIÓN el

En el seno de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se discuten dos iniciativas respecto a la gobernanza global ante pandemias, primero, la negociación del Tratado para la Prevención, Preparación y Respuesta ante Pandemias, y, en segundo lugar, la reforma del Reglamento Sanitario Internacional. Dichas iniciativas surgieron en diciembre de 2021 a partir de la resolución “Un mundo unido” de la Asamblea Mundial de la Salud. Dicha resolución hizo un llamado a la revisión de los instrumentos jurídicos internacionales, con el fin de asegurar la equidad en la distribución de tecnologías médicas en la siguiente pandemia. A pesar de la fragmentación en la gobernanza en la salud global, dichos instrumentos serán un elemento jurídico central para el control de la próxima pandemia con el fin de preservar la seguridad internacional. Vale mencionar que, debido a la complejidad en la negociación, el único Tratado que ha sido concluido en el seno de la OMS es el Convenio Marco para el Control del Tabaco que entró en vigor en 2005. El presente artículo tiene como objetivo ahondar en ciertos puntos sobre la negociación del Tratado, cuyo propósito es alcanzar su consenso en la Asamblea Mundial de la Salud en mayo del 2024.

Dicho Tratado es negociado por una comisión intergubernamental, en la cual un Estado o conjunto de Estados son co-facilitadores de un artículo específico que es discutido como parte del Tratado. Dicha dinámica ha permitido que los países de ingresos medios y bajos orienten las discusiones hacia sus intereses. Cabe destacar que la Asamblea Mundial de la Salud es un órgano en el que cada país cuenta con un voto, a diferencia de otras instituciones en las que la toma de decisiones está orientada por el poder financiero, tal como el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional. Los temas principales en la negociación del Tratado incluyen el acceso y beneficio para compartir patógenos, la investigación y el desarrollo en los productos médicos, la cadena de suministros, la vigilancia, el concepto de “One Health”, y la transferencia de tecnología. A pesar de la rivalidad geopolítica en diferentes cuestiones, Estados Unidos, la República Popular de China y Rusia han concordado en su oposición con los mecanismos de transparencia hacia la Organización Mundial de la Salud que han sido propuestos como parte del Tratado. Específicamente dicha oposición ha sido en referencia a la inversión pública en investigación y desarrollo de tecnologías médicas y en la notificación de los brotes infecciosos. 

En este sentido, uno de los temas más álgidos ha sido la transparencia en el financiamiento público en la investigación y desarrollo de tecnologías médicas y en la seguridad en los laboratorios, el cual es referido como el artículo 9 del Tratado. México y Noruega han sido co-facilitadores en las sesiones para su negociación, a partir de la cual múltiples controversias se han originado. Primero, la pandemia del SARS-CoV2 trajo a la luz un conjunto de tecnologías médicas, como las vacunas mRNA, que fueron desarrolladas gracias al financiamiento público. Dicho financiamiento se ha incrementado después de la Segunda Guerra Mundial. A pesar de que dichas tecnologías fueron desarrolladas en las universidades públicas, su comercialización se llevó a cabo por empresas privadas, las cuales impusieron patentes y fijaron el precio sobre dichas tecnologías. Así, los Estados han invertido dos veces en dichas tecnologías: por un lado, en su investigación y desarrollo, y por el otro, al comprarlas al sector privado con base en el precio fijado por dichas compañías. Por ello, una de las principales propuestas ha sido contar con mecanismos de transparencia en los que las empresas farmacéuticas declaren la inversión en el desarrollo de dichas tecnologías. En segundo lugar, desde el fin de la Guerra Fría, Estados Unidos ha demostrado una inquietud constante respecto a las medidas de seguridad en los laboratorios que trabajan con patógenos, debido a los riesgos que representan para la bioseguridad internacional. Dicha inquietud encontró su reflejo en las acusaciones que ha realizado a la República Popular de China sobre el origen del virus; es decir, respecto a que la falta de medidas de seguridad en un laboratorio de Wuhan ocasionó el virus del SARS-CoV2. Ambos temas han sido parte de los abordados como parte del artículo 9 del Tratado, y que han sido co-facilitados por México a lo largo de las diferentes reuniones de negociación. 

Finalmente, con el fin de demostrar el apoyo a dicha negociación, la 78 Asamblea General de Naciones Unidas refrendó la Declaración Política en Prevención, Preparación y Respuesta ante Pandemias. Dicha Declaración fue promovida en septiembre del 2023. Las Declaraciones que la Asamblea General ha emitido han tenido como objeto influir en los documentos legales que son negociados al interior de la OMS. Ciertos ejemplos de dicho apoyo se encuentran en aquellas Declaraciones relativas al SIDA, las enfermedades no transmisibles, a la tuberculosis y a la cobertura universal de salud. A pesar de que dicha Declaración no es vinculante, la misma es para apoyar el trabajo que es llevado a cabo en el seno de la Organización Mundial de la Salud para concluir el texto del Tratado

Talia Rebeca Haro* 

Actualmente Talia Rebeca Haro realiza una estancia posdoctoral en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México. Ha sido investigadora invitada en la Fondation Brocher (Ginebra, Suiza), la Universidad de Brown, la Universitàt Autónoma de Barcelona, Public Citizen, y la Asociación para el Avance de las Ciencias Sociales. Ella es doctora por parte de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales en la UNAM. Cuenta con dos maestrías: una en Salud y Políticas Sociales por parte de la École des Hautes Études en Sciences Sociales y la Universidad de Linköping; y, la otra en Cooperación Internacional para el Desarrollo por parte del Instituto Mora.
 

Instituto Mora

@institutomora