El 1º de febrero inician las sesiones en el Poder Legislativo y el primer tema que Morena quiere impulsar en el Senado es el “plan B” de reforma electoral, que no es más que el intento de descarrilar la democracia para consolidar el régimen autoritario que López Obrador sueña.
A partir de que su “plan A” fue desechado, después de que cientos de miles de personas marcharon para defender al INE, la necedad del presidente en dañar la democracia se tradujo en un “plan B” que sin modificar la Constitución trastoca todo el sistema democrático haciéndolo falible, acaba con el padrón electoral y deja a miles de personas en la calle.
Dentro de las áreas y temas que habrá afectaciones están:
- Estructura de los órganos desconcentrados y oficinas centrales.
- Estructuras de los OPLES.
- Integración y capacitación de funcionarios de casilla.
- Recuento de votos.
- Modelo de fiscalización.
- Periodos de precampaña y campaña.
- Elección de los consejeros electorales a nivel local.
- Atención a víctimas de violencia política.
- Ubicación de las mesas receptoras de votos.
- Verificación muestral del Registro Federal de Electores.
- Voto electrónico.
- Flujo de la información institucional.
- La modificación a los documentos básicos de los partidos políticos.
- Las obligaciones de los partidos políticos.
- El traslado y resguardo de los paquetes electorales.
- El desahogo de pruebas periciales.
- La supervisión sobre las afiliaciones de los partidos.
- La recepción de quejas y denuncias.
- La acreditación y capacitación de observadores.
- La integración de las mesas directivas de casilla.
- Las acciones afirmativas y la paridad de género.
- El registro de representantes de los partidos.
- El registro de las candidaturas.
- La propaganda gubernamental.
- Las sanciones.
- El régimen laboral.
- La capacitación de funcionarios.
- La operación en campo de los conteos rápidos.
- Los cómputos distritales.
- La recolección de la papelería electoral.
- El registro de nuevos partidos y organizaciones políticas.
Todo está diseñado para dos cosas: darle una ventaja indebida a los precandidatos de Morena y acabar con la certeza democrática, abriéndole las puertas a cientos de tipos de trampas que en el pasado eran comunes, como la manipulación de la lista nominal, la falta de cuidado en la cadena de custodia, la eliminación de los conteos rápidos y lo ya mencionado.
Estamos en una época gris de México, una época que nos exige volver a defender los derechos que creímos conquistados para siempre. La democracia vuelve a tener enemigos y quienes buscan desmantelar las instituciones desde el poder, son quienes están buscando cómo mantenerse en el poder a pesar de que no han podido dar resultados en ningún rubro.
Por la vía legislativa, por la vía judicial y en las calles, es tiempo de defender la democracia de quienes sólo se asumen demócratas cuando les favorecen los resultados.