INVESTIGACIÓN PERIODÍSTICA DE EMMANUEL GALLARDO

“Así nació el diablo”

Tal es el título del reportaje del periodista Emmanuel Gallardo, recientemente publicado por Editorial Grijalbo, sobre la historia de un joven integrante de la delincuencia organizada. | Adolfo Gómez Vives

Escrito en OPINIÓN el

Ninguna institución del Estado mexicano se ha encargado de registrar y analizar adecuadamente los perfiles sicosociológicos de las personas que se involucran con la delincuencia organizada, a efecto de atender sus causas y evitar sus consecuencias. Ningún órgano de gobierno tiene datos obtenidos a través de métodos científicos, que refieran cuáles son las condiciones económicas y sociales que inciden en la formación de las personas que delinquen y menos aún de quienes forman parte de las grandes organizaciones criminales.

A la corrupción e impunidad prevalecientes en las instituciones del Estado, se suma la omisión de sus responsabilidades respecto del análisis de los fenómenos delictivos que aquejan a México desde hace muchos años. El Estado mexicano no está interesado en la contención del crimen y su eventual desaparición. El Poder Legislativo —de manera particular la presente legislatura— sólo sabe de incrementar las penas privativas de la libertad, a pesar de su probada ineficacia; no dan para más.

Corrupción, impunidad e ineficacia son signos inequívocos de la existencia de relaciones simbióticas entre las instituciones del Estado y la delincuencia organizada. Ambos se benefician económica y políticamente. Por eso se toleran e incluso se protegen.

Lo que los habitantes de este país alcanzamos a comprender respecto de los fenómenos delictivos, se debe a experiencias empíricas o a información que, en ocasiones, el periodismo logra documentar con cierto grado de profundidad.

Pocos reportajes abordan con sensibilidad, precisión y exactitud, lo que ocurre en el mundo criminal. La forma como las personas comunes y corrientes —empujadas por factores como la pobreza o el deterioro familiar— terminan por involucrarse en hechos delictivos y hacer de ellos una “profesión”, un modus vivendi, ante la falta de oportunidades de desarrollo.

El periodista mexicano Emmanuel Gallardo, ha escrito un imponente reportaje en torno de una joven persona involucrada con actividades ilegales desde muy joven. Su nombre cobró notoriedad a partir de que se supo de su participación en el homicidio de dos delincuentes israelíes en el centro comercial Plaza Artz, en la Ciudad de México.

La investigación del periodista Gallardo se intitula Así nació el diablo, recientemente publicada bajo el sello de Editorial Grijalbo. El tesón del periodista lo ha llevado a penetrar en las entrañas de algunos de los cárteles con presencia en la Ciudad de México. Su recomendable trabajo constituye un referente obligado para la sociedad mexicana, que ha normalizado la violencia ejercida por las organizaciones delictivas. Más importante aún es que desnuda y exhibe la total y absoluta desaparición del Estado respecto de su obligación más importante: preservar la vida, la seguridad y la libertad de todas las personas gobernadas.

Junto a grandes reportajes, como los realizados por periodistas como Óscar Balderas, Daniel Lizárraga y Ana Lilia Pérez, entre otros, el trabajo de Emmanuel Gallardo, representa una oportunidad para entender y reflexionar respecto del grado de deterioro que ha alcanzado la sociedad mexicana, ante la ausencia de un Estado que pondera la propaganda del autoelogio por encima del cumplimiento de sus obligaciones.