ECONOMÍA GLOBAL

Dolorosa y prolongada lucha contra la inflación: el camino a la recesión

La política monetaria de México será fundamental para hacer frente a esta feroz crisis. | Ismael Jiménez

Escrito en OPINIÓN el

En este espacio hemos venido señalando que la actual crisis económica no será pasajera, y que apenas nos encontramos en los albores de una crisis que además de ser global, está apunto de cambiar el orden de las estructuras políticas, económicas y sociales.

Las declaraciones de Jerome Powell responsable del Banco Central de los Estados Unidos (FED) fueron claras y directas. “La lucha contra la inflación, será dolorosa para las familias y trabajadores de la Unión americana”. Una sentencia parecida a la acuñada en la década de los noventa por el entonces director del Banco de México que refirió que habría que aplicar “una amarga medicina” para recuperar el crecimiento económico.

Ni imaginar la que se desataría en este momento si la 4T sale con una frase similar; opinadores y pseudo analistas los quemarían en leña verde, aunque ya está en marcha en México, desde hace al menos unos tres meses, el mismo programa de choque para enfrentar la inflación.

Que aquí no ha retrocedido la inflación, dirían los bisoños opinadores, a lo que tendríamos que responder que tampoco en los Estados Unidos. Loretta Mester presidenta del Banco de la Reserva Federal de Cleveland declaró: “es realmente prematuro siquiera pensar que la inflación ha tocado techo”.

A qué se refiere la funcionaria, a que la reducción de la inflación registrada en días pasados en ese país, se debe a un ligero retroceso en los precios de los energéticos, pero este mercado es el más volátil en este momento en el que la guerra en Ucrania se agudiza, el invierno está a la vuelta de la esquina y Rusia recorta el suministro de gas a Europa.

Para el titular de la FED, mantener la política de tasas altas es la única vía para desincentivar el gasto y el consumo, aunque ello, implique frenar la ya de por sí débil economía global. En pocas palabras, nos llevan a una recesión mundial inducida.

Desde hace cuando menos tres meses, por toda Europa y la unión americana se vienen registrando récords de inflación no vistos en treinta o cuarenta años, cada registro inflacionario más catastrófico que el anterior y así seguirá en los meses por venir.

Seguir subiendo las tasas de interés encarecerá el costo del dinero y reducirá el consumo afectando directamente a las pequeñas y medianas empresas principalmente. Pero la política monetaria de los Estados Unidos, también tiene el objetivo de enfriar la economía rusa que pese a las sanciones sigue operando por más que las voces occidentales digan lo contrario.

Lo anterior, es sólo un reflejo de la crisis aguda que se vive a nivel global, pero por supuesto, en México no faltarán los bisoños que opinen que aún así, la inflación aquí, es más alta en que Estados Unidos.

Poco habrán entendido quienes opinen así, pues la economía del vecino del norte manejó por muchas décadas niveles inflacionarios de dos por ciento en promedio y hoy está cercana y por arriba de nueve por ciento, mientras que en México el promedio de las últimas dos décadas esta por arriba de 4.5 por ciento y hoy la inflación está en 8 por ciento en promedio. Alta sí, pero aún manejable para los estándares manejados en nuestro país.

Lo que intentamos destacar, es que la economía global y por supuesto la mexicana, se encuentran en una encrucijada que puede prolongar el tiempo de recuperación económica más allá del 2024. La guerra de Ucrania no sólo es bélica también es económica y los Estados Unidos comenzaron a mover sus fichas globales desde que impuso aranceles a China, su otro gran adversario en el campo geoestratégico global.

El principal peligro para México como en todas las crisis foráneas, es su integración con la economía de Estados Unidos pues la baja en la demanda y encarecimiento de bienes y servicios, impactará directamente la actividad de las pequeñas y medianas empresas nacionales por lo que urge que el gobierno de López Obrador, impulse un programa de incentivos dirigido a este tipo de empresas para poder hacer frente al periodo de recesión económica que ya se vislumbra en los albores del 2023 y que será prolongada en todo el mundo.

La política monetaria de México será fundamental para hacer frente a esta feroz crisis y aunque las autoridades del Banco de México ya preveían detener el alza de tasas, quizás hoy con la política de la FED, deberán mantenerla un tiempo más, la cual bien puede ser complementada con el recorte del circulante como en épocas anteriores, ambas fórmulas, ya probaron dar resultados en momentos anteriores.

Tipo de cambio y equilibrio fiscal, se encuentran más equilibrados, el primero apalancado claramente por los récords de remeses recibidas en los últimos dos años, mientras que el segundo, radica en la casi nula contratación de deuda a lo largo de esta administración, pues hay que decirlo, aunque le choque a los detractores, México en manos de la 4T, es de los pocos países, si no es que el único que, no se endeudó en el contexto de la pandemia.

El ambiente global en estos momentos, nos habla además de tres procesos de transición que se están gestando y a los que la mayoría de las economías deberán alinearse: la energética, la digital y la climática, pero de esto, hablaremos en la próxima entrega.