ECONOMÍA DE EU EN TRANSICIÓN

¿Transición o recesión en EU?

Es evidente que la economía estadounidense está atravesando por una transición, con desaceleración en diversos frentes. | José Luis Castillejos

Escrito en OPINIÓN el

Estados Unidos estaría en "recesión técnica” pero desde el oficialismo de Washington se considera que es una transición aunque algunos economistas estiman que el término es “pre-recesión”.

Cualquiera que sea el término que deseen acuñar a la situación de la economía norteamericana si esta llegara agravarse podría generar un "efecto dominó”, y arrastrar las economías de América Latina.

La Oficina Nacional de Investigación Económica de Estados Unidos consideró que el PIB real disminuyó a una tasa anual de 0.9% en el segundo trimestre después de caer a una tasa de 1.6% en el primer trimestre. 

Esto refleja que la primera economía del mundo habría entrado en virtual recesión técnica como resultado del lastre de los inventarios y la inversión empresarial. 

Los inventarios disminuyeron principalmente en las tiendas de mercadería general, así como en los concesionarios de vehículos motorizados. La inversión residencial se hundió 14%, estructuras un 11.7% y equipamiento un 2.7%, de acuerdo con el análisis.

Analistas internacionales sostienen que la economía norteamericana creció un 1.1% en el segundo trimestre al excluir los inventarios, lo que provocó un lastre del 2% en el crecimiento general.

Este movimiento de la economía surge después de que la Fed anunció su segunda subida de tipos consecutiva de 75 puntos básicos. 

Mientras tanto los tipos de interés se quedaron en el rango 2.25% -2.50%, que es el rango objetivo que había existido en el pico del último ciclo de aumento de tipos en diciembre de 2018. Se necesitaron tres años de aumentos de tipos de 2015 a 2018 para igualar los aumentos de tipos de los últimos cuatro meses y medio.

Un análisis del presidente de Bursamétrica, Ernesto O'Farrill Santoscoy, indica que en su estimación preliminar el Departamento de Comercio de Estados Unidos reportó una segunda caída consecutiva en el PIB al segundo trimestre. 

Durante el primer trimestre el país se contrajo en 1.6 por ciento anualizado, y en el segundo trimestre cayó en 0.9 por ciento anualizado. De inmediato, indicó, surgieron las opiniones de que Estados Unidos ha caído en una recesión técnica, definida como la contracción de por lo menos dos trimestres consecutivos en el PIB. 

Sostiene el analista que también aparecieron los argumentos en contra, es decir, la negación de estar en una recesión, tanto por parte del presidente Joe Biden, como de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, o el presidente de la Fed, Jerome Powell. 

¿Hay recesión o no?, preguntó. La definición de recesión más autorizada es la establecida por el Buró Nacional de Investigación Económica que actúa oficialmente como la institución designada para calificar a posteriori los ciclos recesivos. 

Su definición de recesión consiste en “una declinación importante en la actividad económica a lo largo del país que dura más de unos meses y que es visible en la producción industrial, en el empleo, en el ingreso real y en las ventas al menudeo y al mayoreo”, indicó. 

Los economistas sostienen que una recesión tiene que cumplir con las siguientes características: generalización geográfica y sectorial, profundidad y cierta permanencia. Solo en 1974 se dio una caída de dos trimestres consecutivos en el PIB que no fue considerada recesión por parte del Buró, al no cumplir las características definidas por este organismo.

Es evidente que la economía estadounidense está atravesando por una transición, con desaceleración en diversos frentes. 

Descartó que en México estemos en una recesión, pero el dinamismo es anémico y endémico. El Inegi también publicó su estimación preliminar del PIB al segundo trimestre y aumentó en 1.9 por ciento anual. Por sectores, el primario aumentó en 1.4 por ciento anual a pesar de la sequía. 

A su vez, el industrial creció en 3.3 por ciento anual a pesar de la caída en la producción de Pemex, y el sector servicios aumentó en 1.0 por ciento anual a pesar del impresionante flujo de remesas familiares que en términos anuales pudiera alcanzar 62 mil millones de dólares.

La contracción de la economía estadounidense durante el segundo trimestre de 2022 cumple con la definición convencional de recesión, es decir, dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo. 

Gabriela Siller, directora de análisis económico del Banco Base explicó que el 30% del Producto Interno Bruto (PIB) mexicano depende del crecimiento de EU.

Una posible recesión en Estados Unidos traería afectaciones a la economía en México, a pesar del dato positivo divulgado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) que reportó un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 1% en el segundo trimestre del año y del 2.1 % interanual.

“El riesgo de una recesión para México es bastante alto y desde este punto de vista, no hay forma de cómo México pueda evitar una recesión si Estados Unidos cae en una recesión”, alertó.

El 30% del PIB mexicano depende del crecimiento de la economía estadounidense, al ser su principal socio comercial. A su vez el 40% del PIB de México depende de las exportaciones, de las que 94 % son no petroleras, con el 80 % de este comercio destinado a Estados Unidos.

En esa línea no conviene ningún deterioro en la relación comercial con ese país.