GONZALO SOLTERO

Gonzalo Soltero, escritor de invenciones dignas de la tradición realista contemporánea

Gonzalo Soltero procura estremecer al lector con una narración sustentada en hechos científicos y alimentada por la imaginación desbordante del autor. | Jorge Iván Garduño

Escrito en OPINIÓN el

La exploración de diversos aspectos de la realidad a través de la creación literaria se entiende como una consecuencia natural del ejercicio intelectual, no como un fin, ya que se escribe para comprender o analizar lo insospechado, y no percibiendo el mundo con la finalidad de escribir.

De este modo, el escritor mexicano Gonzalo Soltero (Ciudad de México, 1973) construye un universo fenomenal, partiendo de la base que a cada línea que se va conformando se develan frente al autor nuevas lecturas de la cotidianidad de la vida, que recrean lecturas multifacéticas no previstas al inicio de la redacción de un texto, haciéndolo único y versátil.

Tomando en cuenta que la narrativa mexicana durante el último siglo ha sido básicamente realista y que la fuente de la que se ha nutrido es La Revolución, Soltero conforma su obra usando los elementos que su entorno le brinda.

Rompiendo con la idea de lo “real” y lo “irreal”, –ya que la tradición nos marca que todo aquello que no aparece en los diarios es ficticio–, el autor sortea el intrincado obstáculo de la realidad para recrear una historia de ficción en un plano verídico, y así exponernos a invenciones dignas de la tradición realista.

En "Sus ojos son fuego", un científico de nombre Adrián Ustoria se sumerge durante tres días en un juego apocalíptico en el que el ser humano toma su primigenio y eterno papel de subir como ciego a la cumbre del conocimiento y a través de la razón crear el elemento que debería salvar a la humanidad, pero en este caso contemplaremos un revés con tintes realistas que se vuelca en un experimento fatal.

De manera violenta, Gonzalo Soltero procura estremecer al lector con una narración sustentada en hechos científicos y alimentada por la imaginación desbordante del autor, que al utilizar un suceso que puede ser más real de lo que la ilusión supone, fija la atención con lógica buscando ese detonante que nos catapulte a la fantasía.

"Sus ojos son fuego", ganadora del Premio Nacional de Novela Jorge Ibargüengoitia 2003, texto en que Soltero propone una magistral tesis, donde una de las ciudades más pobladas del planeta se ve tomada por sorpresa ante un desquiciamiento general de sus habitantes, producto de las sustancias químicas de la contaminación a las que están expuestos a diario los ciudadanos de la metrópoli, por ser el mismo aire que respiran.

Las escenas más dramáticas transcurren en el interior de un laboratorio de cierto instituto universitario de prestigio nacional, donde el profesor Ustoria realiza experimentos alterando el comportamiento y agresividad de los animales utilizados para sus propósitos, mientras que el caos, la violencia y las fuerzas oscuras que circundan las calles de la Ciudad de México se apoderan de las miradas de las personas, por lo que el protagonista supone que el medio comienza a modificar el comportamiento de la población.

Con esta tesis y elementos magistralmente socorridos en "Sus ojos son fuego", Gonzalo Soltero escribe una novela con tintes tan reales, lógicos y creíbles, que se convierte en una invitación para que todo buen lector reconsidere si el comportamiento humano no estará más bien supeditado al entorno donde el sujeto vive y se desarrolla habitualmente.

"Sus ojos son fuego", un thriller con aristas de fantasía y percepción proverbial que hay que leer.

Temas