El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador va de descalabro en descalabro. La disminución en la calificación de la Deuda Soberana por parte de Moodýs no gustó nada al equipo del Secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
En el primer círculo de la dependencia conocen bien las implicaciones de esta degradación y ya se habla que de no corregir el rumbo y generar un mejor ambiente de negocios, es probable que las agencias evalúen retirar el Grado de Inversión a México en los siguientes 24 meses.
Después de la euforia por la nota de la agencia Standard & Poor´s quien movió su perspectiva de negativa a estable para México porque no se aprobaron las reformas estructurales, vino el revés de Moody´s y ayer llegó uno más que -aunque esperado- tampoco gustó nada: la degradación en la calificación a Pemex que pasó de B1 a Ba3 con perspectiva estable.
En menos de una semana, una de las valuadoras más grandes del mundo envió la señal de que las cosas no van bien con la economía mexicana, pero es de esperarse, que el mandatario desacredite a Moody´s bajo el argumento de que persigue intereses de extranjeros.
Los analistas más enterados nos cuentan que las luces de alerta sobre las finanzas pasaron del semáforo amarillo al rojo, ya el ínfimo crecimiento, la animadversión de la actual administración contra los empresarios, la creciente inseguridad jurídica y la criminalidad, convierten a la estrategia del presidente López Obrador en un fracaso total.
A esto se suma el deterioro en la relación con el gobierno de Estados Unidos, el principal socio comercial de México.
Por lo pronto, ya se observa un preocupante aumento en la deuda pública, lo que en el mediano plazo significará un obstáculo para mantener finanzas sanas. Otro tema que inquieta es la inversión fija bruta, la que es menor a la que se registró en 2018.
Nos aseguran que, de continuar el rechazo a los inversionistas, el gobierno no podrá aspirar a retomar las tasas de crecimiento que se registraron en el sexenio pasado. “Pensar que el Estado es el motor de crecimiento del país es un grave error”, aseguran los especialistas.
Aunque es una realidad que las finanzas públicas no muestran un grave deterioro, si evidencian una creciente debilidad que impide cumplir con mayores demandas de salud, educación y seguridad. No hay inversión relevante en infraestructura, salvo la de las megaobras que, al menos en el caso del AIFA, transita para convertirse en un elefante blanco.
A lo anterior, se agrega la amenaza de recesión de la economía de Estados Unidos, lo que tendrá un grave impacto en México, principalmente en el crecimiento, en el empleo y el tipo de cambio poco podrá resistir los choques externos.
Reforma de pensiones…insuficiente
Los participantes del sistema de pensiones siguen de manteles largos por los 25 años de reforma que dio origen a las Afores, sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas. Expresidentes de la Consar dicen que es importante replantear cambios que permitan elevar las pensiones, ya que, de lo contrario, México se mantendrá como uno de los países con las jubilaciones más bajas.
Así las cosas…