La Brigada de Vigilancia Animal es sin duda una de las mejores áreas de la Secretaría de Seguridad Ciudadana. Fundada desde el 2005 es la encargada de salvaguardar el bienestar de los animales y se sustenta su actuación en la Ley de Protección a los Animales de la Ciudad de México, como se puede leer en su página de internet.
Para mí, la BVA es la parte más noble del cuerpo policial, porque en ella están aquellos elementos que atienden los casos que nadie quiere atender, el de los animales que son maltratados, ultrajados, violados, abandonados o que se encuentran gravemente heridos y mientras muchas personas los ignoran, ellos no, ellos arriesgan su propia seguridad física para salvar animales. Esos son mi tipo de mexicanos favoritos.
La función de dicho cuerpo de justicia es prevenir el maltrato animal, el rescate y cuidado, mediante un trabajo permanente atiende denuncias de maltrato hacia los animales en las 16 alcaldías de la Ciudad de México y que hoy alberga un aproximado de 160 animales, la mayoría perros y algunos gatos, que requieren de cuidados y buscan un hogar que los ame y sea permanente.
En un país como México que ocupa el tercer lugar en maltrato animal; además, de los 18 millones de perros sólo 30 por ciento tiene dueño, mientras que el resto se encuentra en las calles. Tan sólo en la Ciudad de México se sacrifican nueve de cada 10 canes y gatos que no fueron reclamados o adoptados. Y con Cuauhtémoc, GAM e Iztapalapa encabezando las demarcaciones con mayor número de denuncias de violencia animal, la BVA es MÁS QUE NECESARIA y urge fortalecerla con recursos, material y ayudarlos a mejorar sus instalaciones.
Con un amplio déficit de necesidades cotidianas la Brigada de Vigilancia Animal se abre el camino día a día con las aportaciones de aquellos que la conforman y que trabajan en ella y eso no les impide entregarse todos los días a rescatar animales.
Yo ya los vi en acción. Hace una semana al realizar un rescate de unos cachorros en la alcaldía Iztacalco, la Unidad de Atención al Secretario me canalizó con ellos vía Twitter y juntos salvamos a 6 cachorros que habían nacido en la vía pública y estaban en peligro de ser atropellados, ellos se quedaron 1 herido, que ya había sido arrollado por un vehículo (maldito seas tú que lo atropellaste y ahí lo dejaste), y otros 5 que yo me llevé para buscarles casa, ya acomodé 3. Fue increíble verlos en acción.
Hoy, la Brigada necesita nuestra ayuda y trabajo en equipo, por eso levanto la voz y les dedico esta columna, primero para agradecer al secretario Omar García Harfuch, por el talento y entrega de todos aquellos en conforman la Brigada, policías, veterinarios, ayudantes, la talentosa Jefa Martha Montiel y el jefe de la BVA el Jefe Celis; pero también para pedirle que le ponga más atención a las necesidades cotidianas de la Brigada, necesitan mas recursos para su operación habitual, necesitan tener un call center dedicado exclusivamente a ellos que opere desde la SSC, necesitan tener aliados en los Mps que SÍ saquen los temas de denuncias de maltrato y encierren a los violentadores de animales, necesitan medicinas y mayores instalaciones de resguardo y para atención médica veterinaria, necesitan que los volteen a ver porque ellos solos entregan el alma y aun así les faltan cosas.
Secretario Harfuch, por favor voltee a ver a la Brigada y en este presupuesto 2021 que se viene otórgueles el dinero necesario para tener medicinas permanentes, instalaciones y patrullas adecuadas para los rescates, por favor deles todo lo que requieren para continuar haciendo la GRAN labor que hacen. Yo desde el Congreso CDMX pugnare porque así sea.
Si todos los policías se entregaran a su labor como lo hacen los elementos de la Brigada de Vigilancia Animal, otra ciudad tendríamos, Mi reconocimiento y apoyo a ustedes. Y porque sueño con que un día la CDMX no tendrá mas reportes de violencia contra los animales, como Diputada local vere que hagamos todo lo necesario para que aquellos que no tienen voz y son abusados y maltratados tengan justicia permanente.