Main logo
OPINIÓN

Mujeres, en el desamparo con AMLO

Sin la menor intención de frenar la violencia contra las mujeres. | Jorge Ramos Pérez

Escrito en OPINIÓN el

Lenguaraz, Félix Salgado Macedonio era parte del folclore político. Sus gracejadas, machistas, eran celebradas por tirios y troyanos. Era el chistoso cuyos lances le eran permitidos por ser parte, entonces, de una oposición que no representaba mayor peligro político.

Hoy se ha documentado que sus “bromas” iban más allá y que es muy posible que haya cometido delitos, que haya violentado y abusado sexualmente de mujeres.
Pero ahora, de la mano del obradorismo, puede ser gobernador de un estado donde la pobreza, la violación a los derechos humanos, las matanzas de Estado y la violencia feminicida son parte de su triste paisaje.

Para el presidente Andrés Manuel López Obrador sólo se trata de la temporada de caza. Minimiza, montado en su propio machismo, las denuncias en contra de Salgado Macedonio.
Este fin de semana la Auditoría Superior de la Federación (ASF) presentó un reporte sobre las políticas gubernamentales para frenar la violencia contra las mujeres.

Abarca desde 2009 hasta 2019.

Son casi 500 páginas en las que queda en evidencia que Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y López Obrador han sido incapaces de frenar el ataque feminicida de los hombres en más de una década.

“La ASF estimó que, a 2030, los feminicidios presentarían una tendencia creciente, por lo que en el periodo 2019-2030, tendrían una tasa media de crecimiento anual de 9.0%, al pasar de 960 feminicidios a 2,477 en ese periodo, de conformidad con las cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), por lo que de mantenerse las condiciones presentadas a nivel nacional, en el periodo 2015-2019, se encontrará presente el riesgo de que la violencia contra la mujer incremente en su expresión más extrema”.

El extenso documento, que merece una revisión a fondo, revela hallazgos de la evaluación que permitieron confirmar que “la política para la atención de la violencia contra la mujer no ha sido efectiva, debido a la inconsistencia de sus diseños, a que no se cuentan con instrumentos para conocer la imputabilidad de la política en la situación de violencia contra las mujeres que se presenta en la actualidad, y que la implementación de la política está desarticulada y sólo registró esfuerzos individualizados de los actores institucionales, con responsabilidades definidas”.

Peor aún, la ASF advierte que una “tendencia creciente que podrían presentar los feminicidios sería el reflejo de las deficiencias encontradas en la evaluación del diseño, la gestión y la implementación de la política, referentes a la desarticulación de los diseños normativo, institucional, programático, presupuestario, de procesos, de evaluación y de rendición de cuentas”.

Asimismo, alerta de la “carencia de una estrategia nacional que conjunte esfuerzos y la coordinación entre la Federación, las entidades federativas y los municipios, estos últimos que, a 2019, no se visibilizó su participación en la política, y en el caso de las entidades federativas, no en todas se logró armonizar el marco legislativo local con el federal”.
A pesar de que se definieron proyectos, advierte la ASF, no se concretaron los modelos para cada eje, de forma particular ni integral las directrices de implementación de prevención, atención, sanción y erradicación, lo cual propició una implementación aislada carente de directrices y una visión de conjunto.

La Auditoría hace una serie de recomendaciones a todos los actores políticos, incluidos el Congreso y gobiernos estatales y municipales.

Sin embargo, es de destacar el señalamiento a la Secretaría de Gobernación, encabezada por la ministra Olga Sánchez Cordero, mujer que ha relatado cómo en su juventud protestó con mujeres en demanda de sus derechos.

“La Secretaría de Gobernación, en coordinación con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana; la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Prevención, Atención, Sanción, y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, los Mecanismos para el Adelanto de las Mujeres y demás integrantes del sistema, identifique los obstáculos que han impedido establecer el Sistema de Monitoreo del Comportamiento Violento de los Individuos y de la Sociedad contra las Mujeres, a fin de determinar un programa de trabajo coordinado que permita, en el menor tiempo posible, poner en operación este instrumento estratégico de la política que marca el artículo 28 del Reglamento de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia”.

Además, “durante el periodo 2010-2019, la Segob no impuso ninguna sanción a los medios de comunicación que no fomenten la erradicación de la violencia contra las mujeres, ya que argumentó que no tienen atribuciones y porque en la ley no se mencionan los supuestos en los cuales los medios de comunicación incurrirían en incumplimiento, ni el procedimiento que se habrá de seguir, ni las sanciones a que se harán acreedores por contravenir los preceptos de la ley, por lo que esa dependencia al contar con la facultad expresa debe promover la modificación de la ley”.

El actor Diego Luna se pronunció en torno al caso Salgado Macedonio, como hicieron muchas y muchos actrices y escritoras, famosos, en Twitter.

"Señor Presidente, usted que conoce tan bien nuestro país, sabrá lo que esas denuncias a Félix Salgado Macedonio representan, aquí donde son tan pocos los casos que llegan a denunciarse, donde según cifras de la Secretaría de salud cada 4 minutos violan a una mujer o a una niña ... con total impunidad. Aquí en el país de los feminicidios. Ojalá actuara de forma distinta a quienes antes minimizaron la violencia contra las mujeres en favor de personajes en posiciones de poder. Su opinión sí es importante", escribió.

El “ya chole” con Salgado Macedonio, expresión del presidente López Obrador, reflejó su impaciencia ante los reclamos que morenistas y no morenistas le hacen al tolerar la candidatura de Salgado Macedonio.

Pero el “ya chole” y la insistencia presidencial para justificar al presunto agresor sólo demuestran que desde el Poder Ejecutivo no hay la menor intención de frenar la violencia contra las mujeres en este país.

Y si no lo quiere admitir, ojalá le pasen una copia del documento de 500 páginas que exhibe a un Estado feminicida.

 

Punto y aparte. Hablando de Guerrero, el presidente reveló el hallazgo de plantíos de coca en la muy conocida región amapolera de La Montaña. No aclaró si fueron unas matas o hectáreas completas. Una duda: López Obrador inició su campaña presidencial de 2006 en Metlatónoc, el municipio más pobre del país, para estar a tono con su eslogan de campaña: Por el bien de todos primero los pobres. ¿Hizo algo el presidente por ese municipio, por esa región que pasa de la amapola a la coca? Juzgue usted.

 

Punto final. La guerra entre puros e impuros, ultras y moderados, se trasladó a la CDMX. Por ahora, punto para los ultras...