Enrique Ochoa, que asumió la dirigencia nacional del PRI en julio de 2017, está por dejar el cargo, de acuerdo con reportes internos del propio partido oficial y del equipo de campaña de José Antonio Meade. Hasta anoche se barajaban tres nombres para sustituirlo: Emilio Gamboa, líder senatorial; Aurelio Nuño, coordinador de la campaña, y José Narro, secretario de Salud.
De acuerdo con informes extraoficiales confiados a LA SILLA ROTA, Ochoa Reza se ha confrontado durante meses con los principales operadores de la campaña de Meade Kuribreña, lo mismo que con gobernadores del PRI, que constituyen el principal foco de presión para un relevo en el Institucional.
Un factor adicional de desgaste sobre el todavía líder partidista lo constituyen señalamientos de irregularidades al frente de la Comisión Federal de Electricidad, que dirigió entre febrero de 2014 y hasta su llegada al cargo partidista. Ochoa sustituyó al frente de esa dependencia a Francisco Rojas, quien según se dijo entonces, mostró reticencias ante los alcances de la reforma energética propuesta por el presidente Peña Nieto. Rojas es un personaje cercano y ex colaborador del ex presidente Carlos Salinas de Gortari.
Al respecto la Subsecretaría de Información del PRI consideró que son “completamente falsas” las supuestas irregularidades de Enrique Ochoa Reza cuando fue director de la CFE, pues destacó que el líder priísta impulsó en la comisión la implementación del régimen especial en materia de contrataciones establecido en la Reforma Energética.
Emilio Gamboa/Aurelio Nuño/José Narro, posibles relevos de Enrique Ochoa (Especial)
Los indicios de la salida inminente de Ochoa del PRI han estado acompañados de cuestionamientos sobre la tarea de Nuño como coordinador de campaña de Meade, así como fricciones generalizadas en el cuartel general del abanderado del oficialismo.
Ochoa Reza es una figura estrechamente ligada al actual canciller Luis Videgaray, que lo impulsó hacia el PRI tras las derrotas electorales sufridas en 2016 durante la presidencia partidista de Manlio Fabio Beltrones. Colaboradores cercanos del político sonorense indicaron que su gestión en el Institucional fue bloqueada desde diversas secretarías de Estado, lo que acabó derivando en la pérdida de varias gubernaturas.
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Sobre los posibles relevos de Ochoa en el PRI se coincidió que con diversos matices, la llegada de Gamboa, Nuño o Narro enviaría el mensaje de que el presidente Peña Nieto coloca en el partido en el poder a un operador incondicional. Y que se buscará con ello un sacudimiento de la campaña de José Antonio Meade, quien a 60 días de las elecciones se mantiene en las encuestas en un lejano tercer lugar en las intenciones de voto ciudadano.
mlmt