Es necesario que el gobierno deje de plantear visiones “en retroceso” en el tema de la legalización del cannabis, ya que su consumo no originará violencia ni un mercado ilegal, como lo afirma el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguraron en expertos en seguridad y temas legislativos.
Esta semana, el mandatario expresó, en su conferencia de prensa en Palacio Nacional que la legalización del enervante originará una industria que afecte la salud, y que posiblemente originará más violencia, así como muertes.
“Pero, así como hay esa visión, existe la otra, la del negocio; y también, lo mismo: no puede ser negocio algo que pueda afectar la salud o, peor, que pueda significar violencia o pérdida de vidas humanas”, dijo el presidente.
Los especialistas en el tema mencionaron que la industria del cannabis es una puerta para generar ingresos que sean administrados por el Estado y no por el crimen organizado. De acuerdo con sus dichos, el mercado de la marihuana sigue siendo uno de los principales de las organizaciones en México y el mundo, sin embargo, hay otro tipo de drogas, como la cocaína y amapola que merecen ser puestos a debate para llevar a su legalización ya que los daños son mayores.
El único tema que debe dejar en claro el gobierno, consideraron, son las reglas para evitar que se presenten irregularidades como en la industria farmacéutica, donde se producen medicamentos de forma clandestina.
La postura del presidente camina para atrás, cuando ya hay un consenso nacional que se da desde el 2017, cuando se da el consumo medicinal. Ahora estamos en el consumo adulto. No se ha logrado entender que lo que estamos haciendo en México, lo están haciendo muchas otras naciones, entre ellas, Estados Unidos y Canadá
La senadora de Movimiento Ciudadano aseguró que la administración encabezada por López Obrador es “punitivista”, pues su visión se reduce a aumentar penas, como la prisión preventiva oficiosa, y una mayor fiscalización, para reducir el índice de delitos. Eso, dijo, lo demuestra la idea de que una legalización del cannabis “puede llevar a mayor inseguridad, cuando el tema ya está en otro tipo de drogas”.
“Hay propuestas que se están visualizando sobre el tema de la legalización de la amapola, porque si vamos a apostar por los pobres, por ayudarlos, ahí temas la posibilidad de una industria regulada que ayudé. Estamos en una discusión de prejuicios más que evidencia”.
Armando Rodríguez Luna, experto en seguridad nacional y director de Proyecto de la División de Seguridad e inteligencia Estrategic Affairs, aclaró que la generación de un mercado lícito depende de las normas e instituciones que genere el Estado mexicano en la materia, más que en el motivo de la legalización.
“Está fuera de contexto, porque el tema principal no es si la legalización de la marihuana va a generar este tipo de economías ilícitas o de vías ilegales para aprovechar esos ingresos, me parece que eso depende de los instrumentos que el Estado tenga para poder generar formas positivas. Por un lado, tenemos la forma en que se cobran esos impuestos y, por otro, cómo es que esas empresas contribuirían a la economía legal”, mencionó.
Para Javier Oliva Posada, académico y especialista en temas de seguridad por la Universidad Nacional Autónoma de México, “la discusión en el país está muy atrasada”, cuando en países con los que México tiene grandes acuerdos comerciales, como estados Unidos y Canadá, ya es legal desde hace un tiempo.
“En Estados Unidos, de 50 estados, 29 ya legalizaron la marihuana con fines terapéuticos, y 15 con fines ludidos, entre ellos California y Arizona, donde está Nevada y Las Vegas. Me parece que vamos muy a la zaga, porque además en Canadá está legalizada con fines recreativos.
“Hay que dar el primer paso, en este caso sería el consumo de la marihuana. En Estados Unidos, en Oregón ya se legalizaron todas las drogas. La droga que más consume es la marihuana, no es la que más ganancia deja, pero si hay una importante producción”, dijo.
Patria Mercado aseguró que “la legalización (del cannabis) también llevará a la creación de una industria y trabajos, que pueden ser reguladas por el gobierno” y consideró que “esa debe ser la visión” del gobierno, “pero estamos atorados”, lamentó.
Me parece que las declaraciones del presidente caminan unos pasos atrás de lo que él ya había avanzado, entendiendo la necesidad de la regulación. Ahora lo plantea como una regulación que puede tener como consecuencia mayor inseguridad y problemas a la salud
Armando Rodríguez añadió que, en todo caso, es el Estado quien debe “afinar los controles financieros y de mercado, en el caso de marihuana”, y previó que, como pasó en los Estados Unidos, poco a poco la oferta y la demanda la gana el mercado formal.
“Vale la pena recordar que, según la Oficina contra la Droga y el Delito de Naciones Unidas, la droga de mayor consumo es la marihuana, cerca de 150 millones de personas la consumen.
“Después le siguen coca y heroína, así como anfetaminas. El mercado de la marihuana es muy grande en el mundo, y muy importante para actores económicos. En el margen ilegal, sigue siendo un gran mercado de ganancias”, puntualizó.