El gobierno mexicano rechazó el plan de un “tercer país seguro”, luego que el presidente de Estados Unidos (EU), Donald Trump, amenazara con imponer un arancel gradual a todos los productos que se importen desde el país del sur.
El jueves pasado, minutos después del anuncio de Trump, el secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Kevin McAleenan declaró a medios de comunicación que buscaría acordar con México la fórmula de “país seguro” para migrantes.
Tenemos la oportunidad de asociarnos con México para alinear nuestros esfuerzos de asilo, para garantizar que los solicitantes de asilo sean procesados y protegidos en el primer espacio seguro que alcancen y no se les permita continuar en las fronteras de otros países. Necesitamos tomar una acción concertada”, dijo.
El estatuto de “tercer país seguro” implica que migrantes que radiquen en México en espera de que se realice su procedimiento de aceptación en EU.
Marcelo Ebrard afirmó que es inaceptable que México sea un “tercer país seguro” para migrantes que buscan llegar a EU.
Dijo que el límite en las concesiones lo fija la dignidad de México, la Constitución y la política migratoria suscrita en Marrakesh en 2018.
La embajadora en Estados Unidos, Martha Bárcena, declaró que “hay un límite claro a lo que podemos negociar, y el límite es la dignidad de México”.
Agregó que México ha aceptado 8 mil 835 migrantes regresados hasta el 29 de mayo y que esperan en México para tener una audiencia de asilo en las cortes estadounidense.
cmo