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Te lo explicamos: El escándalo de corrupción OHL y el gobierno mexicano

A la empresa española OHL se le acusa de presuntas prácticas fraudulentas en el aumento de costos en la construcción de las vías

Escrito en NACIÓN el

CIUDAD DE MÉXICO.- La empresa española OHL está una vez más en el ojo del huracán en México, a raíz de la red de relaciones y contratos tejidos con gobiernos locales, especialmente con el PRI del Estado de México.

La empresa ibérica creció exponencialmente en México, luego de las concesiones obtenidas en varias importantes vías de comunicación, como es el Circuito Exterior Mexiquense y el Viaducto Bicentenario, vías emblemáticas en la administración del ahora presidente de la República, Enrique Peña Nieto.

Sin embargo, desde hace varios años ha estado en tela de juicio el profesionalismo y la honorabilidad esta filial española, pues se le acusa de presuntas prácticas fraudulentas en el aumento de costos en la construcción de las vías, así como en el cobro de peaje las cuales han aumentado hasta en un 50%, en un periodo de casi 10 años.

La empresa, incluso, logró ampliar la vigencia de su concesión del Circuito Exterior Mexiquense de 2040 a 2051, lo que la convierte en una empresa boyante y con alta relaciones políticas en el país.

 

Viaducto Bicentenario

 

A principios de mayo se dieron a conocer audios entre directivos de OHL México que muestran un nuevo presunto escándalo de corrupción con funcionarios de la administración del gobernador Eruviel Ávila, especialmente, con el secretario de Comunicaciones del gobierno mexiquense, Apolinar Mena.

En estos audios se habla de alterar los precios de un tramo del Viaducto Bicentenario, el cual conecta el Estado de México con la Ciudad de México, a través una vía elevada.

En una de las grabaciones, las cuales ya fueron negadas por el empresa matriz radicada en Madrid, se puede escuchar a Pablo Wallentin, representante de OHL México, diciendo como se inflaron datos sobre el tráfico de la autopista “con todas las mañas del mundo”,

También habla de “desmadre en la construcción” y de la forma en que la compañía “salió forrada” con una obra cuyo costo se triplicó con respecto al estimado inicial.

Estas grabaciones pegaron directamente las finanzas de la empresa, pues se reflejó una caída importante de sus acciones en las bolsas de valores de México y España.

Esta crisis en el país obligó que desde España se anunciara una investigación interna para esclarecer "supuestas malas prácticas" de OHL México, aunque siempre se negó "la existencia de cualquier tipo de actuación irregular" en sus relación con el gobierno.

 

Modus operandi

 

OHL México tiene fama de hacer triquiñuelas para obtener contratos, por lo que el modus opendi es el de presentar proyectos fijando un presupuesto bajo, lo que lo hace atractivo para el contratante.

Una vez que gana, la empresa constructora casi siempre registra sobrecostos que encarecen sustancialmente la obra ganada.

Este modus operandi le ha generado a OHL procesos judiciales no sólo en España, sino en otros países como Argelia, Perú, Qatar, Gibraltar y México.

 

Circuito Exterior Mexiquense

 

El tema de Viaducto Bicentenario avivó la disputa legal que existe en el Circuito Externo Bicentenario y ahora mediante desplegados publicados en periódicos de circulación nacional se busca este presunto fraude.

En un ejemplo es el de Infraiber, empresa que se dedica al desarrollo de proyectos de comunicación y tecnología para  el control del ingreso y del aforo vehicular, proyecto que se está desarrollando en autopistas de cuota de México, y que acusa a OHL de fraude.

“El verdadero abuso de OHL se esconde en el Circuito Exterior Mexiquense y no en el Viaducto Bicentenario. Este abuso ha sido denunciado desde hace más de un año y en reiteradas ocasiones ante la Bolsa Mexicana de Valores, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, la SFP, el gobierno del Estado de México, Banobras, entre otros. Además, es objeto de diversos juicios actualmente en curso en tribunales competente”, dice el desplegado firmado por Infraiber.

En marzo de 2014, el circuito fue emplazado en un juicio promovido por Infraiber contra la Secretaría de Comunicaciones del Estado de México (SCEM) y el Sistema de Autopistas, Aeropuertos, Servicios Conexos y Auxiliares, el cual se encuentra en la séptima sala regional del Tribunal de lo Contencioso Administrativo mexiquense.

 

 

 

 

 

 

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