Para ayudar a los trabajadores ante la crisis económica generada por el covid-19, legisladores proponen el “Ingreso Básico Universal”, solo falta convencer a Andrés Manuel López Obrador para hacerlo realidad, aseguraron el senador panista Damian Zepeda y Mauricio Merino, investigador del CIDE, en su participación en la mesa de análisis El Heraldo y La Silla Rota.
La pandemia ha dejado a su paso más de un millón de empleos formales perdidos, según el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y más de 12 millones de mexicanos no percibieron ingresos, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi); en respuesta el gobierno federal sólo ha ofrecido créditos y sus ya conocidos programas sociales.
Damián Zepeda explicó que esta propuesta se ha puesto sobre la mesa desde marzo, cuando comenzaban los primeros casos de covid-19 en el país, se trata de un apoyo económico temporal mayor a los 3 mil pesos para todos los trabajadores, formales e informales.
“Es un acto humanista, de justicia porque el gobierno fue el que suspendió las actividades por la pandemia”, mencionó el panista.
Zepeda precisó que este “Ingreso Básico Universal” es para los trabajadores informales que se quedaron empleo y para que los trabajadores formales no pierdan el que tienen.
“Si das un Ingreso Básico, que sustituye al salario, ayudas al trabajador y a la fuente de empleo a tomar un respiro y seguir con la actividad económica”.
Para Merino, se trata de “una figura que supla al mercado cuando este no logre dar empleos, el Estado tiene que entrar para evitar que quien salga del mercada caiga en la pobreza”.
Tanto Zepeda como Merino coincidieron que, para que esta propuesta avance, necesitan convencer a López Obrador.
“Es importante convencer a Andrés Manuel, me extraña que no se haya convencido”, lamentó Damián Zepeda.
El investigador del CIDE aseguró que todos los actores políticos están de acuerdo, incluso en Morena, su presidente nacional, Alfonso Ramírez Cuéllar; el senador Ricardo Monreal; y el diputado Porfirio Muñoz Ledo, solo falta el presidente.
Merino señaló además que empresarios han mostrado su voluntad para incrementar el pago de impuestos entre la gente con más riqueza del país para ayudar a sufragar estos recursos destinados a los más pobres.
El senador panista dijo que la opción de la oposición es presionar, para que no tengan otra alternativa.
“Cuesta dinero, pero el presupuesto federal es mucho más grande y es perfectamente atendible”, insistió el panista.
Merino, que ve en el presidente una insistencia de no endeudarse, explicó que puede contratar deuda blanda, es decir, que es muy pagable a lo largo de los años y no medra en contra de los presupuestos anuales que es lo que le preocupa a López Obrador.
Zepeda por su parte criticó que Andrés Manuel solo vea en sus programas sociales la forma de atender la crisis, cuando los beneficiarios de dichos programas no son los más afectados económicamente por la pandemia.
“El presidente dijo ‘salgan a trabajar, ya es hora’, cuando estamos en el mayor número de contagios [...] bueno, no hay donde trabajar”, sentenció Merino.
Mientras que Zepeda concluyó “que el dinero regrese a los ciudadanos, porque no se nos olvide que es de los mexicanos”.