Main logo

Slim, el magnate que a los 12 años compró sus primeras acciones

Nacido el 28 de enero de 1940, Carlos Slim Helú, es hijo de Julién Slim Haddad y Linda Helú, inmigrantes libaneses

Escrito en NACIÓN el

Nacido el 28 de enero de 1940, Carlos Slim Helú, es hijo de Julién Slim Haddad y Linda Helú, inmigrantes libaneses.

Slim Haddad, emigró a México desde el Líbano a los 14 años con uno de sus hermanos en 1902. Dos años después de llegar al país, Slim puso en marcha La Estrella del Oriente, tienda de artículos de costura ubicada en la calle Capuchinas de Ciudad de México. Poco a poco, el negocio familiar creció hasta tener varios puntos de venta en la ciudad.

Puedes leer: Adelanta AMLO que Slim se retirará de la vida empresarial

El padre de Slim animó a todos sus hijos a entender de finanzas. Dio a cada uno un libro de contabilidad para registrar sus gastos, Carlos el quinto de seis hermanos mostró una aptitud especial para los números y, a los 12 años, hizo su primera compra de acciones en el Banco de México. Cuando Carlos tenía 13 años, su padre murió.

En 1965, tras obtener su título en Ingeniería Civil por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), comenzó a enseñar matemáticas y programación lineal en una escuela. Después de algunos años de enseñanza, Carlos Slim creó su primer negocio, una firma de corretaje de valores e Inversora Bursátil. Un año después se casó con Soumaya Domit, con la que tuvo seis hijos: Carlos, Marco Antonio, Patrick, Johanna, Vanessa y Soumaya.

Durante la década del setenta, Slim consolidó sus negocios en el sector inmobiliario, cuya actividad lo convirtió en uno de los empresarios más reconocidos del país al hacerse con compañías como Bienes Raíces Mexicanas. En 1980 fundó Grupo Galas hoy Grupo Carso; el nombre procede de las primeras letras de su nombre Carlos y las dos primeras de su esposa Soumaya.

En 1982, en medio de la nacionalización de la banca y la paralización de las finanzas del país, Slim apostó por la inversión y realizó sucesivas adquisiciones: Cigatam (Philip Morris México), Bimex, Hulera Centenario, Artes Gráficas Unidas, Fábricas de Papel Loreto y Peña Pobre, la compañía Minera Frisco y Empresas Nacobre, Euzkadi y General Tire. Compró, además, el paquete de acciones de Seguros de México, actualmente Grupo Financiero Inbursa.

En 10 años, Carlos Slim adquirió empresas de distintos sectores como el minero con la compra de Industrias Nacobre, así como también rescató la tradicional imprenta Fábricas de Papel Loreto, entre muchas otras.

En 1985, Slim se hizo con la mayoría de acciones de la sociedad de Sanborns, una de las tiendas departamentales más emblemáticas del país, dando sus primeros pasos en el negocio del retail. Hoy la cadena opera una red comercial de 434 centros ubicados en toda la república mexicana.

En 1990, bajo el mandato de Carlos Salinas de Gortari, se llevó a cabo una política de privatizaciones, donde Carlos Slim ganó la licitación para adquirir Teléfonos de México (Telmex), junto con France Telecom de Francia y SBC Telecom de Estados Unidos. Iniciaba así una nueva etapa en su desarrollo empresarial, en un sector estratégico a nivel mundial. Empresa líder en comunicaciones, entre 1991 y 2006 Telmex invirtió en infraestructuras en América Latina por un valor de 30 mil millones de dólares.

En 2007, Telmex escindió parte de su negocio y constituyó una nueva empresa, Telmex Internacional, que inició la cotización en las Bolsas de Nueva York, Madrid y México en junio de 2008.

Grupo Carso también es propietario de América Telecom, el holding de América Móvil, con participación en varias empresas de telefonía latinoamericanas. En 2008 era el quinto operador mundial, con más de 170 millones de suscriptores celulares en América Latina. América Móvil fue la pionera en el sistema de prepago en telefonía celular, solución que revolucionó el mercado mundial en la venta de móviles.

En 1997, Carlos Slim adquirió el 60% de las acciones de Sears en México, red de tiendas departamentales que desembarcó en el país en 1947. Actualmente, Sears es el grupo más grande del país debido al impulso que el empresario le ha dado en el mercado mexicano en medio de la crisis por la que atraviesa la cadena en Estados Unidos, que ha llevado al cierre de 76 establecimientos en el último año.

En septiembre de 2008, Slim sorprendió con la adquisición del 6.4% de las acciones The New York Times, una participación que incluía cerca de 9.1 millones de acciones Clase A. El Times no pasaba por un buen momento financiero y Slim, en lo que él mismo calificó de "apuesta financiera sin ningún valor estratégico", amplió este porcentaje al 7% en enero de 2009, convirtiéndose en el segundo mayor accionista del medio, por detrás de la familia Sulzberger.

Desde hace más de dos décadas Carlos Slim ha compaginado su labor empresarial con la filantropía y la creación de varias organizaciones sin ánimo de lucro.

En 1986 creó la Fundación Carso, actualmente Fundación Carlos Slim para contribuir al desarrollo y la formación de capital humano en la sociedad mexicana. En 2007 el organismo contaba con tres Institutos Carso (de Salud, Deporte y Educación), y en 2008 lanzó, con Grameen Trust, el programa Grameen-Carso de microcréditos con un capital inicial de 45 millones de dólares.

También constituyó la Fundación Telmex, dedicada a programas de educación, salud, nutrición, justicia, cultura, desarrollo humano, medio ambiente, deporte y ayuda en desastres naturales. La Fundación obtuvo el premio Nacional de Deportes en 2008.

La cultura y el patrimonio histórico también han sido prioridades para Slim Helú, que en 1994 constituyó el Museo Soumaya, con un fondo de más de 64.000 obras, y dedicado, además, a la investigación, conservación y difusión del patrimonio artístico mexicano y europeo; en el año 2000 creó la Fundación del Centro Histórico de la Ciudad de México, con el objetivo de rescatar y revitalizar la zona.

Otro de los campos de actuación que ha merecido su atención ha sido la ecología. En 2009 inauguró el Centro Deportivo Ciudad Jardín Bicentenario, ambicioso proyecto de rescate ecológico construido sobre la superficie de lo que fue el basurero Bordo de Xochiaca, en Nezahualcóyotl.

Carlos Slim ha sido objeto de importantes reconocimientos entre ellos la Medalla de Honor al Mérito Empresarial de la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México, la condecoración de Comendador de la Orden Leopoldo II de Bélgica y de la libanesa Orden del Cedro Nacional en Grado de Gran Oficial.

Entre otras distinciones ha recibido varias veces el reconocimiento a Empresario del Año y en 2004 fue designado Empresario de la Década. En junio de 2009 recibió el Premio ESADE y la Medalla del Presidente de la Universidad George Washington, máximo galardón de esta prestigiada institución, en reconocimiento a su liderazgo empresarial y filantrópico.

Ha ocupado cargos como el de vicepresidente de la Bolsa Mexicana de Valores y el de presidente de la Asociación Mexicana de Casas de Bolsa y del Comité Latinoamericano del Consejo de Administración de la Bolsa de Valores de Nueva York.

En los últimos años ha ido delegando funciones en sus tres hijos varones quienes ocupan las máximas posiciones en el consejo directivo de Grupo Carso aunque sus hijas también están vinculadas a las actividades filantrópicas y educativas que lidera la familia Slim en México.

Actualmente, Carlos Slim Domit es el presidente de Grupo Carso, Sanborns y América Móvil mientras que su hijo Patrick Slim Domit ocupa la vicepresidencia del hólding. Marco Antonio Slim Domit es el presidente de Grupo Financiera Inbursa y la Inversora Bursatil. Otro miembro reconocido de la familia es Arturo Elías Ayub, esposo de Johanna Slim, quien es el director de Alianzas Estratégicas, comunicación y relaciones institucionales de Telmex. 

Aquí las frases más célebres del magnate mexicano

“La ocupación desplaza a la preocupación, y los problemas al enfrentarlos desaparecen. Así los problemas deben hacernos más fuertes, de los fracasos aprender y hacer de los éxitos estímulos callados”.

“El trabajo bien hecho no es sólo una responsabilidad con la sociedad, es también una necesidad emocional”.

“En la riqueza misma, lo importante no es cuánto se tiene, qué se tiene; sino qué se hace con ella”.

 “Donald Trump no cree que los mexicanos tengamos tanto ingenio… pero él trabaja para mí”.

De acuerdo con el ranking global de billionaires 2019 de Forbes, el empresario mexicano llegó al nuevo listado con una fortuna de 64,000 millones de dólares.

kach