La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que su opinión personal como abogada, “la sostengo: la ''Ley Bonilla'' es inconstitucional, punto”, luego de ser cuestionada por la senadora Beatriz Paredes durante su comparecencia en la Cámara Alta.
Agregó que en ese sentido la Segob no puede intervenir en las decisiones de los congresos locales y que deberá ser la Suprema Corte de Justicia de la Nación la que revise el tema.
De acuerdo con Paredes, la Segob, como representante del gobierno federal, tiene la obligación de pronunciarse sobre el tema porque "un gobernadorcito puede creerse pequeño presidente".
En torno a la solicitud de desaparición de poderes en Veracruz, dijo que "pueden o no existir vicios de ilegalidad en el caso Veracruz, pero para eso tienen un tribunal constitucional con facultades legales, y eso es parte del Estado de derecho".
Antes, al inicio de su comparecencia en el Senado, abrió su discurso con el compromiso para esclarecer caso Ayotzinapa.
Posteriormente aseguró que la política migratoria continúa bajo el control de Gobernación, e informó que de enero a junio se estima que cruzaron México hacia Estados Unidos, un promedio de medio millón de migrantes, en su mayoría centroamericanos.
Paredes rechazó, a nombre de la bancada del PRI, el "coqueteo" que hay frente a la posibilidad de que se entreguen medios de comunicación a la iglesia.
Sánchez Cordero aseguró a senadores, que en la agenda del gobierno federal no hay reformas que modifiquen el carácter laico del Estado y su separación con la iglesia.
Tema aparte, en un hecho histórico, por primera vez coincidieron en el Senado de la República 7 mujeres en la Mesa Directiva y en la tribuna durante la sesión ordinaria.
JGM