Las autoridades de la Secretaría de Salud han asegurado que México está preparado para reaccionar si se registran casos de nuevo coronavirus en México; sin embargo, la Dirección General de Epidemiología sufrió un recorte presupuestal de 56 millones 925 mil 269 pesos para 2020 y también disminuyeron los recursos para el área de Vigilancia Epidemiológica.
Para este año se le asignó en el Presupuesto de Egresos de la Federación un total de 544 millones 193 mil 400 pesos, cifra menor a los 601 millones 118 mil 669 que se le otorgaron en 2019. Esta institución depende de la Secretaría de Salud federal y tiene como objetivo tener el control, seguimiento y estudio de enfermedades epidemiológicas que se registran en el país.
Asimismo, en el PEF 2020 también se recortó el presupuesto para el área de Vigilancia Epidemiológica, que este año cuenta con un monto de 532 millones 718 mil 050 pesos, mientras que el año pasado los recursos para este rubro sumaban 553 millones 252 mil 416.
El pasado 30 de enero, José Luis Alomía Zegarra, director general de Epidemiología, informó que México cuenta con una reserva estratégica para actuar en el caso de que se confirme algún caso positivo del nuevo Coronavirus.
Sin embargo, la reserva estratégica es en especie, ya que se trata de cubrebocas y otros materiales con los que empezarán a operar en caso de que sea necesario. El director general de Epidemiología dijo que “la reserva incluye insumos que en su momento se prevén van a requerirse para la bioseguridad de quienes van atender a casos confirmados”, ya que se busca evitar el contagio del personal hospitalario.
Asimismo, la reserva cuenta con 350 mil dosis de Oseltamivir, que se usa para tratar la influenza, ya que hasta el momento no se cuenta con un tratamiento establecido para el Coronavirus.
Al recorte presupuestal se suma que en diciembre pasado se registraron protestas en el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre), que está bajo la rectoría de la Dirección General de Epidemiología, institución encargada de hacer los análisis de casos sospechosos de Coronavirus.
LA SILLA ROTA dio a conocer a finales del año pasado que el personal de esa institución protestó en contra de su incorporación al Centro Nacional de Transfusión Sanguínea como parte de la reestructura interna que habrá en la Secretaría de Salud.
En esa ocasión, los trabajadores destacaron que había incertidumbre sobre cuáles serían sus atribuciones y denunciaron la falta de insumos en el InDRE, ya que “hay varios faltantes, como los reactivos para hacer los conjugados, para ver las enfermedades, un ejemplo podría ser rabia, estamos trabajando con reactivos a cuenta gotas, tenemos que conseguir por otros lados, porque la Secretaría no los ha proporcionado”.