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Salud garantiza atención a niños con cáncer en transición a Insabi

La Secretaría de Salud afirma que en el Hospital Infantil de México Federico Gómez, donde son atendidos los menores no ha dejado de brindar servicios y que no han faltado ni faltará medicamento

Escrito en NACIÓN el

La Secretaría de Salud garantizó que la transición del Seguro Popular al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) se realizará sin afectar los servicios médicos que reciben actualmente los pacientes, en respuesta a los padres de niños con cáncer que tomaron el Senado de la República.

La dependencia que encabeza Jorge Alcocer Varela destacó que “el Hospital Infantil de México Federico Gómez, donde son atendidos los menores, “no ha dejado de brindar servicios y que no han faltado ni faltarán medicamentos oncológicos para las niñas y niños”.

La Secretaría de Salud afirmó que “la iniciativa de ley (para la creación del Insabi) contempla la ampliación del espectro de padecimientos cubiertos hasta ahora. La transición al nuevo Instituto de Salud para el Bienestar será realizada sin afectación a los servicios médicos y medicamentos que actualmente se prestan por parte de instituciones públicas y privadas, y en el marco de estas reformas se ampliarán los servicios en favor de la población”.

Respecto al uso de 40 mil millones de pesos del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos, otra de las preocupaciones de los padres de familia, la dependencia indicó que con la aprobación del Insabi se asegura que habrá atención universal para quienes padecen enfermedades que generan gastos catastróficos, ya que todos los padecimientos serán atendidos sin restricciones.

Destacó que esto el titular de la Unidad de Administración y Finanzas, Pedro Flores Jiménez, y la titular de la Unidad Coordinadora de Vinculación y Participación Social, Mónica Mieres Hermosillo, acudieron a atender las demandas relacionadas con medicamentos, por lo que se garantiza que se cubre el abastecimiento de todos los medicamentos oncológicos, incluido el metotrexato, conforme a las disposiciones sanitarias del país.

Padres protestan

Padres de niños con cáncer tomaron el Senado de la República para evitar la aprobación del decreto para la creación del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) que se votaría hoy en el pleno. Las familias piden que el presidente Andrés Manuel López Obrador los escuche y que se hagan cambios en el documento para que se garantice que sus servicios médicos continuarán vigentes.

Alrededor de los 10:30 de la mañana, los papás de niños que son atendidos en el Hospital Infantil de México Federico Gómez cerraron todos los accesos al Senado con cuerdas y pancartas.

Israel Rivas, padre de uno de los niños, dijo que mantendrán el bloqueo hasta que haya un diálogo con los senadores y se realicen foros con especialistas sobre el impacto del Insabi.

Los padres cuestionan que en el decreto no se indica con claridad que seguirán contando con los servicios médicos que tienen ahora con el Seguro Popular y señalan también que se utilizarán a discrecionalidad 40 mil millones de pesos del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos.

“En los legisladores hay una soberbia profunda, no estamos pidiendo que se eche abajo una ley, tenemos derecho a que nos escuchen y a que (se haga) esta pequeñisima corrección, que es que se quite el transitorio que nos garantice el acceso a la salud y que siguen vigentes nuestras pólizas se ponga en un artículo normal”, enfatizó Rivas.

“Realmente sí hacemos un llamado al presidente de la República otra vez, queremos colaborar en la construcción de este país, no estamos pidiendo que se quite toda la reforma en materia de salud, pero sí queremos claridad”, expresó.

Durante la protesta denunciaron que dos mujeres que estaban impidiendo el acceso al Senado fueron golpeadas por personal de seguridad del lugar.

Las senadoras del Partido Acción Nacional, Alejandra Noemí Reynoso Sánchez y Martha Márquez dialogaron con los padres desde adentro del recinto. Mientras que afuera, el senador del Partido Revolucionario Institucional, Eruviel Ávila, también escuchó sus demandas, aunque no le permitieron acceder al edificio.