La relación entre México y Estados Unidos es esencial y no opcional para el desarrollo y progreso de ambos países, por lo que sería un error que el presidente electo, Donald Trump, cumpla con sus amenazas, coincidieron Claudia Ruiz Massieu y Roberta Jacobson, secretaria de Relaciones Exteriores del gobierno mexicano y embajadora de los Estados Unidos en México, respectivamente.
Durante su participación en la Cumbre de Negocios 2016, ambas funcionarias señalaron que el magnate republicano debe evaluar de manera más objetiva algunas de sus promesas de campaña, como la que pretende deportar a millones de indocumentados mexicanos, imponer un arancel del 35 por ciento a la importación de autopartes o automóviles provenientes de México y la de modificar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pues en caso de cumplirlas podrían generarse repercusiones negativas para los mismos Estados Unidos.
Durante su participación en la conferencia: ¿Qué esperar de la nueva administración y del panorama político en los Estados Unidos?, Ruiz Massieu reconoció que con el proceso de transición en la Casa Blanca, habrá cambios en la relación bilateral, pero dijo que estos deben ser vistos como un nuevo capítulo, aún con los enormes retos y momentos de incertidumbre que se prevén, ya que pueden ser la oportunidad idónea para fortalecer las dinámicas comerciales y de competencias de ambos países.
“En el gobierno del presidente Peña, vemos este inicio como un nuevo capítulo en la relación bilateral y como un momento en que las oportunidades son muchas si actuamos con inteligencia, unidad y sentido estratégico. La relación entre México y Estados Unidos es larga y profunda, por eso tenemos la certidumbre de que con la nueva administración se replantearán las cosas, pero se definirán en conjunto”, comentó la canciller mexicana.
Recordó que la agenda con Estados Unidos, principal socio comercial de México, fue creada para garantizar la competitividad económica de América del Norte frente a otras regiones del mundo y resaltó que una frontera competitiva, moderna y eficiente no está peleada con una frontera segura.
“Juntos, México y Estados Unidos podemos enfrentar de una mejor manera cualquier reto que se nos presente, sea el reto de inclusión de la mayoría de nuestras poblaciones, sea el reto de hacer frente a fenómenos transnacionales como el crimen organizado, cambio climático o los grupos migratorios. Ambos gobiernos estamos obligados a plantearnos como una responsabilidad política, el definir una agenda a partir de los puntos de coincidencia. No debemos dejar de lado que México y Estados Unidos comparten un valor fundamental: el respeto”, añadió.
En su participación, la embajadora Roberta Jacobson dijo desconocer las prioridades del próximo presidente estadounidense, sin embargo opinó que, desde el punto de vista de la relación bilateral que han logrado construir durante la actual administración que encabeza Barack Obama, México y Estados Unidos ya están juntos y no deben separarse.
“Yo creo que si juntos estamos combatiendo el narcotráfico, estamos construyendo Estado de Derecho y estamos avanzando de una mejor manera en un mundo complejo, debemos plantearnos los retos regionales y globales también juntos, pues solo así seremos más fuertes y más efectivos”, manifestó.
De acuerdo con la diplomática, la relación bilateral es tan profunda que no solo se forma de diálogos formales entre gobiernos, también cada día millones de ciudadanos mexicanos y estadounidenses llevan a cabo interacciones sociales y comerciales, y por estos vínculos, ambos gobiernos deben guiar sus acciones.
Por su parte, Ronnie Chan, presidente de Hang Lung Properties, indicó que este podría ser un buen momento para que México y China retomen su relación bilateral. Y es que apuntó que los acuerdos estratégicos entre ambas naciones apenas si alcanzan el 8 por ciento del total de la nación asiática, así que consideró que un Tratado de Libre Comercio sería una oportunidad para llevar la relación bilateral y comercial a otro nivel.
“Tal vez China difiera de México en algo fundamental como lo es la cultura, pero en China tenemos mucho espacio para que México crezca. Hacía diez años China no figuraba dentro de los 15 principales receptores de productos mexicanos y hoy se ha convertido en el tercer destino de sus insumos”, expresó.
mlr