La mañana de este martes la exsecretaria de Desarrollo Social (Sedesol) y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Rosario Robles Berlanga, fue vinculada a proceso por ejercicio indebido del servicio público y fue recluida en el penal femenil de Santa Martha Acatitla.
Ubicada en la alcaldía Iztapalapa, este centro de reclusión fue inaugurado en 2014 por el entonces jefe de gobierno capitalino Andrés Manuel López Obrador, hoy presidente.
En esta prisión hay al menos mil 227 reclusas, según el último Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Aunque Robles Berlanga se encuentra en la sección de iniciadas, apartada de la población en general, en caso de ser sentenciada podría terminar en contacto cotidiano con dichas reas.
Entre sus posibles futuras "compañeras" de reclusión están personajes polémicos, autores de crímenes recordados por la sociedad mexicana.
Una de las reclusas más recordadas de Santa Martha Acatitla es Juana Barraza Samperio, mejor conocida como “La Mataviejitas”.
Exluchadora, la mujer fue detenida en 2006 y casi diez años después sentenciada a 754 años de prisión por el asesinato de al menos 17 féminas mayores entre fines de los años noventa hasta su captura, sin embargo, se cree que fueron alrededor de 40 sus víctimas.
Sin embargo, su condena fue reducida a 50 años, tiempo que no le alcanzara para salir con vida de dicha cárcel, por ello Juana Barraza continuó su vida en prisión, donde se casó con otro recluso, aunque posteriormente se divorció.
Lo último que se supo de ella fue una entrevista que en Imagen Noticias realizada en prisión por el periodista Humberto Padgett, donde se dijo inocente de los crímenes que se le imputan.
Otra de las reclusas más destacadas es Mónica García Villegas, directora y dueña del colegio Enrique Rébsamen.
“Miss Mónica” es acusada del homicidio de 26 personas, quienes quedaron atrapadas cuando dicha escuela colapsó el pasado 19 de septiembre del 2017 como consecuencia de irregularidades en la construcción del inmueble a través de corrupción que ella protagonizó.
Sobre sus hombros cargó, prófuga, una recompensa por 5 millones de pesos. Estuvo más de un año entre las más buscadas por el gobierno capitalino hasta que fue detenida el pasado 11 de abril.
Unas versiones sostienen que ella se entregó, otra que una denuncia realizada por familiares de la directora derivó en su captura. Nunca se aclaró del todo dicha situación.
Recluida recientemente Esperanza Gutiérrez es otra de las “afamadas” reclusas, se trata de la mujer que habría disparado contra dos criminales de origen Israelí en un restaurante de Plaza Artz.
Sobre el caso, Esperanza dijo haber recibido un pago de 5 mil pesos por el asesinato de ambos, mismo que habría pagado el cártel Jalisco Nueva Generación.
Estos personajes se encuentran bajo el mismo techo que Rosario Robles, quien estará al menos los próximos dos meses de prisión preventiva, misma que le dio un juez.