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¿Qué pasó en Iguala esa noche de septiembre del 2014?

La memoria es una de las formas más cercanas de hacer justicia que se han encontrado, en este y muchos casos en México

Créditos: Especial
Escrito en NACIÓN el

Llegan otros 26 y 27 de septiembre, y desde un ya lejano 2014, el clamor -por parte de los padres y familiares de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos - sigue siendo: “aún nos faltan 43”.

A siete años de lo sucedido en Iguala, Guerrero, y a falta, hasta el momento, de investigaciones claras por parte de las autoridades, para algunas de las generaciones más jóvenes no es muy claro lo que aconteció aquella noche, y la memoria es una de las formas más cercanas de hacer justicia que se han encontrado, en este y muchos casos en México.

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¿Qué fue lo que pasó la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre del 2014?

LA NOCHE VIOLENTA

El primer evento se detectó a las 21.30 horas del viernes 26, cuando los alumnos trataron de  hacerse con los vehículos de la central de autobuses de Iguala para viajar a la Ciudad de México con la intención de participar en los actos en memoria de la matanza estudiantil de Tlatelolco de 1968. 

(La mañana del 26 de septiembre, un grupo de estudiantes de la normal rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, intentaron apropiarse de un autobús del transporte público, cuando los pasajeros ya estaba en la arteria vehicular con su respectivo equipaje; la policía estatal evitó que se llevaran el automotor. Cuartoscuro.)


Después de salir de la central, son alcanzados por la policía municipal, que dispara contra los estudiantes. Pese al tiroteo, un vehículo logra arribar hasta el Palacio de Justicia de Iguala, de acuerdo con información reunida en el portal http://ayotzinapa.desaparecidos.mx/.

El sábado 27, la fiscalía de Guerrero reconoció que fueron policías los que dispararon a los estudiantes; mientras la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) abrió un expediente contra los ataques de la policía municipal. 

Ese mismo día, fue encontrado el cuerpo de uno de los 58 normalistas reportados como desaparecidos, al que le habían sacado los ojos y arrancado la piel de la cara.

Al día siguiente, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) detuvo a 22 miembros de la policía de Iguala, mientras se inició la búsqueda de los normalistas desaparecidos.

El 30 de septiembre, la fiscalía federal localizó a 14 de los 57 estudiantes supuestamente desaparecidos. En Iguala, el alcalde del PRD, José Luis Abarca, solicita separarse de su cargo para no entorpecer las investigaciones, desde este día, se desconoce el paradero del edil y de su esposa, vinculada al narcotráfico que controla la zona y posible futura candidata a las elecciones municipales.

LAS INVESTIGACIONES

Fue el 2 de octubre de 2014 que el Gobierno Federal tomó el control de la situación y ordenó el envío del Ejército a Iguala y algunas zonas de Guerrero.

Dos días después, la PGJE y la Fiscalía federal encuentran seis fosas en las que se ubican 28 cadáveres calcinados, en un cerro a las afueras del municipio de Iguala.

(Tomás Zerón de Lucio, entonces director de la Agencia de Investigación Criminal (izquierda) y Jesús Murillo Karam, cuando fungía como titular de la Procuraduría Federal de la República (derecha))

 

El 5 de octubre, la fiscalía estatal afirmó que los policías municipales detuvieron a los jóvenes y los entregaron a miembros del crimen organizado local, quienes ejecutaron al menos a 17 de los 43 normalistas desaparecidos, según la confesión de dos presuntos sicarios.

El procurador del Estado de Guerrero, Iñaki Blanco, afirmó que la orden de asesinar a los jóvenes la dio “El Chucky”, integrante y uno de los líderes del cártel de los Guerreros Unidos.

El día 9 de ese mes, la Fiscalía detuvo a cuatro personas que revelaron la ubicación de cuatro fosas más. Para el 19 de octubre, el Gobierno federal asumió la seguridad de 14 municipios de Guerrero, por posibles nexos del narcotráfico con miembros de la seguridad pública.

El 20, luego de 25 días del hecho, el fiscal federal, Jesús Murillo Karam, y el ministro del Interior, Miguel Ángel Osorio Chong se reunieron con los familiares de los estudiantes, nueve días después, el entonces presidente de la República, Enrique Peña Nieto, hizo lo propio. Los padres de los normalistas, tras cinco horas de reunión con el jefe del Ejecutivo, exigieron resultados en las investigaciones.

El 27 de enero de 2015, Murillo Karam y Tomás Zerón presentaron las conclusiones de las investigaciones. "Fueron privados de la libertad, privados de la vida, incinerados y arrojados al río San Juan, (en Cocula). En ese orden, esta es la verdad histórica de los hechos”, dijo el entonces procurador general de la república en conferencia de prensa.

CONTRADICCIONES EN “LA VERDAD HISTÓRICA”

Durante la charla, documentada en un video inédito en poder de LA SILLA ROTA, "El Chereje", pieza clave para que el exprocurador Jesús Murillo Karam diera a conocer el 7 de noviembre de 2014 la "verdad histórica", relata cuál fue su participación en la desaparición y homicidio de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos.

"El Chereje" salió del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) 4 Noroeste, municipio de Tepic, el 26 de octubre de 2014 porque la PGR no comprobó los delitos de delincuencia organizada y secuestro que le imputaba, así como por la tortura, tratos degradantes e inhumanos a los que fue sometido para dar su declaración.

Además, hubo contradicciones e inconsistencias en la relatoría del traslado de los alumnos al basurero de Cocula.

En septiembre de 2015, a poco más de un año de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, en la madrugada del 27 de septiembre, en Iguala, Guerrero, La Silla Rota publicó una investigación del reportero Paris Alejandro Salazar donde se echó abajo la llamada "verdad histórica" del entonces procurador Jesús Murillo Karam.

"Mamá me puede poner una recarga me urge", fue el último mensaje vía telefónica que envió el normalista de Ayotzinapa, Jorge Anibal Cruz Mendoza, a su madre a las 01:16 horas del 27 de septiembre, el cual derriba la ''verdad histórica'' sobre la desaparición de los estudiantes sostenida por la Procuraduría General de la República (PGR), ya que de acuerdo a la dependencia federal, la hoguera en el basurero de Cocula inició a la media noche, es decir, 76 minutos antes del mensaje, cuando el joven, según la versión oficial, ya estaba muerto, publicó Salazar. 

La nota de La Silla Rota destacó otro elemento que abona a echar abajo la ''verdad histórica'' es el propio relato de la reconstrucción de hechos leído por el titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, y el jefe de la Agencia Criminal, Tomás Zerón de Lucio, el cual no coincidía con las declaraciones de los detenidos sobre la hora en que habrían sido quemados los normalistas.

Durante la conferencia de prensa del 7 de noviembre de 2014, Jesús Murillo Karam, entonces procurador, aseguró que "el fuego, según declaraciones, duró desde la medianoche hasta aproximadamente las 14 horas del día siguiente, según uno de los detenidos y otro dice que hasta las 15 horas del día 27 de septiembre".

A SIETE AÑOS

Olga Sánchez Cordero, entonces secretaria de Gobernación, afirmó en marzo de 2020 que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador iba por sepultar la "verdad histórica", como definió el exprocurador Jesús Murillo Karam al intento de carpetazo del caso de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, desaparecidos desde la noche del 26 de septiembre de 2014. En sus palabras, será una "versión diferente".

La Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración, de la Secretaría de Gobernación (Segob) afirmó que se han liberado más de 31 mil documentos relacionados con la desaparición de los normalistas de la escuela normal rural de Ayotzinapa y que revelan inconsistencias sobre la llamada "verdad histórica" del gobierno anterior.

Las autoridades presentaron este viernes avances en la investigación del caso Ayotzinapa, a siete años de la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Rural Isidro Burgos.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pidió por carta al primer ministro de Israel, Naftali Bennett, la extradición de Tomás Zerón, investigador del caso Ayotzinapa acusado de torturar y de manipular pruebas para crear la versión del caso conocida como la "verdad histórica".

López Obrador se reunió este viernes 24 de septiembre en Palacio Nacional con familiares de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, miembros de la Comisión de la Verdad y de la Fiscalía.

En rueda de prensa, Encinas consideró acreditado que Zerón, prófugo en Israel, "incurrió en omisiones y responsabilidad grave en la construcción de la verdad histórica".

(djh)