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“Que Jalisco abandone Pacto fiscal, un balazo y disparate”: senadora

El gobernador constitucional de Jalisco, Enrique Alfaro tiene intenciones de que Jalisco abandone el Pacto Fiscal Federal

Escrito en NACIÓN el

Ante las intenciones manifiestas por parte del ciudadano gobernador constitucional de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, de que el estado abandone el Pacto Fiscal Federal, con el aval de los diputados del Congreso local, la senadora María Antonia Cárdenas Mariscal expresó lo siguiente:

Que Jalisco abandone Pacto Fiscal Federal es un balazo en el pie y un disparate del señor gobernador Enrique Alfaro, que pone en riesgo el futuro de los jaliscienses, además de que se busca hacerlo a espaldas de la ciudadanía con el apoyo del Congreso de Jalisco, jugando a crear su propio sistema tributario.

Con todo respeto señor Gobernador, es una estupidez la postura simplista de pensar que lo que los estados reciben de la Federación, es sólo una pequeña parte de lo que recaudan. Explico por qué.

El Gobierno federal a través de la Secretaría de Hacienda, de la Secretaría de Salud, del IMSS, del ISSSTE, de Pemex, CFE y a través de todo el Sistema Nacional de Seguridad Pública, del Ejército con los planes DNIII, de la Guardia Nacional, de la infraestructura de comunicaciones y transportes, llámense carreteras, autopistas, puertos, aeropuertos, infraestructura de la educación que imparte la SEP en los niveles de Jardín de Niños, Primaria, Secundaria, Preparatoria y Universidad; ese Gasto Federal, con el conjunto de las Secretarías de Estado, Organismos Descentralizados y el gasto integral que un estado recibe del Gobierno Federal, no se puede reducir a sólo pesos y centavos, lo que en este caso recibe Jalisco del Gobierno federal en la parte de recaudación fiscal que se capta en Jalisco.

Si de verdad Jalisco quisiera salir del Pacto Fiscal, el Gobierno federal podría, si tuviera una postura dura y áspera, decirle que se haga cargo de toda la infraestructura del gasto en Salud, de los Hospitales Públicos, del Gasto Educativo, se dejaría de dar subsidios  a las universidades, dejaría de existir la red de escuelas públicas llamada Conalep, dejarían de subsidiarse millones de becas que se pagan con recursos federales, se dejaría a la deriva la red de carreteras y se tendría que hacer cargo el gobierno estatal, también del mantenimiento de los aeropuertos, de la red de puertos, lo mismo en caso de desastres naturales.

Contrario a lo que piensan algunos gobernadores y que hoy está claro que Usted así lo cree también, hay estudios que muestran que es la Ciudad de México, la que tiene el más alto nivel de recaudación fiscal de todo el país, y lo que recibe, incluyendo todos los rubros, es menos de lo que le corresponde en comparación con los pagos que hace.

Señor gobernador Alfaro, usted sólo ve un porcentaje que no dice mucho. Lo que no quiere reconocer la derecha, es que sus estados no sólo reciben las participaciones federales, sino lo más importante, es que reciben un importante Gasto Federal en todos estos rubros que le detallo.

Una parte muy importante de los recursos federales se destina al pago de intereses de la Deuda Pública Federal, que se contrata para financiar el gasto público y para financiar la amortización de los vencimientos de la deuda. Así que, si usted tomara una decisión de esta naturaleza, tendría que asumir la parte proporcional de la Deuda Federal y tendría que pagarla con los impuestos que recaude. Interesante sería ver cómo le hace para pagar esto y cientos de miles de millones de pesos que absorbe el Gobierno federal en Educación Pública y todos los rubros que ya le he mencionado.

Déjeme decirle que con todos esos gastos que cubre la Federación, inevitablemente saldríamos perdiendo los jaliscienses, y contrario a esta idea de que los estados del norte subsidian los gastos federales, le recuerdo que es la Ciudad de México la que recauda más de 40% del total de los impuestos de la República.

Ahora bien, no hay que olvidar que una decisión de tal magnitud no se puede tomar así tan a la ligera. Es éste un tema que inevitablemente tiene que pasar por el Congreso de la Unión. Cualquier decisión que tome un estado respecto a salir del Pacto Federal y Fiscal, implica no sólo un acuerdo administrativo entre un Gobernador y su Congreso local. Implica un cambio en algo que está vigente año con año y que es aprobado por las cámaras de Diputados y Senadores: se llama Ley de Coordinación Fiscal, misma que es una ley de observancia obligatoria y sólo a través de una decisión que tomara para 2021 el Congreso de la Unión, se podría modificar esta Ley, autorizando algún porcentaje mayor de los impuestos que se recaudan para que se regresen a un estado.

Así que le guste o no, vivimos en un Estado de Derecho en el que aun los gobernadores que se sienten pequeños dictadores en sus estados, no pueden hacer lo que les dé la gana porque la Constitución establece que por encima de las leyes de los estados, de las constituciones locales, están las leyes federales que aprueba la Cámara de Diputados y el Senado de la República, y cualquier controversia entre estados y Gobierno federal, se resuelve en un proceso en el que interviene el Senado y en última instancia la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así que no pueden los gobernadores actuar por la vía libre.

Señor Gobernador, sabemos que tiene el control absoluto en el Congreso de Jalisco, pero, aunque aprobara a espaldas de la ciudadanía jalisciense abandonar el Pacto Fiscal, no sería más que una victoria efímera que a la larga lamentaría y nos afectaría a los ciudadanos.

Sabemos que lo busca hacer así, a escondidas de los jaliscienses, porque sabe que no cuenta con el respaldo de la gente. Le tiene pánico a la ciudadanía que está bien informada y que sabe que Jalisco tiene la deuda más grande en la historia de la entidad, superando los 11 mil millones de pesos.

Es por eso que la ciudadanía consciente le hacemos un llamado a Usted y a su mayoría en el Congreso de Jalisco, a que reflexione bien esta decisión que tarde o temprano terminaremos pagando los jaliscienses.

Señor Gobernador Enrique Alfaro, si usted cree que los jaliscienses somos tontos está muy equivocado. El manejo que usted está haciendo de esta situación, es a todas luces con el objetivo de salvar su pellejo para tapar el excesivo dispendio de su gestión y para impulsar sus aspiraciones presidenciales. Sería imperdonable que, en su desesperación por tapar la situación presupuestal de Jalisco, pretenda poner en riesgo de esta forma el futuro de nuestra niñez y la juventud.