La Auditoría Superior de la Federación (ASF) perfila darle la razón al presidente Andrés Manuel López Obrador con la nueva auditoría hecha al costo estimado por la cancelación del nuevo aeropuerto en Texcoco (NAIM), pues los resultados rondarían entre los 100 y 150 mil millones de pesos, y no los 331.9 mil millones calculados inicialmente.
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Fuentes de la ASF confirmaron a La Silla Rota que esos serían los resultados de la auditoría conjunta que realizó el Grupo Aeroportuario Ciudad de México junto a un equipo especial de la Auditoría Superior. Se espera que el informe oficial se entregue en las próximas horas.
El resultado no sería muy diferente del informado inicialmente por el gobierno federal; es decir, sí habría un sobrecosto por la cancelación de esta obra que inició en 2014 y se canceló en 2019; pero sería mucho menor del que estimó inicialmente la ASF.
El tema ha sido uno de los más álgidos y relevantes en términos políticos durante el último mes, pues luego de que el auditor superior, David Colmenares, presentara el informe de la cuenta pública 2019 a la Cámara de Diputados, salió a desmentirlo el presidente, en declaraciones históricas.
El primer informe, presentado el 20 de febrero por la ASF señalaba que el sobrecosto por la cancelación del proyecto aeroportuario en Texcoco, que inició en el sexenio de Enrique Peña Nieto, habría costado tres veces más de lo que estimó el presidente López Obrador.
Fue por esta razón por la que el mandatario pidió una revisión exhaustiva del informe a través de una carta dirigida a Dulce María Sauri presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.
En consecuencia, el auditor Agustín Caso –responsable de la auditoría en cuestión– emitió un comunicado de prensa ese mismo día para reconocer "inconsistencias", hecho que le costó la separación temporal de su cargo. Su lugar fue ocupado temporalmente por el auditor Tizoc Villalobos.
Sin embargo, David Colmenares no asignó a Villalobos para realizar una nueva auditoría en conjunto con Grupo Aeroportuario Ciudad de México, ente responsable de la cancelación de este proyecto.
En medio de un contexto político –la bancada de Morena en la Cámara de Diputados pidió la renuncia de Colmenares argumentando que su trabajo no era apolítico–, el titular de la ASF encargó está tarea al auditor Gerardo Lozano Dubernard, auditor especial de Cumplimiento Financiero.
LOS DATOS DEL NUEVO INFORME
Las fuentes consultadas, que solicitaron reservar su nombre, aseguraron a La Silla Rota que el resultado de esta nueva confronta está por concluirse.
“Presentarían este resultado de manera pública en el transcurso de este jueves y mañana. Se utilizó otra metodología contable y no la metodología de costo de oportunidad, que fue la que arrojó el resultado de la primera auditoría que molestó al presidente”, explicaron.
“El resultado será diferente por usarse metodologías diferentes. En estos nuevos resultados no se están estimando los costos futuros, para dejar fuera de la discusión los bonos y se deje de especular sobre números a futuro”.
En este momento se estima que la variación del resultado entre el cálculo de cancelación del gobierno federal –100 mil millones de pesos– y el auditor Caso –331.9 mil millones de pesos– quede en un promedio de 150 mil millones.
“Es la parte que todavía están terminando por cerrar, probablemente quedé con pequeñas variaciones sean más o menos”, precisaron. “Y ahí ajustarían el tema de cálculos futuros de manera más contable, lo que podría quizás reducir la cantidad todavía más”.
Durante su comparecencia en el Congreso, el auditor Agustín Caso defendió su trabajo, su historial laboral, los resultados de su auditoría y sobre todo la metodología que ocupó.
Pero también destacó que su trabajo fue a político y sin ninguna intención de afectar la imagen del mandatario. “No hubo dolo, no vengo a defender a capa y espada una cifra, vengo a poner sobre la mesa las razones por las cuales se presentan”, sustentó en aquella ocasión.
kach