Main logo

Operan en México 9 mafias internacionales con nexos al narcotráfico

Rusos, chinos, italianos, israelíes, colombianos, coreanos, peruanos y japoneses se relacionan con el crimen organizado mexicano para trasiego de drogas, armas y lavado de dinero, entre otros

Escrito en NACIÓN el

Nueve mafias de Asía, Europa y Sudamérica tienen presencia en México y su capital, además de profundos nexos con cárteles del narcotráfico.

Los documentos “Organizaciones Delincuenciales Internacionales en México”, elaborado en 2018 por la entonces Procuraduría General de la República (ahora Fiscalía) y "Panorama Estratégico Final”, hecho por la Procuraduría de la Ciudad de México, detallan las relaciones entre las organizaciones criminales internacionales y las domésticas para el abastecimiento de droga, armas, protección institucional y lavado de dinero, algunas desde hace más de una década.

Del cruce de informes del reporte de la procuraduría, con datos de 2007, se desprende que las únicas mafias que han modificado drásticamente sus estructuras son las de Colombia, que dejaron de ser cárteles y ahora son bandas criminales o “Bacrim”, pero acorde con los documentos en el país están asentadas la Mafia Rusa, la China, la Koreana, la Yakuza; disidentes de las FARC, la Peruana, la Italiana, las Bacrim y la Israelí.

Ésta última se vio inmiscuida en una balacera en Plaza Artz, donde fueron asesinados dos de sus exponentes: Ben Sutchi y Azulay Alon.

Avances en la carpeta FCIH/1/UI-1C/D/00207/07-2019 señalan que los israelíes colaboraban en diferentes delitos con el cártel de Sinaloa y que tres semanas antes otro hombre de Israel y una mujer fueron capturados en un cateo en una colonia aledaña a donde se ubica Plaza Artz, en Álvaro Obregón.

De hecho, Sutchi ya había sido detenido en 2005 en Polanco y de ahí se descubrieron nexos con el cártel de los Beltrán Leyva, entonces socios de Joaquín “El Chapo” Guzmán e Ismael “El Mayo” Zambada, líderes sinaloenses.

Los informes de la FGR y la procuraduría capitalina detallan aún más sobre las organizaciones delictivas foráneas, por ejemplo, la Mafia Rusa tiene en México tres exponentes: la Solastevskaya, Tambovskaya; Podoskaya y la Ismailovskaya.

Uno de los pocos casos documentados es el desarrollado en la averiguación PGR/SEIDO/UIETMIO/AP/109/2010, en la cual se indagó la sustracción, en 2010, de Maximiliano, un niño mexicano y ruso que fue víctima de una red de trata de personas y que develó corrupción en el seno del Instituto Nacional de Migración.

De acuerdo con la FGR, células de las mafias rusas se han asentado por periodos de tiempo en Cancún y Playa del Carmen.

Por su parte, la China comprende a cinco organizaciones: Triángulo de Oro, Bambú Unidos, 14-4, Flying Dragons y Triada China.

El caso más sonado aquí es el de Zhenli Ye Gon, a quien el gobierno mexicano le incautó el que en su momento (2006) fue el mayor volumen de pseudoefedrina interceptado, además de millones de dólares y propiedades presuntamente vinculadas con lavado de dinero para los cárteles.

No obstante, el informe “Panorama Estratégico Final” abunda en que los grupos delictivos chinos tenían desde hace más de una década amplia presencia, aunque con un perfil bajo, en todo el país.

“Con las triadas chinas las relaciones con los cárteles son recurrentes; los miembros de las triadas se manejan bajo el disfraz de ejecutivos honorables pero es solo el ‘barniz’ para negocios a gran escala en Estados Unidos e incipientemente en México, a través de las colonias asiáticas o ‘Tongs’ que se organizan como cárteles”, se lee en el documento.

De la Italiana se sabe solamente de la Camorra, que presuntamente ordenó el asesinato de Salvatore Stefano, en abril pasado, en un restaurante de la alcaldía Cuauhtémoc.

LA SILLA ROTA reveló que este homicidio preocupó al Consulado italiano, que desde entonces ha pedido resultados a las autoridades locales para dar con el homicida material e intelectual e información más honda sobre cómo fue que la Camorra llegó a México.

Conforme a lo establecido en el expediente FCH/CUH-5/UI-3S/D/890/04-2019, Salvatore tenía un casi un año en México. Era un estafador que vendía maquinaria para construcción supuestamente alemana y de buena calidad, pero que en realidad era china.

Fue asesinado a tiros dentro de un restaurante en la alcaldía Cuauhtémoc, donde departía con otros compatriotas; el crimen fue achacado a la Camorra, mafia del sur de Italia, a través del intercambio de información entre la Procuraduría local y la Embajada.

Sobre la Peruana aparece la organización de “Los Norteños”; de Colombia están el Clan del Golfo y los Urabeños y de la Koreana se resalta que tiene como nicho el barrio de Tepito, en Ciudad de México.

Tanto los colombianos como los peruanos son vinculados más a la producción de cocaína y el abastecimiento de la misma a los cárteles pero desde principios del siglo XXI se han diversificado a la clonación de tarjetas y robo a casa habitación.

AJ