Como un "zombie". Así calificó Alfonso Ramírez Cuéllar, al partido político que encabeza de manera interina. "Está ausente, parece zombie, una remora, con esta crisis que atraviesa". Y de pronto, cansado de los dimes y diretes con la secretaria general en funciones de presidenta Yeidckol Polevnsky, (con quien no se ha reunido a dos semanas de su nombramiento), revela, "Morena estaba a punto de perder el registro hace unos meses por no tener listo el padrón. Hubiera sido un error perderlo luego de tener una votación de 30 millones en las elecciones".
Su declaración no es cualquier cosa, pues deja ver que, además de que el tema no había sido público, ocurrió mientras Polevnsky litigaba en tribunales temas jurídicos de su partido, el partido en el poder, que hubiera estado a punto de dejar de existir dejando huérfano, en términos simples, al presidente López Obrador.
Pese a la insistencia de la prensa, Ramírez Cuéllar evade y elegantemente solo afirma que una probable reunión con Yeidckol sigue en pie, buscando el momento oportuno, pero sin fecha establecida. "No queremos cometer errores", adelanta. "Queremos que sea una plática tranquila, respetuosa y civilizada".
El jueves, Ramírez Cuéllar acudirá a entregar al Instituto Nacional Electoral la papelería que acredita su nombramiento y el de otros más dentro del partido, como el de Rafael Barajas "El Fisgón" quien encabeza el Instituto Nacional de Formación Política (INFP) y a quien Yeidckol advirtió realizará auditorias en su área.
Por eso, el caricaturista le respondió: "no hemos recibido dinero de comités estatales, la gente que trabaja con nosotros ha sido como voluntarios. Comenzaremos ya a impartir cursos, porque hasta este momento tenemos bloqueado el instituto en cuanto a formación de cuadros políticos. Invitamos a la señora a tomar un curso, con urgencia, de ética".
Ramírez Cuéllar adelantó que confía en la resolución del tribunal electoral y el aval del INE para su dirigencia interina. "Vamos a respetar sus tiempos, nosotros no seremos fuente de inestabilidad nacional".
Por su parte Enrique Dussel, integrante del INFP, señaló "el presidente -dijo en referencia a López Obrador- es como un gran General sin ejército; y así no podrá ganar la batalla. Morena ha perdido tiempo en minucias y proyectos personales; y no está exento de corrupción, por eso hay que perseguirla".