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México no es culpable del sistema electoral de EU: Lorenzo Meyer

En entrevista, avala que gobierno de AMLO siga Doctrina Estrada; celebra que gobierno busque cambiar de régimen

Escrito en NACIÓN el

El internacionalista y académico Lorenzo Meyer aseguró que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador hace bien en no pronunciarse ante el proceso electoral de los Estados Unidos, pues no se ha enviado una señal oficial de que Joe Biden haya ganado.

En entrevista con La Silla Rota, Meyer consideró que el gobierno mexicano no es responsable de que el sistema electoral de los Estados Unidos no dé una señal inmediata sobre el triunfo de alguno de sus candidatos, pues esto sucederá hasta enero.

El premio Nacional de Ciencias y Artes 2011 celebra que el gobierno busque cambiar el régimen político y “devolver la dignidad” a quienes menos tienen, no opina sobre el fondo de la división en Morena, pero asegura que le hace falta unidad.

 ¿Felicitar a Biden se puede considerar una injerencia?

Sí es una injerencia, pero no es una injerencia inusual, ya vimos como otros gobiernos oficialmente dieron la felicitación. Pero nosotros somos México y tenemos una historia de relación con Estados Unidos en donde este asunto sí es importante. 

México nunca da reconocimientos, no debería dar reconocimientos porque esa es su doctrina internacional, la Estrada. Y es así porque, en el pasado, Estados Unidos usó eso del reconocimiento como una forma de presión muy dura y muy eficaz, desde el siglo XIX, cuando se disputaban, por las armas, más que del voto, la presidencia.

Ahí está el punto, como dicen, “la mula no era arisca, los palos la hicieron”. (…) El gobierno de Andrés Manuel recuerda con mucha puntualidad que España (inmediatamente) felicitó a Felipe Calderón, en 2006. No era un tema de gobierno, solamente la felicitación, pero sirvió como señal para una cargada que luego vino de otros gobiernos.

Hay otro problema, Estados Unidos, por tener un sistema electoral tan antiguo y obsoleto, no tiene una autoridad central que reconozca quién ganó, no hay una instancia oficial, un equivalente sería que el candidato perdedor acepte que ya perdió, pero Trump no lo ha hecho ni da señales de querer hacerlo.

México no tiene la culpa de que los norteamericanos tengan esa forma tan obsoleta de elecciones, entonces no se le puede decir (al presidente) “oiga, usted por qué no fue rápidamente a dar su reconocimiento”, porque no hay una señal de reconocimiento, pero no es culpa de nosotros, es de los norteamericanos.

¿Ve que pueda haber intromisión de EU con Biden?

Todo me indica a mí que es una vuelta a lo tradicional, a la relación tradicional con México que no es particularmente importante para Estados Unidos, para nosotros sí, porque para nosotros es casi a única relación que tenemos con el mundo externo, pero para los Estados Unidos, la relación con México es cosa muy secundaria en este momento.

¿Entonces no se genera una relación ríspida con Biden?

No, ¿usted cree que a Biden le importa que lo feliciten o no? Él anda ocupado en que Trump va a intentar echar abajo la elección, lo de la felicitación es lo de menos, el “me sonrió en la fiesta”, pero lo importante no es México, salvo cuando Estados Unido lo decide; y México fue importante para Trump cuando, en 2015, nos insultó.

En ciencia política no hay pronósticos muy buenos, pero uno puede ver de dónde viene Biden, de la vicepresidencia de dos cuatrienios de Barack Obama y ¿qué hizo Obama con México? pues nada importante.

¿Algo que vaya bien o no tan bien, en el gobierno de López Obrador?

La idea de López Obrador es cambiar al régimen, no es tener un gobierno más, sino un cambio de régimen, un cambio de las reglas reales y profundas del ejercicio del poder y en ese punto lo que veo con mucho agrado -yo, no que los demás lo vean así- es el énfasis en devolverle la dignidad a las clases más castigadas en la distribución de los bienes materiales, es otra manera de decir que a los pobres.

Sus programas sociales no los van asar de pobres, pero por lo menos los hacen ver que este gobierno los toma en cuenta, que es su gobierno, cosa rarísima en México. Pero eso, la decisión de cambiar la naturaleza del régimen, empezar a redistribuir la riqueza, que es lo que están reclamado por los gobernadores, estos gobernadores rencorosos que dicen “nosotros pagamos mucho y nos dan poco”, bueno, pues claro, pues de eso se trata.

¿Cree que se esté haciendo un buen frente contra la corrupción?

Si usted fuera presenta, ¿sabe lo que es mover la maquinaria de este país, con el régimen priista y panista? De prácticamente un siglo, porque podemos poner un inicio en el momento en que los carrancistas se deshacen de sus opositores y ponen su Constitución en 1917. ¿Que carrancear no era sinónimo de robar? Esos cambios son lentos.

Quien no vea que México está caracterizado por una gran corrupción es que está ciego o está tonto o las dos cosas juntas, es una lucha que no se va a ganar completamente, nunca nadie la ha ganado. El uso del poder público en beneficio privado está en todas partes, es un esfuerzo interminable, pero aquí se tratad, por lo menos, acotarlo.

¿Las divisiones en Morena le dificultan las cosas al presidente?

Claro que sí, pero todo partido en el poder tiene disputas por el poder y, cuando están fuera del poder, cuando los derrotan, también tienen disputas, los partidos siempre tienen conflictos al interior. Que lo ideal para alguien que está al frente de un gobierno sea tener el apoyo de un partido unificado, disciplinado, honesto, comprometido con los programas ideológicos, eso es lo ideal, pero raras veces se tiene.

Sí es un problema para el gobierno, para el Jefe del Ejecutivo, que sea un partido que nació muy forzado por las circunstancias, porque fracasó el PRD, porque al PRD se lo comió la corrupción, y es muy posible que pase con Morena.

¿Lo ve en el mismo escenario, en un futuro?

No lo sé, no conozco mucho la vida de ese partido, solo la veo por fuera y digo ¡Dios santo! Ya están otra vez ahí. Andrés Manuel dice que no se quiere meter y creo que eso está bien, pero los cuadros internos de morena casi no existen, fue amalgama de muchos otros y gente nueva que se han incorporado, pero todos los puestos relevantes tienen una biografía en el PRI o el PRD, que no son muy buenas escuelas.

fmma