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México, entre los países con más rezago en DH: AI

Amnistía Internacional consideró que México tiene mayores violaciones a los derechos humanos en cuanto a la falta de acceso a la justicia

Escrito en NACIÓN el

Amnistía Internacional considera a México dentro de los países -de todo el continente- con mayores violaciones a los derechos humanos en cuanto a la falta de acceso a la justicia, a la aplicación de políticas erróneas de Seguridad Pública, y a abusos a: defensores de derechos humanos, refugiados, migrantes, apátridas, a mujeres, niñas, y a los pueblos indígenas.

Dentro de su informe anual AMR01/6479/2017, la organización envía un mensaje a la XLVII Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) “Fortaleciendo el Diálogo y Concertación para la Prosperidad” para pedir a los Estados prioricen los derechos humanos como eje transversal en las políticas públicas de los países.

“América continúa siendo la región más desigual y violenta del mundo. Enfrentamos un clima de graves retrocesos en el ejercicio de derechos fundamentales de las mayorías. La situación de crisis se ha visto acelerada por el aumento de obstáculos y restricciones para acceder a la justicia y a las libertades fundamentales. Las oleadas de represión se han tornado cada vez más visibles y violentas; con frecuencia, los Estados hacen uso indebido de los sistemas judiciales y de los aparatos de seguridad para responder a la disidencia y al creciente descontento de las ciudadanías”, acusa el informe.

Particularmente México, la autoridad es reacia a las críticas y han negado que haya crisis de derechos humanos, y con ello la posibilidad de justicia.

“A pesar de que se ha denunciado la desaparición de casi 30.000 personas, y miles han perdido la vida a consecuencia de las operaciones de seguridad en el contexto de la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, y de que miles más sufren desplazamiento forzado debido a la violencia, las autoridades parecen hacer caso omiso de las críticas de la sociedad civil mexicana y de las organizaciones internacionales, incluida la ONU y el Sistema Interamericano de Derechos Humanos”, establece el documento.

Señala que empresas y grupos delictivos tienen cada vez más influencia y en muchos casos son responsables de los crecientes niveles de violencia y abusos, de los que los Estados no son capaces de responder de acuerdo a los estándares internacionales, potencializando que muchas violaciones de derechos humanos sean producto de la tendencia a la militarización de la seguridad pública.

Por ello, el organismo hace un llamado a respetar el derecho de las personas a manifestarse pacíficamente y establecer mecanismos claros y eficaces contra el uso excesivo de la fuerza por los cuerpos de seguridad.

En cuanto a la situación de periodistas, activistas o defensores de derechos humanos, Amnistía Internacional señala que en lo que va de 2017, seis periodistas y cinco defensores de derechos humanos han sido asesinados en México por ejercer su oficio.

“Son estas personas las que se encuentran en la primera línea de la crisis de derechos humanos en el país, y sin una protección efectiva por parte de las autoridades. En 2010, México inauguró una nueva Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión, que hasta ahora ha demostrado ser totalmente ineficaz, al igual que el mecanismo de protección para defensores y defensoras de los derechos humanos y periodistas, otra iniciativa que carece de los recursos y la voluntad política para realmente atender la crisis”, criticó.

Amnistía Internacional señala que cientos de miles de personas llegan a México para buscar asilo o de paso a Estados Unidos, pero muchas de ellas enfrentan homicidios, reclusión, secuestros, violencia sexual, trata de personas o extorsiones por parte de bandas delictivas que casi siempre actúan en complicidad con las autoridades. Los afectados por esas situaciones son niños, niñas, mujeres, adolescentes, y la comunidad LGBTI.

Por ello urgió a México a garantizar que los programas de recepción, reintegración y protección para migrantes deportadas respeten los derechos y protejan a los grupos vulnerables, pues los migrantes no sólo viajan para mejorar la situación económica, sino que huyen de la creciente violencia e inseguridad en sus ciudades.

En cuanto a la situación de mujeres y niñas, el organismo reclama que los avances reales de la autoridad para combatir la violencia contra mujeres y niñas han sido deficientes, y que las violaciones sexuales y feminicidios quedan impunes.

Asimismo critica que aunque en junio de 2016, la OEA adoptó la Declaración Americana sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, en todo el continente los indígenas sufren violencia, homicidios y uso excesivo de la fuerza por parte de la policía, además de abusos en su derecho a sus tierras, territorios, recursos naturales y cultura.

El informe señala que en México persiste la exclusión, pobreza, desigualdad y discriminación sistémica, ya que los pueblos indígenas continúan siendo desplazados a la fuerza de sus propias tierras por agentes estatales y no estatales, es decir, empresas que buscan su propio beneficio económico. Ello amenaza la cultura y economía de los pueblos.

“Amnistía Internacional hace un llamado garantizar la consulta previa e informada como derecho de los pueblos indígenas, de conformidad a lo establecido en Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes y la Declaración Americana de Pueblos Indígenas”.

Además de México, el informe menciona casos de abusos y violaciones a los derechos humanos de diversa índole en Paraguay, Estados Unidos, Venezuela, Jamaica, República Dominicana, Haiti, Bahamas, Chile, Ecuador, El Salvador, Perú, Brasil, Nicaragua, Honduras, Guatemala, Colombia, Argentina, Cuba.