El financiamiento en servicios de salud que hace el Estado mexicano es equivalente al 52% a través de un seguro obligatorio, por lo que la población termina por desembolsar fuertes cantidades que afectan a la economía de los hogares, expuso Federico Guanais, director adjunto de la división salud de la OCDE.
Dicha cifra se ubica 22 puntos porcentuales por debajo del promedio de los países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos, que es del 73%, reportó La Jornada.
En adición, de acuerdo con el informe Panorama de la Salud 2019 elaborado por el organismo, 5.5% de los hogares atraviesa por una situación de gasto catastrófico, impacto que repercute más en condiciones de pobreza; mientras que un 10% de la población se encuentra excluida de la cobertura básica de salud.
Asimismo, en referencia al PIB, el gasto gubernamental de México en salud es 3.3% menor en comparación con el promedio de 8.8% de la OCDE. Es decir, el gasto per cápita mexicano es de mil 138 dólares; la media es de 3 mil 994 dólares.
Por otro lado, aseguró que la diabetes obesidad son los principales retos del país en la materia.
En este sentido, consideró que una atención primaria accesible y de calidad ayuda a prevenir que las personas que padecen este tipo de enfermedades lleguen a los hospitales o alcancen consecuencias mortales.
Para lo que “gastar mejor” es más importante que gastar más, apuntó Guanais, además de que consideró factible que el país garantice la cobertura universal en salud.
djh