La iniciativa de reforma a la Ley de Hidrocarburos, que envió el presidente Andrés Manuel López Obrador a la Cámara de Diputados, podría ser aprobada por el pleno legislativo antes del 30 de abril, en una ruta parecida a la que siguieron las reformas a la Ley de la Industria Eléctrica.
La iniciativa que modifica la ley secundaria del sector –según lo ha dicho López Obrador– tiene como objetivo regular los precios de combustibles y combatir el robo de combustible, mejor conocido como huachicoleo.
La Junta Directiva de la Comisión de Energía, encabezada por el morenista Manuel Rodríguez, publicó el acuerdo con el que trabajarán, de manera privada y en formato semipresencial, los legisladores integrantes.
Los diputados propusieron realizar una mesa de diálogo, el próximo martes 6 de abril al mediodía, con expertos del tema para analizar la propuesta presidencial, con un máximo de ocho participantes. Pero aclara que la información del ejercicio “no será vinculante para el análisis de la iniciativa”.
En entrevista con La Silla Rota Jacobo Cheja, secretario de la Comisión de Energía y diputado por Movimiento Ciudadano, adelantó que la apuesta de la oposición es impulsar un parlamento abierto –y no solo una mesa de trabajo– al que sería convocado el titular de Petróleos Mexicanos, Octavio Oropeza.
“Esta aberración presidencial, a la Ley de Hidrocarburos, supuestamente busca combatir el huachicol, pero en realidad busca darle un poder absoluto a Pemex y a la Secretaría de Energía, para controlar toda la cadena de valor de los combustibles desde la exploración hasta su venta al usuario final”, afirmó Cheja.
El diputado sentenció que la propuesta no pretende combatir el robo de combustible, “porque no incluye reformas a la ley federal para combatir el robo de hidrocarburos; ni al código penal para sancionar con mayores penas estás prácticas”; sino “hacer a un lado los particulares”.
Aseguró también que, al igual que en el debate y análisis de la Ley de la Industria Eléctrica, el parlamento abierto permitiría escuchar “otro nivel de debate”.
“Necesitamos expertos, funcionarios, académicos, empresarios, necesitamos escuchar a Octavio Oropeza para que nos explique esta aberración que comenzó ya generar incertidumbre en el sector privado e internacional. Por eso no es suficiente una mesa de trabajo”, defendió el legislador.
Consideró que esta iniciativa no puede, ni debe seguir los mismos pasos de la reforma a la legislación del sector eléctrico, que un juez federal tuvo que ordenar una suspensión definitiva, “frente a un sinnúmero de suspensiones provisionales” que se decretaron ante la inconstitucionalidad de la reforma.
La ruta, pretendida por Morena para aprobar la iniciativa, es avanzarla hasta el pleno antes del 30 de abril, fecha en que concluye el último periodo de sesiones de la 64 Legislatura.
De no hacerlo así, la Cámara de Diputados tendría que convocar a un periodo extraordinario, que se empalmaría con el proceso de campañas y la jornada electoral del 6 de junio.
El presidente Andrés Manuel López Obrador envió a la Cámara de Diputados la contrarreforma energética que incluye "intervenciones" por "interés nacional" que sustituiría a la aprobada en 2014 durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
La iniciativa busca devolver a Pemex la rectoría de precios, importación, distribución y comercialización de combustibles en el país; y de avanzar, el sector energético del país regresaría a las condiciones previas a la reforma estructural impulsada por el expresidente Enrique Peña Nieto.
De acuerdo con Financial Times, los especialistas aseguran que hay elementos preocupantes si se suspenden dichos permisos, debido a que el Gobierno podría enviar una empresa productiva estatal, como se conoce a Pemex y CFE, para que maneje las cosas.
Además, señalaron que la propuesta no permitiría al Gobierno suspender las licencias otorgadas a las compañías petroleras privadas en subastas históricas luego de la reforma, que terminó con el monopolio de Pemex en el sector durante ocho décadas y que hay dificultades legales para que entre en rigor esta propuesta.
Por otra parte, si se suspendiera el permiso se podrá permitir a una empresa exportar cualquier petróleo crudo que produzca, debido a que la Reforma Energética liberó a las estaciones de servicio de la obligación de comprar combustible sólo Pemex.
(djh)