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La guerra que “Los Zetas” y el CJNG llevaron a Veracruz

¿Por qué se disputan Veracruz el CJNG y “Los Zetas”? No se trata de una rivalidad esporádica, sino que hay muchos intereses detrás.

Escrito en NACIÓN el

Seis hombres encapuchados, todos con armas largas, entraron amenazantes a la palapa “El Potro”, caminaron entre los cerca de 40 asistentes de la fiesta de Fluvina -una mujer que celebraba sus 52 años- hasta que hallaron la mesa de Julio César González Reyna, un transexual a quien apodaban “La Becky”, tras intercambiar unas palabras el comando disparó sin piedad.

El saldo 13 muertos –aunque extraoficialmente de habla de 14– entre ellos un bebé que apenas había cumplido el año de edad, y cuatro heridos. Los sicarios huyeron tras perpetrar la masacre en la colonia Obrera, en Minatitlán, Veracruz.

De acuerdo con la Fiscalía General de Justicia de Veracruz, la primera línea de investigación es la disputa entre “Los Zetas” y el cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), una rivalidad añeja que ambas organizaciones criminales trasladaron a tierras jarochas.

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Cabe mencionar que el CJNG nació como un brazo armado del cártel de Sinaloa, donde sus principales objetivos eran proteger a las familias de los capos –en su mayoría asentada en Jalisco– y exterminar rivales, principalmente “Los Zetas”, quienes había llevado la extrema violencia natural del narcotráfico a otro nivel.

Por ello, en principio la organización jalisciense fue nombrada como “Los Matazetas”.

Tras la muerte de Ignacio “Nacho” Coronel en 2010, el único contacto directo de su organización con el resto del Cartel de Sinaloa, el brazo armado se independizó, se unió con “Los Cuinis” –un familia conformada con 18 hermanos con un largo historial en el mundo del narcotráfico– y crearon el CJNG.

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Pese a la independencia, la disputa entre “Los Zetas” y el CJNG continuó. Mientras los de Jalisco incrementaban su imperio criminal, los de la última letra del abecedario comenzaban una debacle ocasionada por los embates del gobierno federal y la fractura interna de sus cabecillas.

Esto fue aprovechado por el CJNG, quienes llevaron la guerra a tierras que eran controladas por “Los Zetas”: Veracruz. Los hechos se evidenciaron el 20 de septiembre del 2011, cuando 35 cuerpos fueron abandonados en Boca del Río. Las víctimas eran presuntos halcones de “Los Zetas”; los perpetradores, el recién nacido CJNG.

La violencia se recrudeció en Veracruz, al pasar de una tasa de 11.42 asesinatos por cada 100 mil habitantes en 2011 a una de 18.15 homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes para 2018, es decir, un aumento del 58.9%, esto de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).

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Pero, ¿por qué se disputan Veracruz el CJNG y “Los Zetas”? No se trata de una rivalidad esporádica, sino que hay muchos intereses detrás.

Primero, Veracruz es cruce natural hacia el norte del país del lado del golfo, mismo que deriva en Nuevo Laredo, Tamaulipas. De acuerdo con la Administración para el Control de las Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), tanto “Los Zetas” y el CJNG utilizan la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo para traficar drogas hacia Estados Unidos.

Otra de las razones es la cantidad de puertos de altura que existen en Veracruz, mismos que abren la puerta al crimen organizado a Europa: el de Tuxpan, el de Coatzacoalcos y el de Veracruz.

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También, pero en menor medida, la venta de drogas en bares y antros locales es parte de la disputa callejera en tierras veracruzanas.

Finalmente, y una de las razones por las que más se ha recrudecido la violencia en Veracruz, es el robo de combustible. Tanto “Los Zetas” como el CJNG fueron de los primeros cárteles de la droga en incursionar al “huachicoleo”.

Incluso uno de los “huachicoleros” más peligrosos es Roberto de los Santos de Jesús, “El Bukanas”, de extracción zeta y por quien el gobierno de Veracruz ofrece 5 millones de pesos por su captura.  

De acuerdo con Petróleos Mexicanos (Pemex), Veracruz fue el sexto estado con mayor número de tomas clandestinas de combustible durante el año pasado.