Por segundo año una investigación exhibió que el nepotismo institucional dentro del Poder Judicial de la Federación (PJF) permanece y va en crecimiento.
Los senadores de Morena quieren intervenir en el tema con una iniciativa de ley para que los servidores de esta instancia hagan pública su declaración de intereses, así como vínculos familiares y de afinidad con otros integrantes del PJF.
Así son las redes de nepotismo dentro del Poder Judicial
La propuesta modificaría los artículos 112 y 131 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación para inhibir cualquier acción o conducta que otorgue beneficios personales indebidos a cualquier familiar de un funcionario, por el simple hecho de esa relación.
El fin de la propuesta es garantizar que sean los profesionistas calificados que cumplan con los requisitos establecidos en la propia ley, quienes tengan acceso a cargos públicos dentro de dicho Poder, y no por pertenecer al "linaje" que privilegian las redes de poder.
La iniciativa que firmó el líder de la bancada, Ricardo Monreal, refiere la urgencia de una reforma efectiva que establezca como causa de responsabilidad de dichos servidores públicos la realización o gestión indebida de nombramientos, promociones o ratificaciones.
Sobre todo cuando exista un interés personal, familiar o de negocios en el caso, o pueda derivar en alguna ventaja o beneficio para ellos o para sus consanguíneos y afines hasta el cuarto grado o parientes civiles.
Casi 50 días después, el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) se metió al asunto y este miércoles ordenó una investigación para identificar las relaciones y vínculos entre servidores públicos, a fin de informar sus resultados al pleno del órgano colegiado.
El reporte del investigador Julio Ríos para Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) no dio nombres, pero destacó una cifra alarmante sobre las redes familiares: el 87% de los cargos que tienen los parientes consanguíneos de jueces y magistrados poseen filtros meritocráticos muy bajos.
Además, los pleitos familiares se olvidan en la oficina con tal de ocupar un buen puesto de trabajo. Así ocurre en Guanajuato y el Estado de México.
El primer caso es de un magistrado que consiguió un espacio para su exesposa como oficial administrativo, mientras que su actual pareja tiene funciones como secretaria del tribunal. Aparte es la situación dos hijos a quienes también empleó.
El fenómeno es igual con un magistrado del segundo circuito en el Estado de México. El juzgador dio empleo a su esposa actual en el cargo de secretario de tribunal, y a su ex la mantuvo como secretario de juzgado.
Para el cuñado igualmente hubo un trabajo, pero como oficial administrativo. Otro ejemplo extremo es el de 17 familiares de un magistrado de circuito correspondiente a Durango, donde hay hijos, hermanos, concuños, cuñadas, primos y sobrinos en diversos puestos.
Con 11 parientes cada uno, es importante mencionar a dos magistrados más, de San Luis Potosí y Baja California.
JALISCO Y NUEVO LEÓN, “LA VERGÜENZA”
Otro estado líder en nepotismo es Jalisco, que tiene el primer lugar nacional en contratar a los hijos de jueces y magistrados como ocurre en el tercer circuito, con un porcentaje del 77 por ciento.
Le sigue en “solidaridad” con la familia Nuevo León con 73 por ciento, Tlaxcala con 70 y San Luis Potosí con 65 por ciento, así como muy de cerca Guanajuato con 63 por ciento.
La opacidad resiste en los datos del circuito judicial de la Ciudad de México y de Toluca, por lo que los participantes en la investigación dijeron que “es probable que las cifras reales sean bastante mayores”.
Es así que encontraron que las malas costumbres suman ya 25 años de nepotismo en el estudio "El déficit meritocrático. Nepotismo y redes familiares en el Poder Judicial de la Federación", a un cuarto de siglo de la creación de este órgano impartidor de justicia.
El reporte además detectó que los privilegios persisten, pese a que los familiares tienen una carrera judicial incompleta y una falta total de una preparación administrativa.
ams