El 70 por ciento de las armas que ingresan ilegalmente a México provienen de Estados Unidos y están ligadas al narcotráfico, por lo que el gobierno estadounidense requiere más datos de las agencias mexicanas y de los gobiernos estatales sobre las piezas decomisadas, para poder romper ese tráfico que representa una amenaza para la seguridad nacional de ambos países, concluye un reporte de la Oficina de Rendición de Cuentas del Gobierno (GAO por sus siglas en inglés).
La GAO, que es el brazo investigador del Congreso de Estados Unidos, reveló una versión pública de un reporte restringido sobre el tráfico de armas hacia México en donde destaca que ninguna de las agencias del gobierno estadounidense ha desarrollado plenamente medidas de desempeño para interrumpir el tráfico de armas de fuego a México.
Después de que el reporte “Estrategia antinarcóticos para la frontera suroeste, 2020” identificó el tráfico de armas como una amenaza para la seguridad de Estados Unidos y México, se le solicitó a la GAO realizar un informe sobre los esfuerzos estadounidenses para contrarrestar ese tráfico ilegal.
“Violentos crímenes perpetrados por organizaciones transnacionales del crimen continúan aumentado la preocupación sobre la seguridad en ambos lados de la frontera estadounidense-mexicana. Un reporte de 2020 del Servicio de Investigaciones del Congreso estima que desde 2006 más de 150 mil personas han sido asesinadas en México por el crimen organizado”, detalla.
Las armas de fuego provenientes de Estados Unidos que se trafican ilegalmente, estimadas por el gobierno de México en 200 mil anuales, están contribuyendo a esta violencia al facilitar el tráfico ilegal de drogas, agrega el reporte.
“La GAO propone ocho recomendaciones, incluso que la ATF y el ICE analicen información adicional sobre el tráfico de armas de fuego procedentes de Estados Unidos a México, y que la ATF, el ICE, la CBP y el Departamento de Estado desarrollen medidas de desempeño para evaluar los resultados de sus esfuerzos para interrumpir este tráfico. Las agencias coincidieron en las recomendaciones de la GAO”, señala.
Actualmente, las agencias del gobierno estadounidense tienen capacidades limitadas para evaluar su progreso, por lo que la GAO propone establecer medidas de desempeño, incluidos objetivos, indicadores, metas y marcos de tiempo, lo que aumentaría su capacidad para optimizar el uso de recursos del gobierno de Estados Unidos para abordar esa amenaza a la seguridad nacional.
El reporte explica que la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) del Departamento de Justicia descubrió que el 70 por ciento de las armas decomisadas en México, desde 2014 hasta 2018 y sometidas a rastreo, provenían de Estados Unidos.
“Sin embargo, la ATF no recibe datos completos sobre miles de armas de fuego, como aquellas recuperadas por estados mexicanos, ya que solo la Fiscalía General de la República de México presenta solicitudes de rastreo a la ATF”, resalta.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos ha identificado tendencias de tráfico mediante el análisis de datos del Departamento de Seguridad Nacional de 1 mil 012 armas de fuego confiscadas en Estados Unidos por agencias del gobierno.
“Sin embargo, el ICE no ha analizado los datos de la ATF de 56 mil armas de fuego estadounidenses recuperadas en México. Los datos y análisis adicionales podrían aumentar los esfuerzos de Estados Unidos para comprender las fuentes de armas de fuego y las rutas de tráfico”, agrega.
En abril del 2020, la ATF estableció la “Operación Southbound” a través de la cual se coordinó con otras agencias de gobierno con el propósito de interrumpir el tráfico ilegal de armas de fuego hacia territorio mexicano, y además realizó investigaciones relacionadas a México.
Durante el año fiscal 2020, que comprende del 1 de octubre de 2019 al 30 de septiembre de 2020, el ICE y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos establecieron una operación conjunta para interceptar el tráfico de armas hacia México por lo que en los primeros 10 meses del año pasado la CBP aumentó las inspecciones de salida en algunos puertos de entrada incautando 321 armas.
El reporte de la GAO refiere que el Departamento de Estado ayuda a liderear un grupo operativo que coordina esfuerzos conjuntos del gobierno estadounidense con el Gobierno de México respecto al tema de tráfico ilegal de armas de fuego.
Además, entre los años fiscales de 2015 y 2019 el Departamento de Estado proporcionó 54 millones de dólares para asistir en el fortalecimiento de las capacidades de México para interrumpir el tráfico de armas mediante entrenamiento forense, provisión de equipo de inspección y adiestramiento canino para la detección de armas.
fmma