Los agentes de los servicios de inteligencia mexicanos fueron testigos de cómo Elba Esther Gordillo escaló de manera política en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y cómo cada año consolidó su poder.
Los reportes de las reuniones, asambleas y congresos del SNTE, donde participó Gordillo, así como de las sesiones cuando fue diputada federal al inicio de la década de los 80, integran dos expedientes: uno realizado por la Dirección Federal de Seguridad (DFS) y el otro por la Dirección General de Investigaciones Políticas y Sociales (DGIPS), los cuales se encuentran en resguardo del Archivo General de la Nación (AGN).
Desde 1977, la DSF daba cuenta de las acusaciones en contra de la dirigente magisterial por actos de corrupción. Un agente relató la incursión de 40 maestros a las oficinas de la Sección 36 del SNTE, de donde Gordillo era secretaria general, para reclamar lo acordado en el II Congreso Ordinario.
El video de la captura de Elba Esther
Además, acusaron a la Profa. Gordillo Morales de tener varias plazas dentro de educación y de gestar cuestiones personales con las cuotas sindicales, así como de tener a sus hijos en las mejores escuelas del D.F., aspecto que desmintió la afectada”, dice el documento.
A los agentes de inteligencia del gobierno mexicano no les interesaba la vida personal de Elba Esther. Solo documentaron sus actividades dentro del Sindicato y como legisladora federal. De acuerdo con los reportes se infiere que los espías eran participantes directos en el SNTE, ya que hicieron relatorías muy detalladas de lo que ocurría en las Asambleas y Congresos. Daban pormenores de los discursos y de lo que comentaban los maestros sobre la dirigente.
El 14 de septiembre de 1983, luego de que Elba Esther fuera nombrada secretaria de Finanzas del CEN del SNTE, un informante relata la visita que hizo el entonces dirigente nacional, Alberto Miranda Castro a las instalaciones de la Sección 10, donde se percató que el mobiliario estaba bastante deteriorado, por lo que ordenó a Gordillo autorizar el presupuesto para comprar muebles nuevos.
Entre los mentores asistentes se comentó que la Profa. Gordillo Morales ha estado obstaculizando todas las gestiones presupuestales que realiza la sección 10 ante el CEN del SNTE, y que desde el punto de vista político, en los actos donde se le presenta la oportunidad, crítica al Profr. Villavicencio Altamirano, ya que desde ahora, la mencionada dirigente se está preparando para ocupar la Secretaría General, cuando en febrero de 1986 termine su gestión Miranda Castro.
Asimismo, señalaron (los maestros) que la Profra. Gordillo Morales actúa con prepotencia, porque según ella, cuenta con el total apoyo del Gobernador del estado de San Luis Potosí, Profr. y Lic. Carlos Jonguitud Barrios”, indica el reporte.
CAMPAÑA DE DESPRESTIGIO
En el expediente de la DGIPS, que data de 1979 a 1985, los agentes de ese organismo que estuvo adscrito a la Secretaría de Gobernación, mencionaron que se fraguó una campaña de desprestigio en contra de Gordillo Morales cuando era secretaria General de la Sección 36 del SNTE y fue designada candidata del PRI para una diputación federal.
En el SNTE ha trascendido que existe una labor de desprestigio en contra de la Profa. Elba Esther Gordillo, candidata diputada federal por el XXVI Distrito del Estado de México, por elementos del PCM, PRT, POAM y Frente Popular Independiente, mismos que han unificado sus fuerzas para evitar el triunfo de la actual dirigente de la Sección 36 del SNTE”, dice un documento del 16 de marzo de 1979.
La designación de Elba Esther como candidata del PRI generó mucha resistencia. Desde ese entonces, sus opositores intuían los malos manejos que presuntamente hacía al interior del SNTE.
Diferentes grupos de habitantes del municipio de Nezahualcóyotl, en particular los ubicados en el XXVI Distrito Electoral, continúan manifestando su inconformidad y su repudio por la designación de la Profra. Elba Esther Gordillo Morales, como candidata del PRI por el mismo Distrito, ya que consideran que se trata de una imposición que no están dispuestos a permitir en los diferentes procesos electorales, además de que manifiestan que la profesora ha estado utilizando su cargo de Secretaria General de la Sección 36 del SNTE para imponer a varios profesores en los actos en los que hace proselitismo”.
ASÍ DESCRIBIERON A ELBA ESTHER
En una ficha técnica, anexada al final del expediente de la DGIPS, los agentes resumieron en dos cuartillas toda la información recolectada en torno a Elba Esther. Proporcionaron datos de sus antecedentes, actividades públicas, capacidades de organización y oratoria, así como su interés político.
En ese reporte, describen a Elba Esther como “una persona déspota y antipática”, que cuenta con “recursos económicos y humanos, ilimitados debido a que todo el apoyo que recibe proviene del SNTE. Cuenta con hábil manejo de asambleas dentro de su gremio”.
También refirieron que en ese entonces mantenía relaciones políticas con Carlos Jonguitud Barrios, gobernador de San Luis Potosí; con Ramón Martínez Martín, senador; con Alberto Miranda Castro, secretario General del CEN del SNTE y con funcionarios del PRI, dada su posición dentro del partido. Además, apuntaron, que tenía relaciones con periodistas capitalinos para hacerse publicidad personal.
Los agentes señalaron que su experiencia electoral y el manejo de campañas era buena, debido a su participación en actos del PRI y campañas para diputados, y para la del presidente de la República, Miguel de la Madrid Hurtado. “Su participación se circunscribe al apoyo que brinda con grupos del magisterio”.
Destacaron que contaba con capacidad política y de negociación en el manejo de grupos del sector magisterial. “Sin embargo, el manejo lo ejerce siguiendo directrices del CEN del SNTE. Además, tiene manejo de grupos al interior del PRI”.
mlmt