“Ha sido como un periplo por diferentes espacios y decisiones políticas”, dijo el canciller Marcelo Ebrard sobre el traslado de Evo Morales de Bolivia a México.
En conferencia matutina, la aeronave tuvo problemas para llegar a Bolivia pues fue difícil obtener los permisos, durante esas negociaciones permaneció en Lima, Perú. Aunque se dio un pase inicial, cuando el avión estaba por cruzar a territorio aéreo boliviano, nos rechazaron y se volvió a Lima.
Finalmente, el comando de la Fuerza Aérea boliviana nos dio el permiso y se llegó al aeropuerto para recoger a Evo y ahí se da el momento más tenso para poder regresar a México.
Destacó que alrededor de las 19:30, hora de México, el gobierno de Perú informó a través de su canciller que cancelaban el permiso para el avión volviera a su territorio para recargar combustible.
Ebrard destacó este como el “periodo de mayor tensión” y “el peor momento”, en tanto conseguían un plan B.
Es entonces que se contacta al canciller de Paraguay, en tanto el presidente electo de Argentina habló con el presidente paraguayo, tras lo cual se da el permiso de ir por combustible a Asunción.
Debido a que las negociaciones se alargaron, reconoció la “sangre fría” del piloto mexicano enviado a Bolivia, ya que por “un milímetro” lograron salir de Bolivia a Asunción.
Ya en Asunción, se pidió pasar por el espacio aéreo de Perú, lo cual se concedió, al igual que Ecuador dio permiso para bajar en su territorio por combustible.
Para poder volver a cruzar espacio de Bolivia, el embajador de Brasil negoció el viaje por la línea fronteriza entre Brasil y Bolivia, además de que se tuvo que rodear Ecuador y llegar hasta aguas internacionales.
Se espera que llegue a México después de las 11:00 horas de la mañana o 11:30.
Rechazó que en algún momento la vida de Evo Morales haya corrido peligro.
lrc