Main logo

“El Quinazo”: a 30 años del golpe de Salinas al sindicato petrolero

“La Quina” se oponía desde el liderazgo sindical de la privatización de Pemex y demás políticas neoliberales, hasta que llegó Salinas de Gortari al poder

Escrito en NACIÓN el

En medio de un desabasto de gasolina en varios estados del país como consecuencia del plan al combate al robo de combustible, se cumplen 30 años del llamado “Quinazo”, protagonizado por el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari.

Pero, ¿qué a se refiere con el “Quinazo”?, así se llamó a la detención de Joaquín Hernández Galicia, “La Quina”, entonces líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).

Joaquín Hernández Galicia llegó a liderar el sindicato petrolero en 1958, manteniendo el poder por cinco sexenios: desde Adolfo López Mateos, pasando por Gustavo Díaz Ordaz, Luis Echeverría Álvarez, José López Portillo, Miguel de la Madrid y hasta el inicio del gobierno de Carlos Salinas de Gortari.

El 10 de enero de 1989, “La Quina” fue detenido acusado de homicidio y acopio de armas, tan solo una semanas después de que Salinas de Gortari tomara posesión como Presidente de la República.

Lo cierto es que Hernández Galicia había sido una pesadilla para el priista desde que éste se convirtió en candidato presidencial.

“La Quina” se oponía a las políticas de neoliberales de Salinas de Gortari y temía que Petróleos Mexicanos (Pemex) fuera privatizado.

Las diferencias entre el líder sindical petrolero y el recién llegado presidente de la república eran evidentes.

En las elecciones de 1988, Hernández Galicia habría llamado a decenas de miles de trabajadores petroleros a votar por el candidato opositor Cuauhtémoc Cárdenas.

Pese a ello, Salinas de Gortari ganó en medio de unos comicios que fueron señalados por opositores como un fraude electoral, donde el verdadero ganado habría sido Cárdenas.

La captura de “La Quina” se dio pronto, pues el presidente buscaba legitimar su administración iniciada bajo la sombra del fraude electoral, asegurando que la detención fue en el combate a la violencia y corrupción.

El homicidio que Hernández Galicia era acusado fue el de un agente federal. Según “La Quina”, el cuerpo del uniformado, encontrado en su casa, fue sembrado, al igual que las diversas armas que supuestamente poseía ilegalmente.

“La Quina” fue encarcelado en el Reclusorio Oriente de la Ciudad de México. Ahí, según relató el mismo líder sindical, fue protegido por el narcotraficante Rafael Caro Quintero.

Hernández Galicia aseguró que el gobierno de Salinas de Gortari lo intentó asesinar dentro de prisión, pero no lo logró gracias a la protección del “Narcos de narcos”.

Tras nueve años en prisión, “La Quina” salió de prisión a la mitad del sexenio de Ernesto Zedillo, gracias a una amnistía.

Al salir de prisión, pasó los últimos años de su vida en Tampico, Tamaulipas, exigiendo que le descongelaran sus cuentas bancarias con millones de pesos.

El 11 de noviembre del 2013, Joaquín Hernández Galicia falleció a los 91 años en un hospital de Tamaulipas.

En su lugar, frente al STPRM quedó Carlos Romero Deschamps, quien “La Quina” calificó como un traidor y su peor enemigo, pues ayudó al gobierno de Salinas de Gortari a que lo metiera a la cárcel.

Carlos Romero Deschamps ha sido señalado en diversas ocasiones por la opulencia en la que él y su familia viven.

Romero Deschamps, sin embargo, ha sido respaldado por el poder político, principalmente el que proviene del PRI, donde ha sido senador y diputado en diversas ocasiones.