El presidente Andrés Manuel López Obrador mantiene un doble discurso en relación con la pertinencia del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), pues mientras en sus conferencias matutinas desdeña su función, en un oficio enviado a la Cámara de Diputados reconoce la importancia y pertinencia de ese organismo autónomo.
Esta semana, en al menos dos ocasiones, el presidente ha cuestionado las funciones del IFT, incluso, este jueves anunció que la próxima semana revisará una iniciativa para que la administración pública pueda absorberlo, como parte de la Secretaría de Comunicaciones.
“Lo del IFT, por ejemplo, ¿qué?, ¿no puede pertenecer a Comunicaciones?, lo hacía antes Comunicaciones, ¿y qué? El IFT, de cuando se creó a la fecha, ¿ha hecho una muy buena labor?, o sea, ¿qué?, ¿ese trabajo no lo podría hacer la Secretaría de Comunicaciones?”, cuestionó en su conferencia de este jueves.
Pero el 16 de diciembre pasado, el presidente López Obrador envió a la Cámara de Diputados el oficio por el que remite las postulaciones de dos comisionadas al Instituto de Telecomunicaciones, donde afirma que ha habido grandes avances, desde su creación.
Según el oficio, firmado por el Jefe del Poder Ejecutivo federal, la reforma en telecomunicaciones de 2014 “se ha traducido en beneficios importantes, inmediatos y tangibles para los mexicanos, ya que las familias mexicanas pueden comunicarse a menor costo que en el pasado, con mayo cobertura y calidad”.
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En el oficio donde López Obrador propone a Sayuri Koike y a Laura González como comisionadas del IFT, él mismo asegura que es “indispensable que dicho órgano autónomo continúe funcionando con la más alta probidad, capacidad de respuesta y profesionalismo que lo ha caracterizado estos años”.
Desde el año pasado, el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, presentó una iniciativa para unificar al IFT y la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece); misma que el presidente dijo que apoyaría “se trata de ahorrar”.
“No sabía de esta iniciativa del senador Ricardo Monreal, pero si ayuda a reducir los gastos, si es para ahorrar, estoy de acuerdo, porque hubo muchos excesos en la creación de organismos, muchos innecesarios y casi todos muy costosos, con mucho gasto.
“Este organismo, el IFT, tiene como 40 direcciones, es un aparato burocrático excesivo. Pero no es el único caso, el instituto de transparencia igual y en el caso del instituto de transparencia su presupuesto es más de mil millones de pesos al año”, dijo en junio.
Se espera que, en el periodo extraordinario de la tercera semana de enero, el Congreso ratifique los nombramientos de comisionadas enviados por el presidente en diciembre.
ADVIERTEN RETROCESO EN PROPUESTA
Tras informar sobre la propuesta de que órganos autónomos como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), así como el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), sean absorbidos por la Secretaría de la Función Pública (SFP) y la de Comunicaciones y Transportes, el Observatorio Nacional Ciudadano de Seguridad, Justicia y Legalidad (ONC) y la Red Nacional de Observatorios (RNO) advierten que se trata de un retroceso.
A través de un comunicado, las ONG señalan que la iniciativa omite que las funciones que estos organismos desempeñan al ser realizadas por otras instancias públicas federales, aumentaría el gasto corriente y conllevaría ineficiencias administrativas y jurídicas considerables.
Además, la iniciativa implica un riesgo ante la pérdida de autonomía en la toma de decisiones, señalan ONC y RNO.
Sobre los dichos del presidente que los órganos autónomos presuntamente duplican funciones de las propias dependencias federales, las ONG señalan que eso revela un desconocimiento del origen y naturaleza de estos órganos.
“Las instituciones autónomas no surgieron de la intención de unos cuantos actores políticos como se presupone, sino de un impulso ciudadano para generar contrapesos eficaces y permanentes a la autoridad”, señala el comunicado.
ONC y RNO advierten que eliminar algunos de estos organismos generaría riesgos para la democracia, así como en materia de derechos humanos, transparencia, acceso a la información,
competencia económica, telecomunicaciones, entre otros.
(djh)