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Duplican gasto en seguridad sin resultados en 10 años

En un estudio del Senado, el crecimiento de la inversión ha superado el gasto neto federal y el de la economía mexicana en su conjunto

Escrito en NACIÓN el

Los niveles de violencia o inseguridad no han bajado a pesar de que en los últimos 10 años, entre 2006 y 2016, se duplicó el gasto público en seguridad al pasar de 130 mil millones de pesos a 264 mil millones de pesos.

En un estudio del Senado, citado por Reforma, el crecimiento de la inversión ha superado el gasto neto federal y el de la economía mexicana en su conjunto.

“El incremento nos indica que las administraciones federales sí han contado con recursos durante los últimos 10 años para impulsar mejoras en la seguridad y la justicia en México”, se precisa en el documento elaborado por el Instituto Belisario Domínguez.

“Estos incrementos en el gasto contrastan, por así decirlo, con la situación de inseguridad que se ha vivido en México durante estos mismos años”, se agrega.

En materia de recursos, el Poder Judicial de la Federación obtuvo 1.6 veces más entre 2006 y 2016, mientras que se dieron 3.6 veces más para Seguridad Pública, centralizada en la Secretaría de Gobernación.

En el análisis de los casos, se indica que la inyección de dinero se debió principalmente a recursos ejercidos por la Policía y el Sistema Penitenciario federales.

“El gasto ejercido por la Policía Federal se cuadruplicó en términos reales y el gasto de la unidad de Prevención y Readaptación Social se multiplicó 8.8 veces entre 2006 y 2016”, se apunta.

Los operativos de la PF en los últimos diez años han costado 242 mil millones de pesos. Los recursos para la actividad administrativa ligada a los reclusorios subió 13.6 veces en términos reales.

PGR y CNDH se han mantenido en los mismos niveles de gasto en dicho periodo.

“Es de llamar la atención el caso de la PGR pues, en teoría, es la principal institución a cargo de la investigación de delitos del fuero federal”, se menciona.

Se concluye en el estudio, citado por Reforma, que las asimetrías confirman la percepción de que el Gobierno ha concentrado sus esfuerzos en una estrategia de “combate frontal” y no al mejoramiento de las capacidades de investigación y recopilación de evidencia delictiva.

lrc