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Describe ASF fallas en Estancias Infantiles

El gasto promedio anual por niño atendido en las 9 mil 399 estancias infantiles en 2017 de Sedesol fue de 11 mil 500 pesos; 958 pesos mensuales

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La Auditoría Superior de la Federación (ASF) describió una serie de fallas en las estancias infantiles, las cuales están en el debate ante la decisión del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) de recortar sus recursos por presunción de corrupción.

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La ASF entregó hoy a diputados los informes individuales correspondientes a la tercera etapa de revisión, así como el Informe General Ejecutivo sobre la fiscalización superior de la Cuenta Pública 2017, lo que complementa las presentaciones realizadas en los meses de junio y octubre de 2018.

La Auditoría señaló que el gasto promedio anual por niño atendido en las 9 mil 399 estancias infantiles en 2017 de Sedesol fue de 11 mil 500 pesos, esto es de 958 pesos mensuales. Cabe mencionar que tanto el IMSS como el ISSSTE tienen un servicio de guardería que atiende a hijos de derechohabientes.


Por ejemplo, la Sedesol no acreditó que: Las estancias cumplieran con los criterios y requisitos de seguridad establecidos en las reglas de operación; el cumplimiento de los criterios y los requisitos de calidad establecidos en las reglas de operación del programa para ser afiliadas, y la capacitación de los responsables de las estancias en materias como protección civil.

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Incluso la Auditoría detalló que hay la presunción de pagos por servicios no prestados a las estancias infantiles.

En 2017, precisó la ASF, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado y el Instituto Mexicano del Seguro Social, así como la Sedesol, cumplieron con el objetivo de ofrecer servicios de atención y cuidado a 236 mil 236 niñas y niños, hijos de derechohabientes, y a 327 mil 854 infantes de madres, padres y tutores sin acceso a seguridad social, respectivamente.

Tampoco se tiene la certeza de que los servicios ofrecidos en todos los centros de atención infantil cumplieron con los requisitos de seguridad y calidad establecidos, advierte.

“No es posible asegurar que todo el personal responsable de la atención y cuidado de los niños esté capacitado, y no se logró verificar si los infantes adquirieron los conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes necesarios para su desarrollo integral”, especificó.