Main logo

Desaparecer el INAI, una “tontería” de AMLO: Mauricio Merino

El especialista en transparencia advierte que AMLO se opuso a organismos de transparencia desde el 2000; “el presidente desea un Inai como lo propuso Fox”

Créditos: Especial
Escrito en NACIÓN el

La idea del presidente Andrés Manuel López Obrador de eliminar el Instituto Nacional de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) es “técnicamente una tontería”, así lo calificó Mauricio Merino, experto en rendición de cuentas.

Decir que se puede suplir al Inai con la Función Pública no solamente representa un grave error en términos -obvios- de división de poderes, sino que representa una amenaza directa a la conformación misma de la República. ¿Cómo se le ocurre?

“No se puede, no mientras vivamos en una República y no en una Monarquía. En la propuesta hay un problema técnico, más allá de la intención política -que yo creo mala- del presidente, es que, técnicamente, es una tontería”, asegura.

En entrevista con La Silla Rota, el presidente de la organización Nosotrxs recuerda que, siendo Jefe de Gobierno de la capital del país, López Obrador se negó a impulsar el Instituto de Transparencia local, incluso, interpuso recursos legales para impedirlo.

“Como Jefe de gobierno, se negó rotundamente a impulsar el instituto de transparencia del entonces Distrito Federal, él interpuso recursos jurídicos para oponerse a la creación del instituto, por fortuna se ganó la batalla, en 2007, de homologar los criterios de acceso a la información en toda la República”, detalla en la entrevista.

Con la propuesta de López Obrador, advierte Merino, se tendría un organismo con las mismas características que lo planteó, en 2002, el expresidente Vicente Fox, sólo con autonomía técnica y que no hacía otra cosa que organizar la información que los organismos obligados le proporcionaban.

“Lo que el presidente está proponiendo es, en el mejor de los casos, lo mismo que propuso Vicente Fox. Pero entre 2003 y 2007 hubo un caos, porque el gobierno entregaba lo que le parecía razonable entregar, no había diferencia”, relata.

Aún después de las reformas impulsadas por el gobierno del entonces presidente Felipe Calderón -que buscaba legitimidad por todos lados, según cuenta Merino-, el entonces Ifai no contaba con la experiencia y las facultades para proteger el derecho de acceso a la información y la protección de datos personales.

Las reformas propuestas por la sociedad civil, para fortalecer al Ifai, representaron -en 2014- el primer ejercicio de Parlamento Abierto en el Congreso federal. Merino asegura que desde el Grupo Oaxaca y hasta la Red de Rendición de Cuentas, la concepción de lo que hoy representa el Inai ha sido un triunfo democrático de la ciudadanía.

Hubo que pelear mucho para que, por fin, naciera el Inai, con una nueva ley general que, por primera vez, en la historia parlamentaria mexicana -de ese tamaño fue el asunto- fue redactada, artículo por artículo, entre legisladores y los ciudadanos

Para Merino, la propuesta del presidente no sólo ataca un derecho fundamental, sino que atenta contra la división de poderes de una democracia moderna y, aunque no ha sido el único gobierno que ha intentado impedir el acceso de los ciudadanos a la información pública, debe darse -ahora- una batalla frontal para defender ese derecho.

Si se reforma la Constitución, retrocederíamos 20 años, volveríamos al momento previo a 2003 -porque en ese año por lo menos había un Ifai-. Eliminar el Inai nos llevaría de regreso al periodo del que él se duele, hay una contradicción flagrante, dice que no quiere volver atrás, pero es lo que está haciendo

Sobre el argumento del presidente López Obrador, de que en las conferencias de prensa matutinas que ofrece, se transparenta la información del gobierno, Merino asegura que es “imperdonable”, “confundir información con propaganda”.

“Lo que está proponiendo el presidente no tiene ninguna base, es un despropósito monumental. Preocupa porque él tiene mucho poder político y tiene muchas ganas de incrementarlo: controlar la agenda política y, además, controlar la información, es históricamente delicado”, concluye Merino.

(MJP)